En la Larga Diagonal oeste-este de la Sur de Samola Baja.
Puente de la Fuente del Paco, Camino
Puicerbera, Pista al Cubilar de la Espata, Barranco Bozuelo, Arista Sudoeste y
Cara Sur de Samola Baja.
15-04-2018.
Salida 08:50 h. Llegada 15:05 h.
Mixto.
Fácil.
Juan Castejón, Rosa Mª. Martínez y
Mariano Javierre.
Mapa de Samola Baja procedente de Iberpix. Vía en amarillo.
Ha
llegado Abril con sus nieves mil y ha dejado un Pirineo redondo de nieve media
y alta que es donde tiene que estar, aunque para ello no haya quedado otro
remedio que pagarla al contado con un mal tiempo persistente, pero yo nunca he
visto nevar sin que haya nubes.
Hemos
pasado la semana el blanco cuidando
nuestros catarros, ayer sábado no nos creímos que el día terminaría estando
mejor de lo anunciado y hoy 15 de Abril de 2018 aprovechando favorables predicciones
nos vamos a Samola Baja. Me había pasado por la cabeza Collarada pero desde
aquel día que vi bajar arrastro a un esquiador y cada vez que pienso en el
desnivel pues como que no. Es curioso
que no me importen 1700 metros a calcetín y en cambio me echan para atrás con
los esquís.
Iniciando el porteo desde las inmediaciones de la Fuente del Paco.
A
las nueve menos cuarto estamos aparcando al norte del puente que conduce a la
Fuente del Paco a 1250 metros de altitud, el aparcamiento tiene concurrencia y
nosotros tenemos un sitio justamente donde arranca el camino.
Alcanzamos la Pista de la Espata y comenzamos a foquear.
La
mañana está estupenda, con el cielo algo arañado y la vieja tiradera de madera
que asciende consistentemente nos mete en calores. Media hora después
alcanzamos la Pista de la Trapa con lo que liquidamos el porteo y calzamos los
esquís 1450 metros de altitud.
Punta Espata desde la Pista a Collarada.
La
pista tiene rodadas y nieve escasa en las zonas abrigadas pero permite el
foqueo por las orillas sin necesidad de
descalzar esquís. Pasadas las dos primeras lazadas encontramos un par de coches
aparcados y a partir de allí la nieve es más que sobrada tanto para foquearla
como para deslizarla en descenso.
Refugio de la Espata y nuestro Corredor al Collado de Marañán.
Son
3 kilómetros al solecillo de la mañana y sobre nieve que blandea bastante los
que nos depositan en el Refugio del Cubilar de la Espata a 1670 metros de
altitud, pero sobre el sur y este aparecen nubes demasiado oscuras y compactas que
no presagian nada bueno. Son las diez y media.
El cielo se ha cubierto bastante subiendo el Barranco Bozuelo.
Entramos
al Barranco de Bozuelo extraordinariamente cubierto de nieve acanalada pues ha
debido llover algo y antes de acceder al corredor perfectamente orientado de
este a oeste la visibilidad disminuye alarmantemente haciendo peligrar nuestro
futuro, pues charlamos con un esquiador que baja sin hacer el pico y nos dice
que por arriba hace bastante viento.
Acercándonos al Cierre bajo el Collado de Marañán.
El
corredor vestido de buena nieve permite un foqueo cómodo que hacemos sin una
sola vuelta maría. Pasado el bloque calizo se arrellana y hasta disfrutamos de
un hueco de sol que nos alegra la mañana. Será la señal que marca el inicio de
la fuga de la nubosidad al menos por la zona que transitamos.
Remontando el Cierre del Collado de Marañán.
Poco
después alcanzamos el cierre del corredor bajo el Collado de Marañán y virando
al norte ascendemos la pala que permite el acceso al Cubilar de los Bueyes.
Se
trata de un tramo algo erguido en el que mis pieles resbalan por lo que
calzamos cuchillas y pelillos a la mar. Remontada la pala volvemos a virar al
este y a través de unas lomas suavemente ascendentes buscamos la Arista
Sudoeste de Samola Baja que arranca de la parte más occidental del altiplano cimero.
Entrando en la Sur de Samola Baja con las Collaradas detrás.
Desde
la arista, suavemente ascendente y ya por encima del Collado de Marañán, divisamos
toda la Cara Sur que es la que vamos a recorrer. Se trata de una amplísima
pala fastuosamente soleada con nieve por un tubo y en la que vamos a
encontrar algo de nieve costra pero mayoritariamente nieve que se está transformando.
Ganamos
altura por la alomada arista siguiendo la huella de descenso de algún esquiador
de ayer y en el pequeño rellano de la
misma iniciamos una larga diagonal, suavemente ascendente y orientada al este para
ganar altura sobre unas afloraciones rocosas de la parte más oriental de la
pala.
Acercándonos a nuestro comedor particular en Samola Baja.
Antes
y en el rellano, pasaremos junto a un gran bloque calizo errático, nuestro
comedor particular y nos detendremos brevemente para echar un café y un trago
de agua. Juan se ha marchado para arriba siguiendo la loma.
No
perdemos prácticamente tiempo y proseguimos con la diagonal que nos lleva hasta
el extremo este de la pala, lugar donde se arrellana un poco la pared de nuevo y virando seguidamente al norte
iniciamos otra larga diagonal que nos tiene que depositar en el altiplano
cimero.
Liquidada la gran diagonal emprendemos otra en busca del Altiplano Cimero de Samola Baja.
La
diagonal atraviesa tramos de nieve costra, otras de primavera pues ya ha
revenido y restos de nieve polvo y se arrellana para entrar en el altiplano
cimero, en que de nuevo viramos al este para superar un suave y corto resalte
que nos deposita en la Cima de Samola Baja situada a 2568 metros de altitud. Son
las doce y veinte y hemos subido en tres horas y media mejorando la anterior subida a pesar de que abrigaba algún temor
fundamentalmente a causa de los antibióticos que he estado tomando.
En el altiplano cimero con el Resalte Final a Samola Baja.
Juan
que se ha ido a dar un garbeo con nieve polvo profunda y ha tenido que trabajar de lo lindo. Aparecerá por la
vertiente norte enseguida.
Con Samola Alta desde Samola Baja.
En
la cima vestida de importantes cornisas hacia el Valle del Aurín hacemos
algunas fotos con un cielo que nos rodea con nubosidad estropeando la
fotografía pero que sigue respetando la zona en la que nos encontramos y
disfrutamos de un paisaje próximo nevado como pocas veces lo hemos tenido.
Foto de Cima de Samola Baja.
Veinte
minutos después iniciamos el descenso pues queremos aprovechar la claridad del
día antes de un eventual empeoramiento que pueda malograr el descenso.
El Altiplano de Samola Baja y Villanúa azulada.
El
altiplano vestido de nieve costra no demasiado profunda no es de lo mejor que
hemos esquiado pero mejora en cuanto nos introducimos en la pala sur donde la
costra ha desaparecido prácticamente transformada en nieve primavera.
En el Altiplano de Samola Baja.
Giramos
para abajo al gusto siguiendo aproximadamente el camino de subida hasta
alcanzar nuestro comedor al que hemos de trepar para comer sentados fuera de la
nieve, es la una y cuarto. Media hora después proseguimos con el descenso, la
nieve ha perdido la costra y está divina.
Nieve un poco costra en la parte alta de Samola Baja.
Cerca
ya del Collado de Marañán abandonamos la loma y nos bajamos al Desagüe de
Marañán para bajar la pala en la que hemos puesto las cuchillas a la subida y
que ahora está divina.
Trepando a nuestro comedor en Samola Baja.
El
Corredor del Barranco de Bozuelo es un plato que tomo a mi gusto, girando de
punta a punta hasta aburrir a las marmotas. Para una vez que pillo nieve buena…
Disfrutando en el Corredor del Barranco Bozuelo.
Enseguida
alcanzamos el Refugio del Cubilar de la Espata, son las dos de la tarde y tras cerrar la ventana que ha abierto Juan a
la subida para que se ventilara, tomamos la pista cada uno por su sitio. Tras
la primera revuelta, larga y casi sin pendiente en la que hay que remar un
poco, atajamos la siguiente. Juan que nos espera en la revuelta para hacernos
una foto casi ni nos ve.
Finalizando el Corredor del Barranco Bozuelo.
De
allí para abajo se desliza despacio pero bastante bien hasta que muy próximos
al incipiente corte más alto de la mañana, donde confluye uno de los caminos
que bajan de la Trapa, nos juntamos con el grupo que tenía los coches aparcados
en la Fuente del Paco y que bajan de Collarada porteando.
Deslizaremos cuanto podamos en la Pista de Collarada.
Recogemos
los esquís mientras charlamos con ellos a la vez nos alcanza Juan con aire marcial. Nosotros creíamos que lo
tendríamos por delante.
Caminaremos
alrededor de diez minutos por la pista y en el cartel más alto de los dos que
indican descensos a la Fuente del Paco, lo tomamos para conocer.
Hepáticas nobilis en el Barranco de la Espata.
Se
trata de un camino que algo más tendido que el de la mañana y un poco más largo
que se acerca enseguida al Barranco de la Espata y por su orilla izquierda
continúa un suave descenso, el firme del camino es algo más mullido que el otro
y más cómodo para las botas de plástico.
Zoom sobre la Sur de Samola Baja desde nuestra casa.
Alcanzamos
los Prados de la Fuente del Paco y a las tres pelín pasadas llegamos al coche
liquidando una agradable jornada con sus 1350 metros de desnivel de tacada,
algo que suponíamos en principio pero que a las once de la mañana aparecía
francamente amenazada. Le ha costado pero al fin parece que la Primavera que
nos gusta ha llegado, esperamos que para quedarse aunque en los alrededores del
Ebro estén haciendo cursillos de natación acelerados pues el agua, parece ser,
que va a llegar al río.
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ResponderEliminarRápidamente, pero mira que eres pesado.
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