Moncayo desde cerca de Cueva de Agreda.
Cueva de Agreda, Barranco Colladillo, Arista
Este de San Juan, Lobera, Alto del Corralejo, Cerro San Juan, Moncayo, Collado
Pasalobos, Negrilla y Barranco del Corralillo.
22-10-2018.
Salida 10:15 h. Llegada 17 h.
Sol.
Fácil.
Juan Castejón, Rosa Mª. Martínez y
Mariano Javierre.
Mapa de Moncayo procedente de Iberpix. Vía en amarillo.
Al
Moncayo, que vemos de cuando en cuando desde el Pirineo; unas veces vestido de
azul, otras de blanco y siempre remoto; acostumbramos a ir poco y lo hemos hecho invariablemente desde Tarazona
por su vertiente nordeste aprovechando la posición elevada del Monasterio de la
Virgen de Moncayo.
Negrilla y San Miguel por encima del robledal desde Cueva de Agreda.
Hoy
22 de Octubre de 2918 iniciamos nuestra visita al Sistema Ibérico y como si se
tratara de una ceremonia iniciática lo haremos conociendo la vertiente sudoeste.
Salimos
de Sabi temprano y rodeando el macizo por el norte nos llegamos a Cueva de
Agreda, pueblecillo de la vertiente sudeste
a 1310 metros de altitud y aparcamos a la salida del pueblo mientras
contemplamos por encima del robledal las cabezas de las Cimas de Negrilla y San
Miguel, tras tres horas de carretera.
Fin de la pista en el Puente del Barranco Trasmoncayo.
Alrededor
de las diez y cuarto tomamos la pista
que parte al norte y de inmediato se introduce en el Robledal de Trasmoncayo balizada de rojo y blanco.
La
mañana, luminosa y ventilada, está buena para caminar de momento aunque nos
ronda por las cabezas las ventoleras anunciadas que no se producirán.
El camino prosigue por la derecha del Barranco Trasmoncayo.
La
pista gira al este mientras se estropea poco a poco hasta introducirse en el
Barranco Trasmoncayo y abandonarla prácticamente en su final junto a un puente
que cruza el Barranco del Colladillo a 1450 metros de altitud.
Desvío del camino hacia el Collado Pasalobos.
Allí
tomamos el camino que prosigue al nordeste en progresivo ascenso, por la orilla derecha del barranco mientras
escuchamos al unísono las musiquillas rumorosas del agua y del viento.
Sobre
terreno metamórfico avanzamos con la vista puesta ya en la sierra que se
despoja poco a poco de su masa arbórea y nos ofrece sus laderas arbustivas en
las que domina el enebro rastrero, el brezo, la genista de corta talla, el arándano
y sobre todo la brecina.
Hacia Lobera.
Por
encima de los 1700 metros de altitud un
camino poco visible pero amojonado se marcha, suponemos hacia el Collado de
Pasalobos pero nosotros proseguimos con el camino del barranco que casi seco se
va para arriba atravesando ramas del mismo prácticamente secas y encajonándose
ligeramente.
La Oeste de Lobera.
Poco
después el barranquillo pedregoso y transitado se empina ligeramente
haciéndonos ganar altura con cierta rapidez mientras transitamos la Ladera Sur
de San Miguel y San Juan.
Arriba
se quiere asomar el amarillento y reseco praderío del altiplano pero antes de
salir a terreno abierto nos detenemos al abrigo del viento que ofrece el
barranco para echar un bocado. Son las doce menos cuarto y estamos ya por
encima de los 2000 metros de altitud.
Foto de Cima en Lobera.
La
continuación será barranco arriba hasta alcanzar el praderío en la vertiente sur del Alto del Corralejo.
Más al norte quedan San Juan Y San Miguel.
la Sudeste del Alto del Corralejo.
Desde
la notoria Arista Sudoeste de San Juan divisamos el primer objetivo que será
Loberá en el extremo sudoeste de nuestro pretendido recorrido. El viento, como
nos ha vaticinado un montañero con el que hemos coincidido durante el almuerzo,
parece que tiene aspecto de no ir a más cuando no de amainar como sucederá poco
después.
Desde el Alto del Corralejo San Juan y Moncayo.
Por
tanto atravesamos la arista y prácticamente de llano faldeamos por el oeste el
Alto del Corralejo, disfrutando de la mañana hasta alcanzar el amplio y amable
Collado Norte de Lobera situado a 2139 metros de altitud.
Vista atrás hacia Corralejo y Lobera.
Un
caminillo con hitos de piedras transita
la amplia ladera norte y tras un primer y breve remonte se allana alargándose
en busca del Hito Cimero de Lobera a
2226 metros de altitud cuando va a ser la una y cuarto y aunque no hemos
superado demasiado desnivel habremos recorrido alrededor de 9 kilómetros.
San Miguel o Moncayo desde el Cerro de San Juan.
La
prácticamente imperceptible cima tiene un vértice geodésico elevado sobre un
pequeño torreón de piedras y allí
hacemos algunas fotos de los alrededores en los que tratamos de orientarnos: al
sur las Peñas de Herrera, al Nordeste Tarazona, las nieblas del Ebro y un
remotísimo Pirineo que difícilmente blanquea en Ordesa y al noroeste la sierra que vamos a recorrer
aunque en realidad se trata de un
altiplano pedregoso vestido de discreto
praderío abrasado por el sol y el Otoño.
Hacia San Miguel.
Poco
después desandamos camino hasta el Collado Norte de Lobera e iniciamos el
ascenso en dirección norte por una
ladera amplia que pierde enseguida la
vegetación y por un pedregal corto, descompuesto y de materiales oscuros nos
deposita en el Alto del Corralejo situado a 2274 metros de altitud.
El Circo de San Miguel.
Siguiendo
el alomado cordal giramos un poco al nordeste y transitando por terreno ya
conocido, contemplamos el Circo de San
Gaudioso, la subida desde el Santuario de Nuestra Señora de Moncayo y el Circo
de San Miguel mientras nos llegamos al Cerro San Juan a 2252 metros de altitud
con la vista puesta en Tarazona y la Depresión del Ebro.
En la Cima de San Miguel o Moncayo.
Llaneando
o en suave ascenso, contemplamos nuestro descenso por el Pozo de San Miguel y
alcanzamos enseguida la amplísima y plana Cima del Pico de San Miguel o Moncayo
situada a 2314 metros de altitud cuando son las dos de la tarde.
Amplísima Cima de San Miguel.
Fotos
con el vértice geodésico y la Virgen del Moncayo, saludos con el personal que
hay por aquí pues el Moncayo siempre tiene visitantes y continuación al oeste
con la vista puesta en Peña Negrilla en el mejor de los días que hemos estado
por aquí: ni viento ni nieblas ni frío pues de la primera ocasión allá por
Agosto del 71 no recuerdo.
Peña Negrilla en el horizonte.
Un
marcado camino inicia el descenso de la pedregosa ladera, vuelta a vuelta y en
dirección oeste. Hay que perder 300 metros pues abajo nos espera el Collado de
Paslobos al que llega el pinar que se ha ido encumbrando por la vertiente
norte.
La Este de Peña Negrilla.
Un
descenso bastante uniforme y persistente nos deposita en el amplio Collado de
Pasalobos situado a 1950 metros de altitud. Son las tres menos cuarto y al
abrigo que los pinos nos ofrecen de la brisilla del collado nos sentamos a
comer disfrutando del solecillo del mediodía.
San Miguel o Moncayo desde Negrilla.
Media
hora después y siguiendo un caminillo dibujado en la ladera este nos elevamos
brevemente hasta alcanzar la Cima de Peña negrilla situada a 2117 metros de
altitud. Son las tres y media.
Detalle del barranco de subida hacia Lobera.
La
cima amplia, coronada por una pequeña cruz y cubierta de vegetación arbustiva
nos ofrece una espléndida imagen de la rotundidad del Pico Moncayo del que
acabamos de bajar. Al oeste Agreda, Olvega y al fondo nuestra proyectada
continuación con Cebollera muy rechoncha y Urbión muy remoto.
Llegando a la Parte Intermedia del Barranco Trasmoncayo.
Ni
siquiera volveremos al Collado de Pasalobos sino que nos echaremos ladera abajo
en dirección sur al encuentro del camino que hemos llevado a la mañana. Se
trata de una ladera vestida de matorral que aguanta divinamente el tránsito
amortiguando el paso. Alternamos con algunos tramos de pedrizas muy estables y
nos llegamos al barranco tras recuperar los hitos que señalaban el difuminado
camino que baja del collado.
Todavía quedan violetas en Moncayo.
Limpiamos
de vegetación los dos hitos que señalan la divisoria de caminos y barranco
abajo nos llegamos a la pista. Poco después estamos en la furgo cuando son las
cinco de la tarde.
Entrando en el Robledal del Barranco Trasmoncayo.
Hemos
liquidado la circular y sus alrededor de 1320 metros de desnivel a muy buena
hora, aunque quizás haya sido la
distancia recorrida, que habrá estado por encima de los 20 kilómetros, de lo
más significativo de la actividad.
De camino a mi primer Moncayo en Agosto de 1971.
Al
solecillo de la tarde echamos unas cervezas para mitigar la poca sed que se nos
ha hecho y luego “carretera y manta” como acostumbramos a decir; mañana será
otro día.
Hola Mariano.
ResponderEliminarVeo que le habéis dado unas cuantas vueltas de tuerca a la ascensión habitual desde la Cueva de Ágreda, que es bastante más suave que desde la vertiente zaragozana.
Para otra ocasión y más en otoño (no la recomiendo en invierno) es hacerlo un poco más abajo de la Cueva de Ágreda, en el área recreativa de la Dehesa, subiendo por el barranco de las Majadillas, que atraviesa un viejo robledal de lo más espectacular, eso si, gran parte sin sendero, recorriendo trochas hechas por pescadores.
Te dejo el enlace http://viajesyrutasdesenderismo.blogspot.com/2017/02/ascension-al-moncayo-2314-m-por-el.html
Un saludo
¡Hola Eduardo!
ResponderEliminarNo creas, el tema se plantea en base a un mapa, en este caso el Visor de Iberpix y sobre el mismo planteamos la ruta, a ser posible circular para conocer, luego sale lo que sale y lo resolvemos a nuestra manera. No somos amigos ni del GPS. ni de buscar demasiada información a no ser que conozcamos de antemano alguna dificultad especial.
En esta ocasión lo hicimos en sentido inverso al planteado originalmente.
Disfrutamos del mejor tiempo que jamás hemos tenido por esos pagos pues, de acuerdo contigo, la meteorología acostumbra a ser bastante detestable.
He visto tu ruta y tampoco difiere demasiado de la nuestra. No acostumbramos a bajar al Moncayo y no sé si la repetiremos. De cualquier forma gracias.
¡Que vaya bueno!