27 jun 2015

46-15. CASTILLO MAYOR EN CIRCULAR. 25-6-2015.

Castillo Mayor desde Puértolas.

Abrevadero y Crucero de Puértolas, Carretera, Pista de la Montaña   y Cara Sur. Descenso por la Arista Oeste, Barranco de la Valle, Pista y Carretera a Puértolas.

25-06-2015.

Salida 09:45 h. Llegada 16 h.

Sol.

Bastante fácil.

Juan Castejón, Rosa Mª. Martínez y Mariano Javierre.

Mapa de Castillo Mayor procedente de Iberpix. Vía en amarillo.

            En Castillo Mayor habíamos estado en una ocasión allá por el 98. Recorrimos la vía normal que parte del cruce de carreteras a Bestué y Escuain dándonos una vuelta por la arista cimera.

            Hoy 25 de Junio de 2015 volvemos como recurso y sin consultar información tiraremos de recuerdos. La Ferrata de Foradada del Toscar está cerrada y elegimos Castillo Mayor antes que Sestrales.

            Hemos dormido en el Refugio de Plana Canal y bajaremos hasta Ainsa  para que nos confirmen el tema de la ferrata y volver hasta Puértolas. Son las diez menos cuarto cuando dudamos acerca del inicio del camino que por cierto no encontraremos. Nos llegamos al cruce de carreteras y nos volvemos para aparcar junto a la fuente abrevadero unos metros más arriba. Estamos a 1180 metros de altitud.

            Fotografiamos la conocida cara sur del pico en la que se aprecia el punto de rotura de las paredes que es por donde se accede al sinclinal colgado superior y nos bajamos hasta el cruce de carreteras tomando la que conduce a Bestué como procedimiento de acercarnos a las paredes del Castillo.

En la Pista a Plana Canal.

            El camino, como nos indicarán poco después una pareja que parecen de la zona, arrancaba de las inmediaciones del cruce de carreteras y ascendía por medio del pinar a la Collada Custodia hasta acercarse a las paredes en busca del acceso en plena cara sur.

            Nosotros bajando hemos visto el inicio de un camino que tiene que coincidir forzosamente con la vía normal y confirmado por la pareja nos vamos en su busca.

            Recorreremos  alrededor de 3 kilómetros de carretera en suave ascenso a través de un maduro robledal que nos propicia una deliciosa sombra en esta tan cálida mañana hasta que alcanzamos el inicio de la Pista de Plana Canal, o “Camino de la Montaña.”

Martagón silvestre en Castillo Mayor.

            Todavía tendremos que caminar alrededor de un kilómetro más por la pista que en dirección oeste gana altura lentamente hasta que aparece un pequeño aparcamiento y una cita de piedras señala el inicio del camino que parte en dirección norte por medio del bosque mixto.

            Estamos sobre los 1300 metros de altitud,  el camino inicialmente está empedrado y conduce enseguida a una fuente desde la que se recoge el agua para conducirla entubada para abajo, no sabemos a dónde. Luego en fuerte y sostenido ascenso se va para arriba vuelta a vuelta a través de un espeso sotobosque de boj que nos preserva del sol.

            Las paredes que parecen próximas se resisten lo suyo a ser alcanzadas pero un persistente ascenso nos conduce a las mismas y a la confluencia con el camino que asciende suavemente por la Collada Custodia y que en su día ya recorriéramos.

            El camino que de nuevo presenta tramos empedrados  asciende en diagonal un poco al oeste para introducirse entre las paredes y superar las mismas sabiamente y vuelta a vuelta.

Lis del Pirineo en Castillo Mayor.

            Poco más arriba se ensancha el terreno atraviesa un hayedo y alcanza un claro todavía no copado por la masa arbustivo-forestal que se conoce como el Prado del Cura y en el que encontramos Iris del Pirineo, martagones, antericos y asfódelos.

El Casquete Somital de Castillo Mayor se asoma.

            Superado el hayedo el camino prosigue ascenso entre bojes y genistas que empiezan a florecer y tras sucesivas lazadas alcanza el borde del sinclinal colgado similar al de su gemelo el Castillo de Acher al que también se accede por el sur  presentando bordes calizos que culminan en la cima situada en la parte norte vestida de paredes verticales.

            Hay una balsa con paredes de piedra seca, estamos por encima de los 1750 metros de altitud y disponemos de  tres opciones de alcanzar la cima que corona un lapiaz calizo que arranca del rellano herboso del sinclinal que en su día fuera pasto para el ganado.

Valle Colgado de la Plan y Lapiaz de Castillo Mayor.

            Desechamos las opciones más lógicas y amables consistentes en rodear tanto por el este como por el oeste para recorrer la cresta pues tenemos otros objetivos y nos vamos de frente atravesando el rellano. Un caminillo en el praderío se incorpora enseguida al lapiaz y con hitos por todas partes nos eleva hacia la cima que alcanzamos no sin esfuerzo y un tanto al oeste de la misma.

Alcanzando la Arista Oeste de Castillo Mayor.

            Recorremos el resto de arista en busca del vértice geodésico que se recorta un poco más arriba mientras contemplamos pequeñas brechas de las que arrancan verticales corredores que recorren las paredes de la cara norte hasta alcanzar las pedrizas algunos cientos de metros más abajo en la vertiente del Río Yaga.

Cima de Castillo Mayor.

            Son las doce menos cuarto cuando alcanzamos la Cima del Castillo Mayor situada a 2020 metros de altitud uno de los clásicos y espectaculares miradores situados en el Prepirineo y que suelen ser asiduamente visitados en busca de las preciadas vistas que ofrecen tan magníficos miradores.

Portillo de acceso a la Plan de Castillo Mayor.

            Hoy no es el caso pues la nubosidad secuestra la mayor parte del Paisaje, sobre todo el distante y localizamos poco más que Sestrales, Alguna Zuqueta, el Portillo Tella, algo que quiere relucir sobre Cotiella, Llerga, Solana y Montañesa. A nuestros pies El caserío de Escuain y el Barranco del Yaga con el Circo de Gurundué, Revilla y Tella.

            Hacemos alguna foto con poca luz y menos profundidad y nos sentamos a echar un bocado mientras nieblas y nubes siguen a lo suyo.

Descendiendo por la Oeste de Castillo Mayor.

            Alrededor de las doce y media iniciamos el descenso recorriendo la arista hacia el oeste en suave descenso. Cuando menos lo esperas la abandonas y te introduces en el lapiaz que se camina generalmente bien pero que de cuando en cuando se vuelve algo incómodo.

            Pasamos unos tramos de placas calizas lisas y alcanzamos el inicio de una depresión ya en las proximidades de la Peña del Hombre en el final de la arista que se prolonga al noroeste.

Entrada al Barranco la Valle en Castillo Mayor.

            La depresión se ahonda y confluye en el inicio de un corredor entre paredes, más consistentes las de su orilla derecha.

            Nos asomamos a la cabecera, no vemos huellas de tránsito pero si posibilidades y posibles dificultades. Con todo y con ello nos vamos para abajo dispuestos a jabalinear si fuera preciso. Es la una y cuarto.

La Cabecera del Barranco la Valle o Comapuarta.

            La cabecera del corredor tiene el aspecto de viejo camino en desuso vestido de hierba en el inicio del barranco y nos permite cómodamente pasar el estrangulamiento de las paredes.

            Debajo aparece la pedriza  vestida de bojes entre los que se desciende bien. Unos metros más abajo desaparecen los bojes y un par de pedrizas inclinadas que se patinan excelentemente nos permiten descender al menos un centenar de metros y nos depositan en el inicio del Barranco de la Valle o Comapuarta que desciende en dirección oeste.

Bajando las Pedreras del Barranco la Valle.

            Hay una opción lógica que hemos abandonado al tomar las pedreras y que suponemos consistiría en proseguir camino por la parte derecha del barranco hasta alcanzar un lomo vestido de praderío que alcanzaba la Pista de Plana Canal en uno de sus salientes; pero la tentación ha podido con nosotros más en este caso en el que el supuesto camino deberá estar completamente perdido pues no veremos ni un solo hito ni siquiera en la cabecera.

            Nos queda el barranco que, con un poco de agua, se introduce rectilíneo en un espeso bosque mixto aunque su inicio está bastante limpio y perfectamente transitable.

El Barranco la Valle.

            Pero solamente es el inicio y nos queda un considerable tramo de barranco en el que poco a poco se cierra la vegetación y aparecen saltos que descendemos cómoda y fácilmente hasta que nos vemos obligados a vadearlos bien por un lado o por otro ya que la roca o está mojada o el salto es demasiado consistente para destreparlo.

Llegada a la pista del Barranco la Valle.

            Hay un par de vadeos delicados sobre todo uno por la derecha del barranco que nos obliga a descender una decena de metros verticales agarrándonos a cualquier arbusto que aparece a nuestra mano y otro por la izquierda en el que nos introducimos ente bojes viejos y crecidos alejándonos un poco del cauce para retornar al mismo y enseguida alcanzar la pista en el más bajo de los vados encementados. Son las dos y media, hemos rematado el barranco que era la complicación prevista y no hemos hecho ni un solo hito pues no es un camino demasiado aconsejable si no se tiene una considerable experiencia. Mi chica ha bajado cabreada como una mona.

Sestrales desde el Barranco la Valle.

            Nos queda tomar la pista para abajo y caminar alrededor de 3 kilómetros que llaneando o cuesta abajo no se hacen mal y nos permiten alcanzar el lugar donde la hemos abandonado a la subida con lo que cerramos el bucle a 1300 metros de altitud.

El Barranco la Valle desde la pista.

            La continuación es un kilómetro más de pista hasta la carretera y tres más hasta las inmediaciones de Puértolas que es donde hemos dejado el coche.

            Son las cuatro de la tarde cuando nos llegamos al coche liquidando el recorrido de la jornada que se ha saldado con alrededor de 900 metros de desnivel no exentos de dudas y algunas complicaciones que no son más que una de las salsas con las que nos gusta aderezar el plato de la montaña que sigue teniendo un delicioso sabor y un encanto inigualable.

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