28 ago 1994

11-94. PEÑAS BLANCA, PARDA Y TELERA. 28-8-1994.

Vertiente norte de las tres cimas del día.

Ibón de Piedrafita, Brecha Telera y Corredor Sur a Peña Blanca. Descenso a Brecha de Telera, Norte de Peña Parda, Corredor Nordeste y Cara Sur de Telera. Descenso a Peña Parda, Cara Sur, Brecha de Telera e Ibón de Piedrafita.
28-08-1994.
Salida 10 h. Llegada 18 h.
Sol.
Bastante fácil.
Ascensión.

Rosa Mª. Martínez y Biola y Mariano Javierre.

            -Biola no ha estado nunca en Telera. (Nosotros no hemos estado en Peña Parda.) Pordríamos ir.
            -A lo mejor es un poco largo.
            Bueno, hay que subir poco más de 1000 metros pero el día todavía es largo y además parece que va a ser un fin de semana estupendo.
            -También podríamos hacer algo más corto…
            -Sí, y también nos podríamos  quedar tranquilamente en nuestro jardín.  Comentábamos mientras subíamos con Biola de nadar los Campeonatos Provinciales de Natación, que por cierto, había vuelto a ganar GMS como era casi costumbre.
            El tema queda en el aire pero el despertador suena a las siete del 28 de Agosto de 1994 y lo volvemos a poner para las ocho aunque no hay nada preparado ni mucho que preparar.

Corredor a la Brecha de Telera y Peña Blanca.

            A las nueve nos metemos en el coche y marchamos a Biescas. En Saqués tomamos la carretera nueva    que tras 3 kilómetros nos deja en Piedrafita, luego 6 kilómetros más de pista nos conducen a un ensanche en el que aparcamos entre dos furgonetas francesas. Son las diez de la mañana.
            Inmediatamente nos echamos al abrasado praderío de este verano. La mañana es estupenda.
            Pronto pasamos junto al menguado Ibón de Piedrafita a 1612 metros de altitud y en dirección sur- suroeste, atravesamos la cubeta lacustre en la que encontramos merendera montana, cardo azul y rosal silvestre vestido de rojo centelleante y nos introducimos en la pedrera del amplio corredor de calizas mesozóicas que nos ha de conducir a la brecha de Telera.
            Decidimos utilizar el acceso oeste: un corredor que desconocemos pero que al menos nos brindará sombra para subir y esperamos que pocas dificultades.

Telera y el Corredor a la Brecha de Telera. 

            Se inicia con un resalte fácil y se continúa con una pedrera de buenas proporciones que finaliza en un pequeño resalte. Poco después, otro pequeño resalte pero con materiales en pésimas condiciones nos entretiene un poco. Luego el corredor se empina, se amplía y se viste de verde sobre materiales absolutamente inestables.
            Salimos al sol y por fuerte pendiente herbosa alcanzamos la amplia hondonada intermedia en la que nace el tramo superior del corredor.

Desde el rellano Intermedio el Corredor a la Brecha de Telera.

            Atravesamos la hondonada por su parte oeste y reiniciamos el ascenso, bolo a bolo, hasta alcanzar un afloramiento rocoso firme en medio del corredor, bajo el que paramos a almorzar, Biola no ha comida nada y son casi las once y media.
            Continuamos poco después con el buen ritmo que hemos tomado, buscando tramos de camino favorables en la parte izquierda del corredor que nos saquen de la forma más cómoda posible al sol, cosa que se produce a las doce y cuarto. Estamos en la Brecha de Telera a 2450 metros de altitud.

Ascenso a Peña Blanca por el sur.

            Contorneamos Peña Blanca yéndonos hacia el este hasta un minúsculo collado próximo, perdiendo un poco de altura. Sabemos que desde allí nacen unos corredores que van casi hasta la punta. Tomamos el primero que es muy vertical pero con presas numerosísimas, firmes y buenas y encontramos flor de nieve y un final tieso como él solo.
            Por encima se abre un praderío inclinado y paramos pues a Biola le aprieta el pecho. Según dice Rosa son los nervios al día siguiente de una competición.

En la Cima de Peña Blanca con Parda y Telera detrás.

            Una ligera crisis de asma se nos va a llevar entre buitres y chobas, casi una hora, pero es tan suave que a pesar de no haber terminado nos decidimos a continuar.
            Quedan unos 50 metros bastante tiesos que subimos un poco por cualquier parte; nos llevan poco a poco a la cresta y de allí a la Arista Cimera de Peña Blanca situada a 2541 metros de altitud cuando son las dos menos cuarto.
            Hacemos una foto con las gorras en la mano y faldeando por el oeste alcanzamos de nuevo la cresta y nos vamos para abajo, que Biola no va mal.

Bjando los corredores en la Sur de Peña Blanca.

            Tomamos el segundo corredor pero casi al final hacemos una travesía y terminamos en el que hemos subido. Luego tras el breve repecho recorremos la brecha de parte a parte y en su extremo oeste paramos a comer.
            Tomo un bocado y a las dos y media con una cantimplora y el chubasquero me voy hacia Telera. Lo hago por el lado norte bajo los importantes paredones de la Cara Norte de Peña Parda, por camino que ya conozco. Hay que atravesar hacia el oeste toda la Cara Norte de Peña Parda y llegado al corredor tomarlo en dirección sur ascendiendo por el mismo hasta el collado inferior.

Brecha de Telera desde la Norte de Peña parda.

            Subo a tope, no da más el fuelle. El corredor es fácil y está balizado con pintura roja. Casi arriba me cruzo con uno que baja, luego serán más.
            En el collado inferior el camino se va en dirección noroeste al encuentro de la cresta. Subo con la boca abierta, respirando a pleno pulmón alcanzando la cresta en la salida de la Gran Diagonal.
            Empleo unos instantes en respirar y en contemplar el diedro de salida y luego a media ladera gano altura entre manchas de pratenses y bloques de calizas ocres y firmes hasta alcanzar con la vista el vértice geodésico. Luego la plana cima y en treinta y cinco minutos estoy en Peña Telera a 2764 metros de altitud. Son las tres y cinco de la tarde.

Parda desde la Cima de Telera.

            Peña Telera tiene sin duda una de las mejores vistas de conjunto de este Pirineo; están todos para pasar lista, pero creo que va a ser mi cima más efímera: Buenos días a los cuatro de la cima, tres minutos para  echar un trago de agua, hacer una fotografía a Peña Parda y despedirme para marchar en dirección sudoeste, loma abajo hasta la cresta sur.
            Antes de alcanzar el collado superior y siguiendo hitos me descuelgo por un corredor hacia la cubeta y ya por la pedrera me llego hasta el Collado Sur de Peña Telera.

Telera desde Parda.

            Un camino sobre la meteorizada pedrera caliza conduce por suave pendiente hasta la alomada Cima de Peña Parda, que por cierto es menos parda y más lechosa que Peña Telera que es más parda.
            Pasar de los 2600 metros escasos a los que se encuentra el collado hasta la Cima de Peña Parda o Peña de en Medio me cuesta seis minutos, son las tres y veinticinco y estoy a 2657 metros de altitud.
            Otro trago y otra foto que se me dispara sobre Telera cuando estaba preparando el disparador automático y siguiendo unos hitos que arrancan de la misma cima, aunque van hacia los murallones, me voy para abajo.
            Conducen a un corredor fácil por el que se alcanza el praderío superior, muy inclinado, en el que busco los hitos y los encuentro. Me conducen a la parte oeste de los paredones.
            Unas repisas y unas viras llevan a un corredor cortado. A la izquierda hay un hito que es la clave para salir de la pared, pero para llegar a ella hay que hacer una travesía algo expuesta y no apta para todos los públicos. La gente coloca hitos y luego…
            Desde la pared echo un grito a mis señoras. Diez minutos después estoy con ellas tras el repecho que hay que hacer bajo los paredones: son las cuatro y he empleado la hora y media anunciada.
            Echo un trago de nescafé, reorganizamos las mochilas y desandamos la Brecha de Telera ya de regreso.

Descenso desde la Brecha de telera. Abajo el Ibón de Piedrafita.

           Rescato una gorra que el viento había desalojado de alguna cabeza y nos vamos corredor abajo cuando a Biola ya se le ha pasado totalmente la crisis.
            Aprovechamos todos los tramos con gravas situados en el lado derecho del corredor para patinarlos y pronto alcanzamos la hondonada y al mismo tiempo el praderío. Luego bajaremos por la derecha del corredor dejando las barras de salida a nuestra izquierda y discutiendo sobre el barro del ibón llegamos al barranco que baja desde el oeste del praderío cuando son las seis menos cuarto.
            Hacemos un par de gaseosas de pito y descansamos nuestros maltrechos pies que llevan 1250 metros de desnivel.

            Un  cuarto de hora después estamos en el coche. Pista abajo paramos en Piedrafita que, por cierto, está muy arreglado y sin más historia para casa a retozar en la hierba a la sombra de la casa después de echarle una visual a la Brecha de Telera por su vertiente sur.

13 ago 1994

10-94. PUNTA ALTA. 13-8-1994.

Casquete Somital de Punta Alta de Coma Les Bienes.

Aparcamiento de Cavallers, Barranco y Estanis de Comalesbienes, Cara este y Arista Sur.
13-08-2016.
Salida 12:45 h. Llegada 17:15 h.
Sol.
Fácil.
Ascensión.

Juan Castejón, Rosa Mª. Martínez y Mariano Javierre.

Mapa de Punta Alta procedente de Iberpix. Vía en amarillo.

            Llega la hora programada, las siete de la mañana del 13  de Agosto de 1994, lloviendo: mal empezamos, el cielo está bastante nublado, los chaparrones son flojos e intermitentes pero nos retienen dentro de la tienda.
            A las ocho menos cuarto se quiere despejar y cesa la lluvia pero ya es tarde: adiós Punta Alta.
            Recogemos la tienda mojada, desayunamos y metemos los bártulos en el coche sin prisas. A las nueve menos cuarto nos vamos para abajo hasta Pont de Suert donde buscaremos un taller para que nos reparen el coche o nos digan algo que nos permita volver a casa.
            La mañana está despejada, el sol se despliega sobre la parte alta del valle y sin circulación pero a paso de tortuga nos llegamos a la Renault de Pont, son las nueve y cuarto.
            Prueban el coche, nos dicen que hay trabajo, que es un cojinete, le lloro un poco pues tienen la pieza y nos confirma que a las doce estará reparado.
            Damos una vuelta por el pueblo, hacemos tiempo, echamos un café, sacamos dinero y calculamos.

La Arista de Montardo y Punta Alta al fondo. 3-8-16.

            A las once estamos de nuevo en el taller y ya lo termina. Una vuelta para probar, 10800 pesetas sin factura y el comentario:
            -Todavía pueden darse una vuelta por el valle.
            -Sí, hay poco tiempo pero quizás nos acerquemos hasta Tahull para ver la iglesia.
            -¡Que tengan buen viaje.
            Nos incorporamos a una caravana que hay en el pueblo pero enseguida tomamos  una calle que marcha para abajo para salir a una urbanización más allá del pueblo puenteando así el atasco.
            Nos vamos valle arriba a todo trapo y con algo de circulación hasta que en el balneario se intensifica para convertirse en un tremendo atasco bajo el Embalse de Cavallers entre los que subimos, los que aparcan y los que bajan.
            Aparcamos rápidamente en la carretera sin llegar a donde pretendíamos, preparamos unas mochilas con lo imprescindible para cinco horas y arreamos a toda pastilla hacia Punta Alta de Coma Les Bienes.

Llegando a los Estanis de Coma Les Bienes.

            El camino se inicia sobre las lazadas de la vieja pista en desuso que lleva a la cantera donde extraían la piedra para la presa. Rosa que va delante enseguida ataja, nosotros detrás atajamos más. Subimos por una crecida pradera asentada sobre pedrera granítica por cualquier parte, el corredor nos conducirá. A pesar de todo el ritmo es infernal, dando lo mismo por libre que por el caminillo que está trazado en la orilla izquierda del corredor.

Punta Alta desde los Estanis de Coma Les Bienes. 4-8-16.

            Una brecha ciega en la orilla izquierda del corredor nos saca del mismo y nos deposita en un dorso herboso y arbolado que separa el corredor del Barranco Desagüe de los Estanys de Coma Les Bienes. Hemos subido 400 metros.
            Adelantamos gente, se termina el bosquecillo y desembocamos en una enorme pedrera que baja desde los estanys a los que nos acercamos. Hemos subido 650 metros en la primera hora pues en esta pendiente no se puede hacer otra cosa.
            Ahora, en la cubeta lacustre, el camino llanea acercándose al fondo del circo y contorneando el Espolón Sur de Coma Les Bienes, por   el que se sitúa el camino  de ascenso según la Alpina.
            Echamos un trago de isostar y continuamos virando un poco al norte para  subir por detrás del espolón en dirección noroeste, en busca de una brecha entre el Pico de Coma Les Bienes y Punta Alta.
            Cuando ya avistamos nuestro futuro paramos a picar unas galletas de chocolate que hemos comprado en Pont y a descansar un poco pues queda todavía algo.

Cima de Punta Alta con los Besiberi destrás.

            Abandonamos un poco la desconsoladora pedrera que llevamos prácticamente desde abajo para incorporarnos a unos tramos herbosos del amplísimo corredor este del pico pero enseguida volvemos a la pedrera, ahora de menores tamaños hasta convertirse en una gravera que ascenderemos buscando tramos más asentados.

Hacia Coma Les Bienes desde Punta Alta.

            Por fin alcanzamos la cresta y cinco minutos después, en dirección norte llegamos a la Punta Alta de Coma Les Bienes a 3014 metros de altitud, séptimo y último tresmil del circo cuando son las tres menos cuarto: casi nada renunciar.

Estanis de Coma Les Bienes desde Punta Alta.

            La cima es un amplio pedregal granítico con materiales ideales para la construcción. Al amparo del viento comemos un poco, contemplamos paisajes desconocidos de Francia y Cataluña, identificamos la Tuc de Colomers, la encantadora Cubeta Lacustre de Coma Les Bienes y el ya conocido Circo de Riu Malo así como la Cresta de los Besiberris; detrás Ballibierna, Aneto, Maladeta, más atrás Posets y al fondo el Turbón: estamos ya en casa.
            Una manada de catalanes ha ido llegando a la cima con un empalagoso guía que nos termia haciendo una foto.

En la Cima de Punta Alta. 

            A las tres y veinte iniciamos el descenso pues hay que bajar hasta los 800 metros de altitud de Sabi.

Iniciando el descenso desde Punta Alta. 

            Hacemos la cresta en un bolero y las graveras de la parte alta a bolazo limpio. Luego a buen ritmo nos cepillamos el praderío alto y adelantamos gente al inicio de los estanys.
            Continuamos pedrera abajo y en la brecha paramos, a Rosa le cantan las rodillas. Echamos un trago y Juan aprovecha para coger frambuesas para mi chica que le encantan.

Bajando hacia los estanis de Coma les Bienes. 

            A las cinco y cuarto, todo de frente, llegamos al coche. Hemos acabado con 1266 metros de desnivel.
            Preparamos una suculenta ensalada, próximos al coche, que nos beneficiaremos con unas latas de callos a la madrileña, fruta y café.

Bajando hacia el Aparcamiento de Cavallers. 4-8-16.

            Son las seis y media cuando abandonamos por segunda vez el valle que se queda medio entre nubes.
            En el desvío de Boí nos vamos directos para Tahull. Nada más salir del pueblo, en una curva, un bache nos revienta el amortiguador de la rueda trasera derecha. Juan y Rosa se van a ver la iglesia mientras que yo me quedo a ver si hay algún modo de apañarlo. Enseguida continuaremos, yo algo quemado con el jodido coche y todos con una musiquilla escandalosa para todo el viaje.
            Hacemos kilómetros y ruido pero a las once de la noche dejamos a Juan en su casa. Hemos preferido llegar a casa tarde pero de esta forma poder descansar un par de noches antes de que Rosa vuelva al trabajo.
            De momento hemos rematado esta actividad con sus 4000 metros movidos, con todos los tresmiles de la zona hechos y habiéndole pegado una dentellada más al Pirineo: los Estats tendrán que esperar.

            

12 ago 1994

9-94. LOS BESIBERRIS 94. EL SUR Y COMA LO FORNO. 12-8-1994.

Casquete Somital de Besiberri Sur.

Pico Simó,  Pico Jolís, Arista Sur, Corredor Oeste, Cima de Coma Lo Forno, Corredor Nordeste, Bases, Barranco de Riumalo y Embalse de Cavallers.
12-08-1994.
Salida 11:45 h. Llegada 19:30 h.
Sol.
Bastante fácil.
Juan Castejón, Rosa Mª. Martínez y Mariano Javierre.

Mapa de Besiberri procedente de Iberpix. Vía en amarillo.

            El periplo ha durado poco y enseguida, son las doce y cuarto, retornamos a Punta Simó, recogemos las mochilas y ponemos rumbo al sur pues el 12 de agosto no ha terminado todavía ni mucho menos.
            Enseguida pasamos por el Pico Jolís  con sus 3003 metros de altitud y en suave descenso, cada cual por donde mejor le parece,  nos llegamos al collado por el que nos hemos incorporado a la cresta principal.

En la Cima de Besiberri Sur.

            Hemos visto el Besiberri Sur y tenemos que atravesar el potente espolón que arranca de la cresta en dirección nordeste casi en su inicio. Salvamos a continuación un par de dientes a media ladera este, junto a su base sin perder casi altura  y nos encaminamos a través de un potente nevero bajo la Cara Este del Besiberri Sur para encaramarnos al collado de separación con el Coma Lo Forno.
            Cuando empezamos a faldear el pico cambiamos de idea y tomamos un corredor bastante descompuesto que mediante una trepada elegante, una más del día, nos deposita en la Cima del Besiberri Sur a 3030 metros de altitud cuando es la una del mediodía y damos por liquidados los tres Besiberris.
            Encontramos una cordada de tres  con dos jovenzuelas encordadas  que se van hacia el Collado de Abellaners por una loma dulce que poco o nada tiene que ver con la cresta que es nuestro plato del día. Nos hacemos una foto con el Celestín Passet y el Coma Lo Forno.

Abellers y Besiberri Sur desde Senyalada 5-8-16.

            Leemos el mensaje del sordo y dejamos el nuestro en la caja; diez minutos más tarde, dispuestos a no perder demasiado tiempo, emprendemos la continuación de la cresta faldeando un par de dientes de respetable aspecto.
            Para ello hemos de perder algo de altura y atravesar en descenso un profundo corredor que se pierde allá abajo en la cara oeste y faldeando de nuevo en horizontal nos vamos en busca de los corredores que habíamos visto el día anterior desde el Passet.

Cima de Coma Lo Forno, detrás Punta Passet.

            Alcanzamos los corredores bastante abajo y mientras Juan se marcha hasta la Brecha de Coma Lo Forno para ver cómo está, pues desde aquí está tirado llegar a ella; nosotros tomamos un amplio y descompuesto corredor en dirección este y alcanzamos el quinto y último tresmil del día.
            Hacemos fotos. Luego llega Juan que dice que se sube bien. Comemos un poco mientras decidimos al sol del mediodía y ante el enorme paisaje que se abre por fin a nuestros ojos.

Desde Besiberri Sur los Centrales y el Norte. 

            Tenemos que decidir entre hacer en descenso la Cresta del Coma Lo Forno hasta la Brecha de Coma Les Torres continuando el regreso ya por camino conocido, o bien tirarnos para abajo por cualquier corredor situado entre el pico y el Besiberri Sur ya que sabemos que es posible.

Coma lo Forno desde Celestín Passet. 

            A las dos y veinte, ya hemos tomado la decisión: descenderemos un poco la cresta  haciendo casi idéntico camino al que hemos hecho nosotros subiendo, pero perdiendo menos altura y alcanzaremos una brecha entre dos potentes dientes situados a media cresta. Allí nace un descompuesto corredor, más bien corto, que nos desmontará de la pared en dirección este y que descenderemos con cuidado y poco más.

Casquete Somital de Coma Lo Forno. 

            Nos depositará en una corta pedrera en la que buscamos tramos de gravera para bajar al trote y colocarnos en la parte superior del nevero más alto. A partir de aquí, patinando de nevero en nevero, nos vamos hasta un poco más debajo de los Estanys Gelats del Coma Lo Forno transitando siempre el fondo de valle colmatado de neveros residuales.

Besiberris Centrales y Norte desde Coma lo Forno.

            Cuando rematamos el último nevero queda un pequeño tramo de pedrera granítica que hacemos directos hacia la tienda. En una hora nos bajamos de cima a tienda, son las tres y veinte.

Maladetas desde la Cima de Coma Lo Forno. 

            Nos refrescamos un poco y preparamos tranquilamente la comida con un poco de ensalada que es el lujo que nos hemos permitido. Se está bien al sol pero a cubierto del fresco viento que ha campado durante todo el día y al que debemos el desalojo de las nieblas. echamos una dilatada siesta montañera al amor del cálido sol.

El Barranco de Riu Malo desde el Planell.

            A las cinco y media recogemos y nos vamos para abajo en dirección nordeste al encuentro del camino que discurre junto al Barranco de Riu Malo, cómodamente sobre manchas de pratenses. Incorporados al mismo el camino se vuelve incómodo: la pradera está llena de trampas primero y después porque, ya en la margen izquierda del barranco, el camino desciende bruscamente y encajonado en el tajo practicado. Entendemos perfectamente el topónimo y se nos hace largo a pesar de que las mochilas pesan poco.

Cavallers desde la cola. 

            En el Planell de Riu Malo paramos a echar un cigarro y a remojar los pinreles en un fino praderío del que se está marchando ya el sol. Luego, “solamente” nos queda contornear el Embalse de Cavallers en dirección sur por su orilla izquierda. Se nos va a hacer tedioso, pesado y eterno. Bajar los 700 metros y rodear se nos va a llevar casi dos horas, lo que ya está bien.
            Cogemos agua en el embalse y nos llegamos hasta el coche: ponemos música, descansamos, hacemos la cena y a las ocho y media cenamos en medio de una cálida tarde en la que todavía hay movimiento de coches que abandonan el paraje.

            Montamos la tienda mientras Juan marcha a por agua cuando ya anochece y a las nueve y curto nos reunimos en la tienda pues estamos algo sobados: no en broma hemos subido 1200 metros y bajado 1900 además de deambular muchos ratos por la cresta y mañana hay que levantarse a las siete.

8-94. LOS BESIBERRI 94. El NORTE Y LOSCENTRALES. 12-8-1994..


Besiberri Norte desde el Pic Jolis. 

Les Basses, Estanys Gelats de Coma Lo Forno, Arista Norte, Besiberri Norte, faldeo bajo la Arista Sur de Besiberri Norte, Espolón Este de Besiberri Central, Arista Sur, Besiberri Central Sur o Jolís y Pico Simó o Besiberri Central Norte.
12-08-94.
Salida 07:30 h. Llegada 12 h.
Mixto.
Bastante fácil.
Ascensión.

Juan Castejón, Rosa Mª. Martínez y Mariano Javierre.

Mapa de Besiberri procedente de Iberpix. Vía en amarillo.

            Sobre las seis y media de la tarde, el sol se ha ido de nuestro campamento y se hace fresqui. Juan se va a dar una vuelta para distraer el ojo  y para vigilar que las nieblas sigan retenidas en el norte gracias al viento sur que las contiene y nosotros para estar parados nos empiltramos.
            Serán las ocho cuando cenemos sobre una grandiosa mesa de granito y alrededor de las nueve y media nos embolsamos en nuestros sacos dispuestos a aprovechar la noche a cualquier precio.
            El día 12 de Agosto del 94 no sorprende el día de nuevo a las siete de la mañana.  Estamos en Les Basses de Coma lo Forno a 2450 metros de altitud y el viento que sube del valle va subiendo nieblas que han debido bajar durante la noche.
            Desayunamos y con las mochilas aligeradas nos vamos a nuestro tajo del día cuando son las ocho menos veinte y en dirección noroeste, ganando altura guiados por el Refugio Vivac de la Brecha Peyta.
            Enseguida contorneamos un contrafuerte que baja del Besiberri Sur y avistamos el Cresterio de los Besiberri Norte y Central, pero por poco rato: las nieblas los asaltan y los ocultan de nuestra vista, lo que añade una dificultad más pues el tajo de hoy requiere, para la buena marcha, vista y ojo.
            Pasamos bajo los Estanys Gelats de Coma Lo Forno, atravesamos los primeros neveros residuales, vemos a una pareja mayor que ha acampado en altura y que se va hacia el Coma Lo Forno y nos vamos aproximando a la Cara Este del Besiberri Norte que tiene un delicado aspecto.

Besiberri Norte y Mig desde Coma los Forno.

            Para incorporarnos a la pared hemos de subir un empinado corredor que nos regala un buen par de pasos de IIº superior y nos deposita sobre los hitos que vienen desde el refugio, pues sabemos que la vía directa desde allí es complicada y generalmente se contornea un poco por el este.
            Los hitos se encaraman rápidamente sobre la cresta norte y desaparecen en una vía transitada e inconfundible, por la misma cresta hasta alcanzar una pared que se asciende por su parte este mediante un diedro de IIIº.
            Se recupera de nuevo la cresta para salirse a continuación en travesía hacia el este para atravesar un corredor aéreo y vertical que a Rosa le sugiere quedarse allí a esperarnos. A tal proposición le renegaré un poco y Juan le propondrá buscar un lugar más abrigado para esperar, que puede ser por ejemplo, la cima.
            Tras el rifirrafe, continuamos el ascenso por la pared con otra dificultad de IIIº para luego continuar con cuidado, un poco por cualquier parte, sobre un  caos granítico de enormes proporciones hasta alcanzar la Cima del Besiberri Norte. Estamos a 3014 metros de altitud, son las nueve y media y estamos en medio de la niebla. Toda la cresta ha sido así y por tanto estamos sin paisaje. Consecuentemente hacemos unas fotos testimoniales, sacamos la cuerda, encordamos a Rosa y para abajo.

Nieblas en la Cima de Besiberri Norte.

            Bajo solo delante y detrás Rosa un poco asegurada por Juan. En un visto y no visto salimos de la cresta sin ninguna dificultad especial y tras bajar el escalón por una zona fácil un poco más al norte del corredor de la subida, donde se calculaba de lejos que por allí sería la subida que transitaba desde el refugio, nos detenemos junto a un nevero para comer un poco.
            El objetivo principal no es precisamente comer, que sí lo haremos, sino deshojar la margarita: estamos a 2750 metros de altitud  pues hemos bajado un poco más que el nivel del primer escalón que posiblemente podía conducirnos a un collado en el Espolón Este del Besiberri Central. Podemos contornear el espolón y alcanzar el collado por la zona oeste, pero las nieblas, a pesar del fuerte viento que campa por los contornos, no se levantan y nos refrescan a la vez que nos llena de incertidumbre. Por una parte tampoco sabemos si desde ese collado se puede ascender a los picos y por otra suponemos que saltándonos los Besiberris Centrales podemos hace el Coma Lo Forno por la Vía de Riu Malo que era lo que pensaba hacer la pareja de antes y luego, cresta a cresta, podríamos intentar hacer los Centrales aunque fuera a base de dar una buena vuelta.

Besiberri Central Sur o Pic Simó detrás Pic Jolís y Besiberri Norte.

            Decidimos esta última opción pero cuando estamos ascendiendo ya para contornear por el sur el Espolón Noroeste del Besiberri Sur, decidimos subir por el lado norte del espolón tiene buen paso, alcanzando las proximidades del collado al que queríamos llegar en principio.
            Un pedregal en el que se van alternando bloques de granito de diversas proporciones nos deposita en un collado próximo al  que baja del Besiberri Central. Frente a nosotros tenemos la cresta principal a la que se puede acceder por varios lugares. Nosotros tomamos dirección hacia un pequeño collado al que se accede por una pedrera algo suelta.


Desde Besiberri Sur los Centrales y el Norte. 

            Ya en la cresta cambiamos las dirección sudoeste por la norte y por el filo de la cresta alcanzamos la Punta Sur del Besiberri Central, también llamado Pico Jolís y situado a 3003 metros de altitud cuando las nieblas quieren levantarse un poco y nosotros esperamos que lo hagan definitivamente: empezamos a ver por primera vez la pirámide del Besiberri Norte y su temible arista sur. Son casi las doce.
            Hacemos algunas fotos y continuamos por una cresta fácil en dirección norte al asalto de la Cima Norte del Besiberri Central o Pico Simó de 3002 metros de altitud con lo que después de las vueltas dadas empalmamos los picos de la cresta.

Besiberri Norte y Centrales desde Senyalada. 5-8-16.

            Juan y yo nos vamos un par de dientes más adelante para contemplar más de cerca la arista, que desde aquí aparece como un poco más de lo mismo.