En la parte alta del Coll de los Aranesos.
La Besurta, Plan de Aiguallut, Depresión
de Barrancs, Estany de Coll de Toro, Barranco de la Escaleta y Coll de los
Aranesos. Descenso por la Escaleta, y Aigualluts.
16-05-2012.
Desnivel 1180 m.
Distancia recorrida 17000 m.
Sol.
Fácil.
Tiempo efectivo 07:15.
Esquís de montaña.
Agua en la Besurta en el barranco de la
Escaleta y en ciertos puntos de algunos ibones y barranquillos y en
escorrentías.
La nieve en esta ocasión estaba
demasiado alta y exigió un fatigoso porteo.
Mapa del Col de los Aranesos procedente de Prames. Vía en amarillo.
Queremos
ir al Pico de Mulleres y con esa intención marchamos a Benasque. Se trata de
nuestra escapada primaveral en busca de las últimas nieves de la temporada.
Este
año también ha nevado al final de la temporada y copiosamente pero unas
temperaturas inusuales se han llevado la nieve de tal manera que nos ha
sorprendido un poco a todos: en alrededor de una semana se ha pasado de estar
cerrada la Carretera a la Besurta a estar limpio hasta más arriba del Plan de
Aiguallut.
Había
visto alguna fotografía del Refugio de la Renclusa con los alrededores muy
pelados de nieve y eso era una mala señal que comprobaríamos al llegar a la
Besurta: la parte de la subida al refugio que se ve desde abajo está
prácticamente sin nieve.
Consecuentemente,
el miércoles 16 de Mayo de 2012 lo comenzamos a las ocho de la mañana
machacando hormigas con las botas de travesía y los esquís en la mochila.
Hemos
dormido en la furgo y a las siete de la mañana estamos a 0º. Como decía aquel, ni frío ni calor
cuando nos metemos en camino en
dirección sudeste coincidiendo con el que conduce a la Renclusa.
Enseguida
la senda del refugio se marcha al sur y nosotros proseguimos camino en busca
del pequeño resalte que es el Cerrojo de Aiguallut. Pasamos junto un
irrepetible abrigo pastoril y alcanzada la cabecera del cerrojo, descendemos
suavemente en busca del Plan de Aiguallut.
El
Valle del Esera tiene un problema conocido y que deviene de su configuración
natural demasiado llana para el esquí. El Hospital de Benasque está a 1750
metros de altitud, la Besurta a 1920 y el final del Plan de Aiguallut a 2100
metros tras haber tenido que recorrer primero 5 y luego 3 kilómetros más. Así que,
toca remar en los dos sentidos.
Pico de Aiguallut.
La
gente ha marchado hacia la Renclusa por lo visto y nosotros tenemos todo el
horizonte para nosotros mientras especulamos dónde podremos calzarnos los
esquís.
Salvaguardia y la Mina.
Nos
asomamos al Forau de Aiguallut y pasamos de largo sobre la cascada. A la bajada
llevará más agua.
Valle de Barrancs.
El
Valle de Barrancs está muy mixto en su parte baja y el Barranco de la Escaleta,
que suponíamos subir por el cauce nevado, está completamente limpio; el valle
prosigue llano, lo sabemos y el asunto no pinta nada bien.
Ascendemos
el resalte final del Plan de Aiguallut por el camino a la izquierda del
Barranco de la Escaleta y proseguimos adelante en suave ascenso pisando los
primeros neveros entre pulidos bloques de granito trabajados por el glaciar.
Subimos
al sol y pisamos una nieve con buen rehielo cuando decidimos no bajar al barranco
y proseguir en suave media ladera hasta
que casi enfrentados al Estany de Coll de Toro nos ponemos los esquís. Estamos
prácticamente a 2200 metros de altitud y
hemos porteado hora y tres cuartos.
Estamos
faldeando por el este el Pico de Aiguallut en la orilla izquierda del barranco
de la Escaleta del que guardamos vagas referencias. Localizamos Las Furcanadas
perfectamente pero en el primer gran rellano del barranco situado ligeramente
por encima de los 2200 metros el valle se abre en dos ramas una estrecha marcha
un poco por la parte este pero no vemos su continuación y otra, la amplia se va
un poco al norte y por ella la huella de tres esquiadores que han pasado
delante y que localizaremos muy arriba.
La
huella hace unas zetas con vueltas marías para superar un primer resalte y
nosotros nos vamos con ellas a lo mismo. La nieve está buena pero en el final más erguido nos obliga a
emplearnos un pelín sin las cuchillas.
Superado
el resalte atravesamos una loma en dirección este para volver al centro del
barranco y enseguida nos enfrentamos a un segundo resalte bastante más
consistente y erguido que a mí no me suena de nada. Es más, estamos convencidos
de que esto no es la Escaleta y creo que marchamos hacia el Pico Barrancs.
Bajamos
ligeramente al fondo del barranco y en la base del corredor decidimos sentarnos
a almorzar tranquilamente para darnos la vuelta a continuación. Estamos a 2450
metros de altitud, nos hemos equivocado y hay que asumirlo.
Hacemos
un buen asiento para los esquís, nos sentamos tranquilamente y almorzamos.
Media hora más tarde, alrededor de las once y media nos vamos para abajo
siguiendo idéntico camino que a la subida pues no queremos sorpresas en un
valle bien nevado pero con cortes y afloraciones rocosas repartidas un poco por
cualquier parte.
Coll de Toro.
Disfrutamos
el descenso del resalte con una nieve soleada y blanda que nos gusta y no
haciendo caso a la proposición de mi chica que quería acercarse hasta el
estrangulamiento del este que hemos desechado nos vamos para abajo pasando a la
orilla derecha del barranco y llegándonos hasta el Estany de Coll de Toro.
Van
a ser las doce y media y desde la orilla sudeste contemplamos el entorno y comprendemos
nuestro error.
Mulleres sal fondo.
Un
cuarto de hora más tarde, ¿qué vamos a hacer a las tres de la tarde en la
furgo? Le digo a mi chica que nos volvemos para arriba hasta el
estrangulamiento y así de paso prospeccionamos el valle y vemos como está para
otra ocasión.
Entrada al Valle de la Escaleta.
Debajo
del estany ponemos las pieles de foca y comenzamos de nuevo el ascenso ahora
por la orilla derecha del barranco. Sin prisa pero sin pausa enseguida
alcanzamos el estrangulamiento del mismo y vamos a ver cómo está.
Han
bajado por allí unos esquiadores que hemos visto cuando nosotros también
descendíamos y ya veremos de donde
venían.
El
corredor es bastante estrecho, está bien nevado y tras una serie de pequeños
escalones se amplía y allana en el lecho de uno de los Ibones de la Escaleta.
Hay una vieja huella que se va directamente a la parte baja del Coll de los
Aranesos y que en principio seguimos pero preferimos seguir por el fondo del
valle, absolutamente amable e inmaculadamente nevado para ganar altura
tranquilamente y luego desde un poco más arriba alcanzar el collado con una
progresión suave.
Pasamos
el ibón por su orilla derecha y proseguimos con una serie de lomas suaves y
resaltes escalonados que nos permiten una subida muy cómoda. Este si es el valle que recordaba yo.
El
valle empieza a girar al sur y es entonces cuando nos vamos al este foqueando
unas rampas muy suaves que nos depositan bastante por encima del Coll de los
Aranesos, resuelto en una arista que se va afinando en dirección a la
conjunción entre la Furcanada y el Turó de Tres Puntas.
Buscamos
una piedra ligeramente al nordeste de la arista y nos sentamos a comer. Estamos
sobre los 2500 metros de altitud cuando son las dos y cuarto.
Estany des Pois.
No
habíamos estado nunca en este lugar que permite la comunicación entre el Valle
del Esera y el Valle de la Artiga de Lin. Es un lugar ciertamente interesante
puesto que además de facilitar un primerísimo plano de los Picos de la
Furcanada, Forcanada o también Mall dels Puis, se puede contemplar el recóndito
y coqueto Estany dels Puis o de la Furcanada y la Serra de Neres que se alarga
hacia el norte; al otro lado de la parte baja del collado el Mall de la Artiga
y en la vertiente sudoeste de Mulleres al Aneto pasando por la Cresta
Salenques-Tempestades que custodian al Pico de Barrancs.
Hacemos
alguna foto y media hora más tarde nos montamos en los esquís para disfrutar de
la jornada.
Descendemos
por el mismo camino que hemos subido esquiando con una nieve que cede entre 5 y
10 centímetros bajo la presión de los esquís amortiguando los giros como si de
nieve polvo se tratase. Es una auténtica pena alcanzar el rellano del fondo del
valle.
Contorneamos
el ibón, que nos oculta todavía sus aguas, por su orilla izquierda y dejando atrás la zona descendida nos
introducimos en el corredor vestido de nieve más blanda que nos deposita en el
rellano siguiente en el que buscamos las huellas de los esquiadores que han
bajado a media mañana, nos pueden guiar hasta el término de la nieve por algún
pasaje diferente al que hemos utilizado para subir.
Los resaltes desde los que nos hemos dado la vuelta a la mañana.
No
será así, sus huellas se introducen enseguida en una zona cortada y nosotros
optamos por remontar unos pocos metros con los esquís en la mano para recuperar
el lugar de nuestra subida y proseguir para abajo.
Alcanzamos
el lugar en el que nos hemos puesto los esquís y recordando el ascenso
atravesamos dos cortes sucesivos con todos los cuidados del mundo y nos bajamos
los dos neverillos que hemos subido caminando y que nos depositan a unos pocos
metros del Resalte de Aiguallut. Son las cuatro menos cuarto y estamos sobre
los 2150 metros de altitud.
Montadas
las mochilas proseguimos para abajo hasta
el Plan de Aiguallut pasando a contemplar y fotografiar la fastuosa cascada
coronada por el Aneto.
Cascada de Aiguallut.
Luego,
cansinamente y al paso, vamos desandando camino con ganas de terminar una
jornada por un lado frustrante pues cuando no se consigue un objetivo siempre
te asalta de alguna manera la frustración, y a la vez interesante y compensadora
que nos ha aportado un innegable toque de placer; en la que hemos tenido que
mover un desnivel de 1180 metros y no demasiado cómodos algunos de ellos.
Diente de perro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¡Gracias por tu comentario! Responderé tan pronto como lo localice.