Hace ya muchos años que conocí el Ibón de Plan o Basa de la
Mora. Me pareció uno de esos lugares de una belleza natural irrepetible. Luego
conocería otros aspectos que refuerzan los valores de variadas índoles de ese
entrañable rincón del Pirineo.
En el Ibón de Plan o Basa de la Mora. 20-6-87.
Accedí en coche por
la pista que arranca de Plan y que lleva al Refugio de Lavasar. Me pareció que poder aproximarse por pista resultaba útil pues facilitaba el acceso a personas con
pocas capacidades físicas y el ibón quedaba debidamente preservado, al estar a cierta distancia del lugar al que
se accedía con los coches.
He estado en repetidas ocasiones con motivo de mis
actividades montañeras por la zona y conservo mi opinión pues el entorno del
refugio y en mayor medida el del ibón lo he encontrado siempre limpio.
Ibón de Basa de la Mora y Peña de La Una. 5-7-09.
Ahora, parece ser que quieren convertir el refugio en un
bar-restaurante lo que, de manera inevitable, facilitaría la masificación, con la
consiguiente degradación y contaminación de dicho entorno.
No estoy en contra de que cualquiera pueda disfrutar del lugar como yo lo he hecho, lo haga de manera
asequible pero siempre y cuando se haga de forma responsable y regulada si es
posible, de tal suerte que, quien vaya, siga guardando el recuerdo de un auténtico
tesoro.
Llegando al refugio de Lavasar con Llosal al fondo. 18-7-06.
Entre facilitar la vida en los valles y destrozar el entorno
hay algunas diferencias que las autoridades competentes del Gobierno de Aragón
deberían conocer puesto que son ellas las que tienen la ineludible obligación
de tomar medidas de preservación de entornos extraordinarios para que las generaciones del
futuro no se avergüencen, más si cabe, de nosotros.
Reflejos en el Ibón de Plan. 28-5-12.
¡Que el Gobierno de Aragón no cometa una torpeza más mirando
a otra parte!
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