Las nieblas nos prestan imágenes sugerentes en Montagnon de Besse.
Goust, Plateau y Col de Lusque, Plateau,
Cabaña y Col de Besse, Pic de la Gentiane, Montagnon de Besse, Col de Taillandere,
l’Escala, lac Montagnon y vuelta por la arista sin pasar por el Col de Besse.
10-08-2019.
Salida 08 h. Llegada 14:45 h.
Niebla.
Fácil.
Rosa Mª. Martínez y Mariano Javierre.
Mapa de Gentiane, Montagnon de Besse y l'Escala procedente de Geoportail. Vía en amarillo.
Seguimos
con nuestra costumbre de recorrer valles y picos desconocidos, a ser posible o
hacerlo por vías diferentes a las conocidas y, no acabaremos nunca, pero hoy 10
de Agosto de 2019 le toca al Montagnon de Besse arrancando de Goust, casi todo
nuevo para nosotros. Queremos patear la zona al este del Lac de Montagnon que
visitáramos en su día de camino entre Montaut, Mardas y Montagnon de Iseye a
los que accedimos por el Bitet.
Inicio del camino en Goust.
Les
Eaux Chaudes ya no nos cae tan cerca y más hoy que nos reciben las nieblas en
el Portalet y además nos pasamos la
entrada a Goust, llegamos a Laruns y vuelta. La carretera de Goust arranca de
la del Portalet hacia el oeste y un poco más arriba de Eaux Chaudes pero tiene
un cartelillo de mala muerte solamente visible cuando subes el puerto y
nosotros bajábamos.
Elevándonos sobre el Caserío de Goust entre nieblas y zonas quemadas.
Son
las ocho de la mañana cuando aparcamos en la parte alta del diseminado Caserío
de Goust a 870 metros de altitud. Nos orillamos en la estrecha carretera y comenzamos
nuestro camino en dirección noroeste recorriendo un tramo rectilíneo y
ascendente de pista de servicio para la casa más alta del pueblo. El camino
está profusamente balizado de rojo y amarillo pues forma parte del Tour de la
Valle de Ossau y bien se nos va a valer pues las nieblas nos esperan a la
entrada del hayedo.
Antena con caseta emergiendo de las nieblas.
El
camino describe una amplia lazada ascendente
orientado al norte y a través de una zona quemada para alcanzar el
Plateau de Lusque sobre los 1200 metros de altitud. Allí, gira 180º , pasa
junto a una antena con caseta que luego veríamos desde abajo a la vuelta y
faldea por el interior del hayedo al oeste, bastante llano, hasta que comienza
a remontar de nuevo consistentemente en busca del Col de Lusque situado a 1458 metros de altitud y en el que
ya maridan los abetos con las hayas.
Van
a ser las nueve y cuarto. La mañana está
muy húmeda y cálida regalándonos una sudada interesante pues subimos a ritmo.
Agosto y la brecina ya está en flor en el Plateau de Besse.
De
nuevo volvemos a llanear al oeste en un tramo muy húmedo y sombrío en el que
nos vamos aproximando al Barranco de Besse aunque la vegetación no permita
verlo.
Poco
después llegamos al Rellano de Besse que ascenderemos cruzando varias ramas del
barranco, hoy todas con agua y lo hacemos entre claros de praderío en los que la
brecina ya los tiñe de color y masas reducidas de hayas contenidas por la
actividad ganadera.
Remontando del Plateau a la Cabaña de Besse.
A
medio rellano giramos un poco al norte y siguiendo un suave ascenso alcanzamos
la Cabaña de Besse situada a 1561 metros de altitud. Está abierta y en bastante
buen estado para poder pernoctar en ella pues en las inmediaciones hay una
fuente encañonada.
Dejando atrás la Cabaña de Besse de camino al col del mismo nombre.
El
camino prosigue en suave ascenso, muy rectilíneo, en dirección nordeste y a través de una frondosa mancha de hayas en
busca del Col de Besse colmado de praderío y situado a 1711 metros de altitud.
Desde el Col de Besse el Pic de la Gentiane.
En
el collado, abandonamos el camino balizado que se ahonda en busca de la Cabaña
de Arrioutort y tomamos la amplia loma suavemente ascendente en la que pasta un rebaño de vacas claras.
En el Pic de la Gentiane, gencianas lúteas.
Diez
minutos después se termina nuestra subida y comenzamos el descenso del Bosque
de Pan. Hemos alcanzado la poco significativa Cima del Pic de la Gentiane
situada a 1752 metros de altitud. Son las diez y diez.
Estamos
en un claro altitudinal de nieblas, que nos asedian tanto por arriba como por abajo y en estas
circunstancias no tenemos demasiado futuro. Volvemos unos metros en descenso y
nos sentamos en unas piedras metamórficas a echar un bocado y a esperar.
Al menos podemos visualizar con dificultad que se trata de la Arista de Montagnon de Besse.
Visualizamos
breve y alternativamente el Plateau de
Besse del que venimos, Sesques y creemos ver la arista que arranca hacia el
oeste desde el Collado de Besse; nada del cierre del circo con Montaut, Mardas
y Montagnon de Iseye que conocemos pero que queríamos ver desde aquí. Ni
siquiera vemos los Paredones de l’Escala que deberían ser nuestra referencia ni
tampoco la Mole de Lasneres que se encuentra en el valle de la Cabaña de
Arrioutort que baja a Laruns y que debido a la longitud del tramo de carretera
descarté en su día como circular.
Laquette colmatado en el Plateau de Besse por el que pasaríamos a la vuelta.
Alrededor
de las once menos cuarto volvemos de nuevo al Col de Besse y proseguimos al
oeste por la loma en la que hay un caminillo poco transitado que nos va a ser
útil.
Se
trata de remontar progresivamente una serie de lomas ascendentes, vestidas de
verdura y con restos de ese incendio, creemos que provocado por los pastores al
objeto de mantener los prados.
Avanzando por la cresta hacia el oeste en busca de l'Escala.
Pasamos
una segunda prominencia situada sobre los 1800 metros de altitud de la que
suponemos de trata del Montgnon de Besse y proseguimos nuestro sube y baja
fácil con algunos pequeños faldeos por el norte que salvan minúsculos resaltes.
Si el asunto no cambia y no tiene pintas, no quedará más remedio deshacer la
arista.
Al Collado de Taillandere, a la derecha, llega un camino desde la Cabaña de Arrioutort.
Superada
una loma más, la arista se amplía y
perdemos el camino en el praderío pero enseguida nos salva la presencia de los
Paredones de l’Escala en la vertical de la cima con los que nos damos de
narices.
Por fin el hipericón en condiciones.
Creo
y solamente creo que al norte de los mismos se rompen en el Col de la
Taillandere que es el acceso al Lac de Montagnon al que suponemos llega el
caminillo que asciende desde Laruns.
Nos damos de narices con los Paredones de la Este de l'Escala.
Un
breve faldeo bajo las paredes con la esperanza de que no tengamos que perder
mucha altura nos deposita en las inmediaciones de una rama de camino que
remonta desde el fondo del valle y en el que hay un grupo de franceses: ¡Bingo!
Arriba estará el Col de la Taillandere.
Alcanzamos
el camino que remonta junto a las paredes un tramo de pedriza muy inestable
hasta alcanzar el centro del corredor y zetear brevemente en busca del praderío
que colma el Col de la Taillandere situado ligeramente por encima de los 2000
metros.
Ya
de llano alcanzamos un promontorio de verdura en la orilla este del lago desde
el que hay que prestar mucha atención para distinguir de entre la oscuridad la
uniforme masa de agua del mismo a pesar de encontrarnos a tan solo veinte
metros de la orilla.
Por encima de la pedrera aparece el praderío bajo el Col de la Taillandere.
Volvemos
unos metros, rodeamos un laquete próximo, tomamos la arista oeste que nace allí
y tras desalojar un pequeño rebaño de vacas que pastan muy altas, nos llegamos
siguiendo un poco transitado caminillo hasta la Cima de l’Escala situada a 2076
metros de altitud. Son las doce menos diez.
Remontando la Noroeste de l'Escala.
Nada
que ver con las nieblas y vuelta inmediata, con la decepción que nos propicia
tanta profusión de nieblas, hasta la orilla del Lac de Montagnon situado a 2004
metros de altitud. Ese lac tan famosos y conocido por su marcada forma de
corazón y que fuéramos a visitar prácticamente de propio.
Esperamos
sin fe poco más de cinco minutos e iniciamos el regreso: otro día tendrá que
ser.
Llegando a la Cima de l'Escala.
Bajamos
el corredor del Col de Taillandere y tomamos nuestro camino de vuelta por la arista,
no queremos meternos en berenjenales bajando por el Valle de la Cabaña de
Arrioutort sin visibilidad.
Allí está el Lac de Montagnon. Todo el gozo en un pozo.
Antes
de alcanzar la Cima del Montagnon de Besse coincidimos con un corredor que sube
desde el valle por el que no hemos querido bajar nosotros. Charlamos y
coincidimos en que el caminillo que se introduce en el hayedo al abandonar la
arista tiene que dejarnos en el Rellano de Besse, no lo conocemos ninguno de
los dos.
No volveremos por la arista hasta el Col de Besse sino que atajaremos hasta la cabaña.
Mientras
espera a sus compañeros nosotros lo tomamos para perderlo enseguida pero
tirando de experiencia entraremos en el hayedo que está muy limpio, pasaremos
junto al lac colmatado que hemos visto desde arriba y coincidiremos con el
camino un poco más arriba de la Cabaña de Besse. Luego cuando nos adelanten cerca del Col de
Lusque nos dirá que no han podido seguir el camino y se ha perdido.
Abajo aparece Goust.
El
resto del descenso no es más que desandar camino previa parada, a las una y
media junto a una de las ramas del Barranco de Besse para comer. Media hora
después continuamos para llegarnos al coche a las tres menos cuarto liquidando
los cerca de 1400 metros de desnivel
acumulado en una jornada en la que hemos terminado defraudados por las nieblas
pero eso es lo que nos ha tocado hoy además de llevar la ropa y los pies
húmedos todo el día, lo que no ha supuesto ninguna molestia.
Lástima que no os acompañará el tiempo, es una muy guapa, de la que guardo buen recuerdo..
ResponderEliminarhttps://davidmalabarista.blogspot.com/2014/11/montagnon-de-iseye-desde-goust-eaux.html
¡Hola David!
ResponderEliminarPerdona, ando un poco liado y casi se me pasa.
Sí. Pero el tiempo en los valles franceses suele tner muchos días como éste cuando el anticiclón funciona un poco más al sur.
E Lac de Montagnon lo conocíamos desde arriba subiendo por el Bitet. En aquella ocasión no bajamos hasta la orilla, no es necesaria para verlo bien, pero no nos permitió conocer bien los alrededorres y eso siempre fastidia a pesar de que si nos dejo hacer la actividad aunque fuera teñida de un poco de inquietud.
Otra vez será.
¡Que vaya bueno!