31 ene 2013

6-13. ERATA CON ESQUIS POR PRIMERA VEZ. 31-1-2013.

La Oeste de Erata.

Pista de Espierre, Ermita de San Juan y Cara Oeste.
31-01.2013.
Salida 10 h. Llegada 16 h.
Sol.
Muy fácil.
Rosa Mª. Martínez y Mariano Javierre.

Mapa de Erata procedente de Prames. Vía en amarillo.

            Hacía ya algunos años que decíamos de subir a Erata con los esquís pero nos ocurría que los momentos propicios se nos escapaban, bien es cierto que la nieve en este monte no dura demasiado en las condiciones que nosotros precisamos.

            Anteayer en Oturia nos decimos que ésta podría ser una buena ocasión y hoy 31 de Enero de 2013, para despedir el mes, nos vamos al asunto.

            En Erata hemos estado un buen número de veces, casi siempre con mal tiempo, es uno de esos montes socorro para los días meteorológicamente malos. Hemos subido desde el Túnel de Cotefablo y desde Espierre, lo que me recuerda que tenemos pendiente el ascenso desde Yésero.

            Hemos preferido ascender desde Espierre por su Cara Oeste y, consecuentemente, son las diez de la mañana cuando estamos pasando la barrera de la pista en Espierre a 1250 metros de altitud.

            Teníamos asumido que a lo mejor habría que portear los esquís un poco pero no va a ser así: la pista tiene, además de las dos rodadas de vehículos, nieve suficiente a ambos lados y una decidida y primorosa huella de esquís que vamos a seguir.

 
            Se nos hace calorcillo enseguida pista arriba en dirección este, en una soleada y luminosa mañana. Pasamos junto al corral de la orilla de la pista y enseguida desaparecen las rodadas de los coches con lo que la pista queda  toda para caminantes, raquetistas y esquiadores.

            Poco después alcanzamos la Ermita de San Juan de Espierre y proseguimos pista adelante siempre en muy suave ascenso hasta que alcanzamos la primera lazada al norte a la que le seguirá otra que nos deposita bajo el Collado de Espierre  a 1560 metros de altitud. Aquí la pista se va al sur y llana al praderío del centro de la ladera y las huellas marchan al norte hacia el Collado de Gavín para subir por la Arista Oeste.


            Nosotros nos vamos por medio. Conocemos la ladera y vamos en busca de campos de nieve suaves que nos permitan pasar por entre las zonas venteadas que ya pintan la nívea ladera.

 
            Subimos un suave resalte y proseguimos en dirección sudeste atravesando la ladera siempre en busca de evolucionar en ascenso y al norte del Barranco de Espierre.

            Pasamos por encima del rellano de la majada y nos aproximamos a un depresión paralela a la Arista Nordeste y al Barranco de Espierre que corta en dos la ladera. Consecuentemente con esto, ganamos altura pasa pasar la depresión en su parte alta y sin dificultad.
 

            No divisamos paso alguno que esté cubierto completamente de nieve pues el resalte está algo venteado y tomamos una trocha de ganado que atraviesa el resalte y nos saca a un pequeño lomo herboso y pelado que atravesamos sin quitarnos los esquís.


Con la Partacua de fondo.

            Por encima del resalte aparecen los campos superiores muy cubiertos de nieve en los que vamos a proseguir en dirección sudeste. Poco más arriba viramos al norte y describimos una amplia diagonal que nos acerca al final de la arista nordeste.

 
            En la arista nos recibe el viento y con ella nos vamos ya prácticamente de llano y en dirección sur hacia la cima.



            Es la una menos cuarto cuando alcanzamos la Cima de Erata a 2003 metros de altitud. Nos hemos cruzado con un esquiador que ha subido desde Cotefablo.
 

            En la cima hacemos alguna foto y buscando abrigo del viento en la parte este nos sentamos en la nieve y al sol para comer.

Ordesa desde Erata.

            El cielo está bastante limpio y nos ofrece un amplio paisaje en el que destacan Telera, Otal y Las Tres Sorores por encima de todo. No faltan los vecinos próximos: Oturia, Manchoya, Oroel y Guara. La Montañesa se asoma discretamente.

Ermita de san Benito.
 
            Media hora después recuperamos los esquís y nos vamos por la arista hacia el sur hasta alcanzar el emplazamiento de la Ermita de San Benito. La vuelta de nuevo a la Cima de Erata la hacemos con las taloneras sueltas y sin las pieles, la nieve lo permite.

            Allí llaneamos sobre nuestra propia huella hacia el norte y seguidamente iniciamos el descenso de la ladera que haremos aproximadamente por el lugar que hemos subido. La nieve de la parte alta está bastante bien pero dura poco pues enseguida se pone blanda y profunda haciéndose difícil para girar. De cualquier forma llegamos al resalte y nos quitamos los esquís para atravesar  la misma trocha de ganado en la que encontramos a cuatro que se dan la vuelta.


            De allí para abajo continuamos con una amplia diagonal descendente que nos deposita en la pista justamente en el lugar donde la hemos abandonado al subir.

Pisteando junto a la Ermita de San Juan.
 
            La pista, para compensar se desliza bien a pesar de que la mayor parte es muy llana.

Campos de nieve de la jornada.
 
            Nos quitamos los esquís en la barrera. Son las tres y media de la tarde y hemos liquidado Erata con  770 metros de desnivel y con el regusto de una nieve que las temperaturas de la noche la han blandeado demasiado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Gracias por tu comentario! Responderé tan pronto como lo localice.