Canal Roya desde debajo de la Gradillere.
Aparcamiento de Aneu, Centro Pastoral,
Plaa de la Gradillere y Col Houer.
28-12-2019.
Salida 10:45 h. Llegada 14 h.
Sol.
Bastante fácil.
Oscar Layos y Mariano Javierre.
Mapa de Canal Roya procedente de Iberpix. Vía en amarillo.
Hablamos
de ir a foquear algún día por ahí y
puesto que el anticiclón ya se ha instalado, ni cortos ni perezosos, decidimos
hacerlo hoy 28 de Diciembre de 2019, Día de los Inocentes. La inocentada de
hace trece años nos pasa inadvertida
hasta bien pasado el día y rebobinando posiblemente hemos tenido hoy unas
condiciones muy similares a aquel día.
La mañana en el Aparcamiento de Aneu es prometedora.
No
madrugamos pues a pesar de que habrá habido inversión térmica, hay que dar
tiempo al sol para que haga su faena. De esta forma son las once menos cuarto
cuando tras aparcar frente a la Cabaña Arraille, comenzamos a foquear a 1725
metros de altitud y al solecillo de una luminosa mañana.
Nieve dura en la Parte Baja del Valle de Aneu.
La
nieve está bastante dura, cosa de alguna forma esperada, pero las huellas
hechas por un auténtico ejército de raqueteros y esquiadores no son profundas
ya que no han sido hechas sobre nieve blanda y se foquea bien.
Nieve trillada que esperamos revenga con el sol.
Pasamos
junto al Centro Pastoral y tomamos la ladera izquierda del barranco para ir
remontando resalte a resalte en dirección oeste un camino que conocemos de memoria.
Aparece Canal Roya.
Subimos
con gente por delante y por detrás tanto raqueteros como esquiadores pues se
trata de un día de especial concurrencia en el Valle de Aneu. Nuestro ritmo
tranquilo pero persistente. Con la excepción de cuatro que suben la Hount de la Glere a crampón, los restantes
vamos enfilados en busca de las luminosas laderas del Col de Houer.
En la sombra de la Glera la nieve está dura como se esperaba.
La
Peña de la Glera está espléndida e ingrávida como siempre y proyecta una enorme
sombra sobre el acceso al Plaa de la Gradillere en la que nos introducimos tras
superar pequeños y sucesivos resaltes que se foquean bien.
Es aspecto de Canal Roya es espléndido.
Vamos
adelantando gente y salimos al sol tras un esperado tramo de nieve durísima que
esperamos no se esquíe mal ya que la nieve está bastante uniforme.
Acercándonos al Col Houer.
Superamos
el resalte de salida del Plaa de la Gradillere e iniciamos seguidamente la
diagonal de la Este de Canal Roya y que nos deposita en el Col de Houer situado
a 2250 metros de altitud.
La Norte de Canal Roya está como el cristal.
El
amplio collado está concurridísimo y la arista norte del pico refulge
salvajemente helada cuando nosotros comenzamos el ascenso de la rampa terminal;
mientras, contemplamos que algún esquiador sube con cuchillas y varios con los
esquís en la chepa y a crampón.
Bajamos, a pesar de la nieve, como podemos.
Al
final de la diagonal inicial y aprovechando un pequeño rellano ponemos
cuchillas por si acá. Mientras realizamos la faena vemos que algunos
esquiadores bajan con crampones y con los esquís en la mochila; este hecho nos
mosquea bastante pero continuamos para arriba.
Ya muy abajo la nieve mejora pero muy poco.
Es
corriente que la ladera terminal del pico este muy dura pero nunca la había
visto con placas vítreas en las que ni siquiera las cuchillas la rompen. Se
debe tratar de las placas que las abundantes lluvias pasadas dejaron sobre la
ladera. Hoy la gente sube en guerrilla, cada uno por donde mejor le parece y no
hay huelas definidas, menos de esquís.
El lado soleado del tubo está aceptable.
Me
termino acercando al pasillo de la llegada a la cima y compruebo que tal
pasillo, normalmente machacado por el tránsito, no existe y nos damos la
vuelta, no quiero hacer con mi acompañante la “broma” que es frecuente en el
mundillo del esquí y que consiste en poner a algún compañero en un apuro del
quince para joderlo.
En el Rellano Inferior la nieve está decentilla pero ya...
Con
cuidado nos bajamos hasta un pequeño rellano en la ladera, hacemos la
transición tranquilamente mientras comprobamos que solamente bajará esquiando
una pareja y con algún apuro y nos bajamos hasta el Col Houer. Es la una.
Es el día de los Inocentes.
La
salida desde el collado tiene media docena de giros divinos, pero allí se
acabarán las bondades: la nieve cristalina no ha transformado en absoluto y no
hay forma cómoda de romper las rugosidades para deslizar con lo que los giros
son generalmente incómodos y al entrar a
la amplia sombra de la Glera ya es la leche.
llegando al Aparcamiento de Aneu con muchas ganas.
Algunos
bajan por la zona soleada opuesta a la ruta normal pero yo no la conozco y no
me fío.
Salimos
al sol y en el pequeño tubo, la nieve ha transformado la mitad orientada al sur
pero el resto sigue igual. Quizás sea una premonición de lo que nos espera en
esta temporada con elevadas temperaturas y anticiclón con ausencia de
precipitaciones cuando no sean de agua.
Tres muñecos en la nieve del Portalet de Aneu.
No
recuerdo un Canal Roya en tan malas condiciones y hemos subido bastantes veces.
A las dos llegamos al Aparcamiento de Aneu en una jornada con 650 metros de
desnivel y en la que el descenso ha sido un sofisticado martirio. El sol ha
trabajado a medio gas y así…