La Oeste de Erata reluce siniestramente al contraluz de la mañana.
Espierre, Ermita de San Juan, Cara
Oeste, Cima Norte, Erata, Ermita de San Benito, Arista Oeste, Pelupín, Las
Canalizas, Caseta de las Canalizas y Pista a Espierre.
23-03-2018.
Salida 09 h. Llegada 13:30 h.
Mixto.
Fácil.
Juan Castejón, Rosa Mª. Martínez y
Mariano Javierre.
Mapa de Erata procedente de Iberpix. Vía en amarillo.
Dicen
que la Primavera ha llegado pues estamos a 23 de Marzo de 2018, pero el tiempo meteorológico no ha cambiado gran
cosa en la mayoría de este mes de Marzo que han catalogado de invernal.
La Pista de Espierre está demasiado limpia.
Ayer
dijimos que saldríamos o saldríamos y hoy
a las ocho y cuarto nos metemos en el coche sin objetivo prefijado,
tenemos varios.
En el Puerto calzamos los esquís tras una hora larga de porteo.
La
mañana está medio clara y su evolución puede complicarse hacia el mediodía por
lo que se desaconseja cualquier opción de actividad larga y la Ventana Norte
del Valle de Tena que vemos ni nos gusta ni avala ninguna de las opciones que
barajábamos por allí. Así que, desde cerca de Biescas nos dejamos engañar por
Erata.
Ascendemos a Erata por los lugares acostumbrados de la oeste.
Cuando
llegamos a Espierre la pista tiene el mismo aspecto que tenía el día que nos
dimos la vuelta sin sacar los esquís. La portera está abierta pero para media
hora que calculo portearemos no merece la pena jugársela.
La Orientación Norte de Erata nos tienta para el descenso.
Presuponemos
que a partir de San Juan de Espierre aparecerá la nieve en la pista con lo que
podremos empezar a foquear, pero se cumplirá y con propina la frase de Juan que
vaticina una hora de porteo: llegaremos al puerto con los esquís recién
puestos.
Subiendo el segundo resalte algo tieso.
La
Oeste de Erata no tiene demasiada nieve en la parte baja por lo que habrá que
tener algún cuidado al descenso, lo que nos invita a echar la vista sobre las
Canalizas que es la parte del circo orientada al norte y que suele guardar más
nieve.
Nieve variada incluida la costra en Erata.
Trabajos del viento en la Oeste de Erata.
De
momento y aprovechando que la nubosidad está muy alta y que quizás se trate de
la zona de mejor meteorología,
foqueamos en dirección sudeste
por suaves campas cada vez con más nieve que aparece variada: costra y polvo.
Erata Norte desde el altiplano.
Hay
que superar, a pesar de todo, un par de resaltes con nieve pelín dura antes de
alcanzar la rampa medianamente inclinada que defiende el altiplano del pico,
aprovechando que incluso ha salido un poco el sol.
El viento ha desenterrado la nieve vieja que está muy dura.
Alcanzamos
el altiplano en la zona de la Punta Norte a la vez que comenzamos a notar tanto
visualmente en la nieve como realmente en nuestros cuerpos los efectos del
viento que sopla con ganas acercándonos las ventiscas que se descuelgan Valle de
Tena abajo.
Erata desde San Benito.
El
tránsito de punta a punta es un mano a mano con el viento que termina por
enfriarnos avanzando sobre la vieja y dura nieve que el viento ha dejado al
descubierto.
San Benito de Erata nos ofrece protección para el viento.
En
la Cima de Erata a 2003 metros de
altitud no perdemos tiempo, Juan se marcha hacia la Ermita de San Benito
prosiguiendo arista adelante hacia el sur en suave descenso mientras que yo me
quedo a quitar pieles mientras llega mi chica. El vendaval hace difíciles las
maniobras.
El inicio del descenso desde San Benito está ventilado.
Bajamos
hasta San Benito con el objetivo de
alcanzar algo de abrigo del viento, cosa que conseguimos pero no podemos ni
debemos quedarnos puesto que las nieblas se nos están echando encima.
Hacia Pelupín en la Arista Oeste de Erata.
Hacemos
algunas fotos, terminamos la transición que habíamos comenzado en la Cima de
Erata y cinco minutos después continuamos con
el descenso de la arista sur.
Oturia con permiso de las nieblas desde Pelupín.
La
nieve venteada, algo dura, se baja bastante bien con algún enganchón en nieve
costra. La loma subsiguiente, orientada al oeste, requiere de un par de breves
remontes que hacemos sin soltar taloneras utilizando la nieve polvo que tachona
la loma hasta alcanzar Punta Pelupín
acotada a 1834 metros de altitud. Desde allí faldeamos la loma en busca de la
depresión en la que iniciaremos el descenso de las Canalizas.
Allá se queda Erata. Parece que las nieblas han sido momentáneas.
La
nieve sigue variada pero la costra desaparece prácticamente y tan pronto como
nos orientamos al norte. Iniciando el descenso comenzamos el disfrute de la
nieve polvo que, entre pinos, rellena la ladera.
Esquiando entre pinos en las Canalizas.
Palas agradables aunque cortas bajando de Erata.
El
descenso es agradable aunque corto y lo disfrutamos con permiso de las nieblas
que se han disipado dejándonos un rato
de lo mejor de la mañana. Rampa a rampa, entre pinos, nos llegamos a la
Cabaña de las Canalizas donde nos
detenemos al sol a echar un bocado. Son las doce y cuarto.
En la Caseta de las Canalizas.
Poco
después, una decena de metros más abajo tomamos la pista que cubierta de nieve
llanea brevemente hasta el Barranco de Espierre.
Deslizando por la pista hacia el Barranco de Espierre.
En
el barranco la nieve se corta y cargamos los esquís en la mochila para
recorrerla al encuentro de la pista principal. Es la una menos cuarto.
El porteo de vuelta algo más corto que el de la ida.
Primero
remontamos unos metros para iniciar el descenso hasta la Ermita de San Juan,
casi media hora pero menos que si hubiéramos vuelto por el camino recorrido en
el ascenso. De allí para abajo y a ritmo de charla emplearemos casi otra media
hora para llegarnos al coche cosa que haremos alrededor de la una y media
pasada.
Adiós a la Oeste de Erata con la nieve muy alta.
Nuestra circular ha sido de 800 metros de desnivel acumulado contra el reloj de un empeoramiento del
tiempo que ha amenazado muy pronto pero que aquí en el Sobrepuerto se ha disipado con un pequeño episodio de
arco iris.
Hola Mariano.
ResponderEliminarCon todo lo que ha caído, es una lastima no empezar desde abajo ya con los esquíes, pero por lo menos, la climatología os fue más o menos favorable, aunque "la nieve" en algunos tramos brillaba más que un diamante.
Un saludo.
¡Hola Eduardo!
ResponderEliminarErata es uno de nuestros montes de culto y podemos dar por bueno un porteo de una hora incluso en épocas en las que la gente sale foqueando desde el coche.
Ha caído y hay mucha nieve pero de 1600 metros para arriba, que es donde debe estar, y Espierre está a 1250 metros; ademásn esa pista es un horno orientada al oeste y en una ladera sur.
La cima siempre está muy ventilada pues le entra el cierzo con absoluta limpieza. Soplaba con ganas nos amenazó la ventisca pero se disipó el marrón enseguida. El brillo de la ladera nos preocupó pero con cuchillas no supuso mayor problema.
¡Que vaya bueno!