Las tres Cascadas de Ardonés.
Cerler, Ermita de San Pedro, Orilla
izquierda Barranco Ardonés y Vuelta por la orilla derecha.
04-06-2014.
Desnivel acumulado 250 m.Distancia recorrida 7000 m.
Tiempo efectivo 02:00 h.
Sol.
Muy fácil.
Las cascadas son espectaculares especialmente en época de fusión de nieves.
Agua en el Barranco de Ardonés o en las
cascadas. Aunque también puede llevarse.
Juan Castejón, Rosa Mª. Martínez y Mariano Javierre.
Mapa del Barranco Ardonés procedente de Iberpix. Vía en amarillo.
Habíamos
oído hablar de las Cascadas de Ardonés pero no las conocíamos. Vamos a Benasque
muy tarde pero antes de que la nieve desaparezca totalmente y en plena época de
deshielo pues es 4 de Junio de 2014, tenemos un ratillo para darnos un paseo y
conocerlas.
Hay
una forma muy rápida de visitarlas a partir de una pista que nace de la
Carretera al Ampriu y que se llega a las inmediaciones de la cascada. Nosotros
disponemos de más tiempo y lo haremos desde Cerler.
Son
las cinco de la tarde cuando aparcamos la furgo junto a un cartel indicador
clavado en el tronco de un sauce Se trata del camino que conduce a la Ermita de
San Pedro.
Terminada
la calle, estaremos a 1540 metros de altitud, un viejo camino, a tramos
empedrado se orienta al oeste transitando entre prados cercados con piedra del
país y sombreado por la clásica vegetación de caducifolias limítrofes entre
prados.
Enseguida
llegamos a la Ermita de San Pedro, característica porque el camino atraviesa
por el pórtico de la ermita.
Más
adelante nos enseña el Barranco de Ardonés y la tremenda herida erosiva que ha
causado en la Morrena del Pico Cerler y las obras de estabilización en el cauce
del mismo.
El
camino se aproxima al cauce del barranco para enseguida pasar a la orilla
izquierda del mismo por un puente de obra. De ninguna manera se puede atravesar
en estos periodos de deshielo.
Polígala calcárea.
Balizado
profusamente se alarga paralelo y por las inmediaciones del barranco hasta que
se estrecha y coincide con la pista que llega de la carretera al Ampriu en las
inmediaciones de un muro de contención de hormigón armado para regulación de
avenidas.
Cascada Mascarada.
Cascadas Clotet y Ardonés.
Enseguida,
y en la orilla derecha del barranco, contemplamos la Cascada del Barranco
Mascarada subsidiario del de Ardonés pero proseguimos barranco arriba en busca
de las otras dos que aparecerán enseguida: la situada en medio de las otras dos
es la Cascada del Barranco de Clotet, la más larga y espectacular, también
subsidiaria del Ardonés y finalmente la tercera en orden de aparición que es la
Cascada del Barranco de Ardonés por la que se vierten las aguas de los
Barrancos de Ardonés y Obago.
El
camino se introduce hasta las inmediaciones de esta última que arroja un caudal
de auténtica impresión y que llena el barranco de agua pulverizada.
Cascada de Ardonés.
Hay
un puente que permite pasar a la orilla derecha del barranco y que utilizamos a
la carrera; suerte que la tarde está espléndidamente soleada y cálida en este
recogido lugar y no damos tiempo para el remojo.
Desde
el otro lado y a resguardo de la ducha hacemos fotos y contemplamos la
indudable belleza del rincón.
La
vuelta la vamos a hacer por la orilla derecha del barranco y así de paso nos
aproximaremos a las otras dos cascadas que hemos de cruzar de alguna manera.
Cascada del Clotet,
Llegados
a la cascada del Clotet, la contemplamos desde diversas perspectivas y la
cruzamos de piedra en piedra porque no
hay puente: es una auténtica belleza.
Cascada Mascarada.
Camino
adelante alcanzamos el Cauce de la Cascada Mascarada, con menos caudal y cruce
más sencillo que también contemplamos y fotografiamos desde diversas alturas.
Pico Cerler.
El
camino abandona en dirección oeste la zona de las cascadas volviendo hacia
Cerler entre crecidos prados yendo más alto que el camino de ida.
Se
introduce en el pueblo cuando ya se ha convertido en pista, que por cierto nos
pega unas cuantas vueltas y alcanza el pueblo por una fallida urbanización
depositándonos en la furgo cuando son las siete y media de la tarde. Con una
hora corta de ida y otra ídem de vuelta hemos tenido suficiente. Ha sido un agradable
paseo con un desnivel de alrededor de alrededor de 250 metros.
Montamos en la furgo y carretera
arriba nos subimos hasta la Besurta.
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