Casquete Somital de Besiberri Sur.
Pico Simó, Pico Jolís, Arista Sur, Corredor Oeste, Cima
de Coma Lo Forno, Corredor Nordeste, Bases, Barranco de Riumalo y Embalse de
Cavallers.
12-08-1994.
Salida 11:45 h. Llegada 19:30 h.
Sol.
Bastante fácil.
Juan Castejón, Rosa Mª. Martínez y
Mariano Javierre.
Mapa de Besiberri procedente de Iberpix. Vía en amarillo.
El
periplo ha durado poco y enseguida, son las doce y cuarto, retornamos a Punta
Simó, recogemos las mochilas y ponemos rumbo al sur pues el 12 de agosto no ha
terminado todavía ni mucho menos.
Enseguida
pasamos por el Pico Jolís con sus 3003
metros de altitud y en suave descenso, cada cual por donde mejor le parece, nos llegamos al collado por el que nos hemos
incorporado a la cresta principal.
En la Cima de Besiberri Sur.
Hemos
visto el Besiberri Sur y tenemos que atravesar el potente espolón que arranca
de la cresta en dirección nordeste casi en su inicio. Salvamos a continuación
un par de dientes a media ladera este, junto a su base sin perder casi
altura y nos encaminamos a través de un
potente nevero bajo la Cara Este del Besiberri Sur para encaramarnos al collado
de separación con el Coma Lo Forno.
Cuando
empezamos a faldear el pico cambiamos de idea y tomamos un corredor bastante
descompuesto que mediante una trepada elegante, una más del día, nos deposita
en la Cima del Besiberri Sur a 3030 metros de altitud cuando es la una del
mediodía y damos por liquidados los tres Besiberris.
Encontramos
una cordada de tres con dos jovenzuelas
encordadas que se van hacia el Collado
de Abellaners por una loma dulce que poco o nada tiene que ver con la cresta
que es nuestro plato del día. Nos hacemos una foto con el Celestín Passet y el
Coma Lo Forno.
Abellers y Besiberri Sur desde Senyalada 5-8-16.
Leemos
el mensaje del sordo y dejamos el nuestro en la caja; diez minutos más tarde,
dispuestos a no perder demasiado tiempo, emprendemos la continuación de la
cresta faldeando un par de dientes de respetable aspecto.
Para
ello hemos de perder algo de altura y atravesar en descenso un profundo
corredor que se pierde allá abajo en la cara oeste y faldeando de nuevo en
horizontal nos vamos en busca de los corredores que habíamos visto el día
anterior desde el Passet.
Cima de Coma Lo Forno, detrás Punta Passet.
Alcanzamos
los corredores bastante abajo y mientras Juan se marcha hasta la Brecha de Coma
Lo Forno para ver cómo está, pues desde aquí está tirado llegar a ella;
nosotros tomamos un amplio y descompuesto corredor en dirección este y
alcanzamos el quinto y último tresmil del día.
Hacemos
fotos. Luego llega Juan que dice que se sube bien. Comemos un poco mientras
decidimos al sol del mediodía y ante el enorme paisaje que se abre por fin a
nuestros ojos.
Desde Besiberri Sur los Centrales y el Norte.
Tenemos
que decidir entre hacer en descenso la Cresta del Coma Lo Forno hasta la Brecha
de Coma Les Torres continuando el regreso ya por camino conocido, o bien
tirarnos para abajo por cualquier corredor situado entre el pico y el Besiberri
Sur ya que sabemos que es posible.
Coma lo Forno desde Celestín Passet.
A
las dos y veinte, ya hemos tomado la decisión: descenderemos un poco la cresta haciendo casi idéntico camino al que hemos
hecho nosotros subiendo, pero perdiendo menos altura y alcanzaremos una brecha
entre dos potentes dientes situados a media cresta. Allí nace un descompuesto
corredor, más bien corto, que nos desmontará de la pared en dirección este y que
descenderemos con cuidado y poco más.
Casquete Somital de Coma Lo Forno.
Nos
depositará en una corta pedrera en la que buscamos tramos de gravera para bajar
al trote y colocarnos en la parte superior del nevero más alto. A partir de
aquí, patinando de nevero en nevero, nos vamos hasta un poco más debajo de los
Estanys Gelats del Coma Lo Forno transitando siempre el fondo de valle
colmatado de neveros residuales.
Besiberris Centrales y Norte desde Coma lo Forno.
Cuando
rematamos el último nevero queda un pequeño tramo de pedrera granítica que
hacemos directos hacia la tienda. En una hora nos bajamos de cima a tienda, son
las tres y veinte.
Maladetas desde la Cima de Coma Lo Forno.
Nos
refrescamos un poco y preparamos tranquilamente la comida con un poco de
ensalada que es el lujo que nos hemos permitido. Se está bien al sol pero a
cubierto del fresco viento que ha campado durante todo el día y al que debemos
el desalojo de las nieblas. echamos una dilatada siesta montañera al amor del
cálido sol.
El Barranco de Riu Malo desde el Planell.
A
las cinco y media recogemos y nos vamos para abajo en dirección nordeste al
encuentro del camino que discurre junto al Barranco de Riu Malo, cómodamente
sobre manchas de pratenses. Incorporados al mismo el camino se vuelve incómodo:
la pradera está llena de trampas primero y después porque, ya en la margen
izquierda del barranco, el camino desciende bruscamente y encajonado en el tajo
practicado. Entendemos perfectamente el topónimo y se nos hace largo a pesar de
que las mochilas pesan poco.
Cavallers desde la cola.
En
el Planell de Riu Malo paramos a echar un cigarro y a remojar los pinreles en
un fino praderío del que se está marchando ya el sol. Luego, “solamente” nos
queda contornear el Embalse de Cavallers en dirección sur por su orilla
izquierda. Se nos va a hacer tedioso, pesado y eterno. Bajar los 700 metros y
rodear se nos va a llevar casi dos horas, lo que ya está bien.
Cogemos
agua en el embalse y nos llegamos hasta el coche: ponemos música, descansamos,
hacemos la cena y a las ocho y media cenamos en medio de una cálida tarde en la
que todavía hay movimiento de coches que abandonan el paraje.
Montamos
la tienda mientras Juan marcha a por agua cuando ya anochece y a las nueve y
curto nos reunimos en la tienda pues estamos algo sobados: no en broma hemos
subido 1200 metros y bajado 1900 además de deambular muchos ratos por la cresta
y mañana hay que levantarse a las siete.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¡Gracias por tu comentario! Responderé tan pronto como lo localice.