Caldearenas, Senda de Izarbe, Variante y Paridera.
08-09-2021.
Desnivel acumulado 50 m.
Distancia recorrida 4000 m.
Tiempo efectivo de marcha 01:15 h.
Sol.
Muy fácil.
Mario y Julia Layos, Rosa Mª. Martínez y Mariano Javierre.
Hace
ya algún tiempo que fuimos a visitarla para conocer las posibilidades que
ofrecía el recorrido y hoy 8 de Septiembre de 2021 volvemos con los nietos.
Les
encanta la furgo y la tienda más que a un tonto un lápiz y nos vamos a acampar
a la Ermita de la Virgen de los Ríos, es un lugar cuidado, agradable, sombreado
y sin gente, ideal para pasar un día de campo estupendo. Nosotros pasamos la
tarde y la noche y a la mañana siguiente nos vamos desde allí, en las
inmediaciones de Aquilué, hasta Caldearenas, aparcamos en la plaza del pueblo y
nos vamos de paseo.
Desde
Caldearenas, una pista acartelada avanza por la orilla izquierda del Gállego
para bifurcarse, tomamos nuestra derecha y continuamos hacia la entrada de la
senda. Es un tramo de cerca de un kilómetro que se puede hacer pesado para críos
muy pequeños por lo que habrá que valorar en lugar de inicio.
La
pista nos lleva al comienzo de la senda cruzando por un puente metálico el Río
Matríz, donde empieza el entretenimiento.
Enseguida
pasaremos bajo las Vías del Canfranero donde hay un panel indicativo y proseguiremos
para cruzar un barranquillo donde encontramos la primera zona de piedras margas
pintadas con vistosos colores y enseguida un pequeño bosque de duendes entre el
pinar.
Poco más adelante unos pinos de piñas
rojas y la senda se abre en dos ofreciendo una variante corta que es
conveniente hacer ya que además de una zona de animales marinos de teselas
aparece un espectacular colgante en
medio del bosque.
De nuevo en la senda pasaremos un tercer barranco tras caminar por la zona de rocas multicolores para alargarnos hasta la Paridera, un edificio pastoril situado en un prado abierto en el que hay unos espectaculares y coloristas totenes que ponen un toque de color más sobre el sencillo paisaje. Hay en el interior un pequeño museo de la vida pastoril que se puede visitar previa información en el ayuntamiento pero hoy está cerrado.
La senda tendrá poco más de un kilómetro que
se alarga con la aproximación y termina aquí, aunque el camino prosigue hasta
una pequeña caseta en la que hay un modestísimo museo fotográfico-pastoril y
todavía más. Nosotros buscamos una sombra de pinos y almorzamos pues en el
monte se almuerza y no hay que perder las buenas costumbres. Luego nos damos la
vuelta sin la variante para terminar en Caldearenas antes de que el calor nos
apure en un día espléndido. Hemos empleado hora y media en el recorrido.
Ya en el pueblo visitaremos un caballo que
está en su cuadra y al que daremos un poco de hierba y en la plaza
contemplaremos patos, gallinas royas y un par de gallos dueños de su gallinero
con lo cual hacemos un dos en uno espléndido.
Hay que evitar los días y horas demasiado
cálidas para que no se nos arruine el paseo pues estamos a 650 metros de
altitud y el calor puede ser importante. En la fuente no se puede coger agua
por lo que habrá que llevarla.
Hola Mariano.
ResponderEliminarPero quien disfruta más los nietos o los abuelos? 😀. Yo en tiempos también la quería hacer con Adrián, pero ahora se ha hecho mayor y busca emociones "más fuertes", aunque no descarto ir con mi mujer, que lleva mucho tiempo sin salir al monte.
Un saludo
¡Hola Eduardo!
ResponderEliminarBueno, es algo poco corriente aunque no para tirar cohetes.Para crios pequeños muy bien, si se hacen un poco mayores pues eso.
El disfrute fue a medias.
¡Qiue vaya buieno!