LLegando a las Foyas de Brazato cierra el Pico Brazato.
Balneario de Panticosa, Camino y
Barranco de Brazato y Foyas de Brazato.
26-05-2018.
Desnivel acumulado 850 m.
Distancia recorrida 10000 m.
Tiempo efectivo de marcha 04:30 h.
Nublado.
Fácil.
Agua en el Balneario de Panticosa o en
el Barranco de Brazato según costumbre y época.
Las Foyas de Brazato es un recorrido
siempre agradable y apto para un buen número de senderistas que quieren
recorrer una ruta no tan clásica del Balneario de Panticosa.
Rosa Mª. Martínez y Mariano Javierre.
Mapa de las Foyas de Brazato procedente de Iberpix. Via en amarillo.
Para
hoy 26 de Mayo de 2018 está previsto un tiempo inestablemente primaveral con
nubosidad a granel y decidimos jugárnosla por la mañana ya que la evolución es
a peor.
Nos
habíamos quedado compuestos y sin novia, como se suele decir, los dos días
anteriores meteorológicamente similares y a la tercera iba a ir la vencida. Son
las ocho y media de la mañana cuando aparcamos en el Balneario de Panticosa a
1630 metros de altitud, frente al Gran Hotel pues no hay más que cuatro coches
aparcados.
El Balneario de Panticosa está medio desierto.
Tomamos
el Camino de los Ibones de Brazato para abandonarlo en la primera señal de
Aviso de Riesgo de Aludes situada a 1750 metros de altitud según canta el
altímetro. Creía que el desvío estaba a mayor altitud pero…
Rellano herboso acercándonos al Barranco de Brazato.
Allí
tomamos un poco transitado camino que asciende a un rellano herboso y se
aproxima en ascenso al encuentro del Barranco de Brazato.
Zeteamos
en dirección sudeste y nos aproximamos al barranco que se nos muestra por
primera vez suntuoso pues con estas temperaturas y estas cantidades de nieve…
baja una barrancada de escándalo.
Nuestro problema principal será el Barranco de Brazato.
Creo
que alrededor de los 2000 metros hay una escalerilla metálica a modo de
pasarela que permite cruzar el barranco pues queremos subir a Foratula
Occidental y en estas circunstancias hay que pillarla sí o sí.
Nos
acercamos a la altitud buscada cuando el terreno arrellana y guiados por
abundantes hitos de piedras nos aproximamos al barranco transitando los
primeros neveros en los que no hay huellas de tránsito.
Cruzamos el Barranco de Brazato por un precario puente de nieve.
El
barranco tiene afluentes y ramas pero permanecemos en su orilla derecha con los
ojos puestos en la ladera izquierda, por la que tendremos que proseguir, y que
tiene muchísimo más granito que nieve lo que decididamente nos preocupa.
Hacia las Foyas de Brazato peleando con las ramos del barranco.
Los
hitos nos llevan en suave ascenso barranco arriba, desgastamos el barranco de
tanto mirar la pasarela pero no aparece cuando nos situamos por encima de los
2100 metros de altitud y hay que cruzar el barranco cosa que haremos, rama a
rama, aprovechando que el cauce está bastante ramificado. Nos hemos olvidado de
Foratula pues en estas condiciones pues como que no y terminamos cruzando una
rama más importante del barranco por un puente de nieve que tiembla nada más de
mirarlo y calzamos los esquís después de hora y cuarto de porteo.
El Pico Serrato desde las Foyas de Brazato.
Avanzar
hacia las Foyas de Brazato entre pinos, lo que acostumbra a ser un placer, hoy
no es posible pues la nieve tiene cortes y está salpicada de barranquillos con
agua. Por ello, cruzamos con cuidado todo el plano lecho del barranco y en el
límite con la ladera sudoeste vamos a tratar de ganar altura. Una viejísima y
poco evidente huella de esquís ratifica nuestra elección.
Quiere clarear hacia el oeste pero será momentáneamente.
Proseguimos
por la orilla izquierda del barranco más al sudoeste, con ciertos cuidados
puesto que además de cantar mucho el agua
se le abre ojos de considerable tamaño.
Alrededor
de los 2250 metros se acaban los problemas de los barranquillos y se extienden
ante nosotros las suaves campas de nieve que se adentran en las Foyas de
Brazato.
Las dos Cimas de Tablato.
La
mañana está cálida y delicada, la nubosidad algo inestable sube y baja con
alguna frecuencia movida por rachas de viento que sopla del este siempre
respetando el lecho de las Foyas. De cuando en cuando cae alguna gota de agua
sin importancia y comienzan a hacerse patentes algunas rachas de viento.
En las Foyas de Brazato bajo el Collado Bajo del mismo nombre.
Con
el horizonte del Pico Serrato entretenido con las nieblas nos acercamos al
Collado Bajo de Brazato y sobre los 2450 metros de altitud, antes de alcanzar
el collado nos detenemos medio abrigados del viento para echar un café con un
dulce. Van a ser las once y cuarto.
El Noroeste tiene momentos con algunos claros.
La
mañana no está para demasiadas alegrías, ha sido benevolente con nosotros y
será mejor no tentar demasiado la suerte. Consecuentemente, nos montamos en los
esquís y nos vamos para abajo.
Iniciando el descenso de las Foyas de Brazato.
La
parte alta de las Foyas de Brazato tiene una nieve primavera excelente que
disfrutamos con los Tablatos de gratos recuerdos. Un poco más abajo la nieve
está sucia y muy acanalada y esquiarla ya no resulta tan agradable pero esto es
lo que hay.
La nieve de la parte alta de las Foyas de Brazato está muy bien.
Alcanzada
la parte baja del barranco la seguimos sin problemas gracias a un par de
banderolas rojas que recojo para colocar en lugares visibles pues resulta
difícil seguir nuestras imperceptibles huellas de subida.
La meterología nos respeta en las Foyas de Brazato.
Bajamos
un poco más del cruce del barranco que hemos hecho a la subida, terminamos pasando por otro puente de
nieve y cargando los esquís en la
mochila para atravesar la última rama del barranco sin miedo ya a meter alguna
bota en el agua. Son las doce y cuarto.
Pronto terminara lo bueno de la jornada.
Luego,
por la orilla derecha del barranco enseguida encontramos hitos que seguimos aprovechando los neverillos
residuales repletos de trampas de nieve que bajaremos con cuidado.
Tras cruzar una primera rama del Barranco de Brazato.
Los
hitos y algunas de nuestras huellas nos llevan por el camino de la mañana que
termina por depositarnos en el rellano herboso y seguidamente a la Señal de
Peligro de Avalanchas. Luego GR11 abajo a la una y cuarto, con otra hora de
porteo, liquidamos nuestro paseo alternativo a Foratulas que no ha dejado de
tener su parte agradable.
Soldanella alpina en el Barranco de Brazato.
Sabíamos
que esto podía pasar por estos lares pues
a estas alturas de la temporada no son más que ratos robados a una Primavera
dueña y señora del monte pero hemos ventilado el piojo y además nos hemos
metido 850 metros de desnivel que al menos servirán para no perder la
costumbre.
Poco han durado los claros en Argualas-Infiernos.
Además
dicen que esta primavera se va a prolongar, así, tan nubosa, tal cual. ¡Qué
ustedes la disfruten, que no va a ser fácil!
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¡Gracias por tu comentario! Responderé tan pronto como lo localice.