La Antecima Noroeste del Pico de Astún.
Aparcamiento de Astún, Orilla
izquierda del Barranco Escalar, Ibón de las Ranas o Escalar, Collado de los
Monjes y Cara Nor-noroeste. Descenso al Ibón de las Ranas, Ibón de las Truchas
y Barranco de Astún.
17-04-2011.
Salida 10 h. Llegada 13 h.
Sol.
Muy fácil.
Esquís de montaña.
Mapa de Astún procedente de Prames. Vía en amarillo.
En
Marzo, y en una mañana con alto riesgo de aludes nos íbamos al Pico de los
Monjes. Había sido nuestro primer pico con esquís y queríamos volver.
Subíamos
por el Barranco Escalar con mucha nieve y la ladera sur del pico está tan
cargada que desistimos de nuestro objetivo y nos vamos a conocer la Antecima Oeste del Pico de
Astún.
Hoy
17 de Abril de 2011 volvemos a la carga pues mi chica quiere.
Son
las diez de la mañana cuando tras aparcar detrás de los edificios de la Estación de Esquí de
Astún a 1710 metros
de altitud, non vamos con los esquís en la mochila por la orilla izquierda del
Barranco de Escalar para arriba en dirección Norte.
A
falta de nieve progresamos entre narcisos amarillos deliciosamente floridos
sabedores de que nos espera alrededor de una hora de pateo pues el barranco
está prácticamente veraniego aunque el cielo
se cubra intermitentemente de nieblas volanderas.
Siempre
por la orilla izquierda del barranco ascendemos persistentemente y algo
cansados de la pateada de ayer y finalmente, en la orilla sur del ibón de las
ranas o Escalar nos ponemos los esquís. Estamos a 2090 metros de altitud
y son las once de la mañana.
La
ladera sur del Pico de los Monjes está prácticamente limpia de nieve. Se podría
subir atravesando un par de faltas de nieve importantes pero el descenso sería
medio imposible. Consecuentemente decimos adiós al pico y ante la opción de
darnos la vuelta nos vamos a subir hasta el Puerto de los Monjes o de Jaca pues
para volver tenemos tiempo.
El
Ibón de las Ranas ya tiene ojos y lo rodeamos por el oeste para tras atravesar
dos tramos de hierba tomar, en dirección este, el barranco que conduce al
Collado de los Monjes.
El
barranco guarda mucha nieve aunque algo irregular pero será suficiente para el
descenso por lo que nos vamos tranquilamente para arriba hasta las
inmediaciones del collado. Allí frente a la opción de hacer una parte de la Arista Este de los Monjes y
luego patear el resto hasta la cima optamos por la nieve: la pala somital de la Antecima Noroeste del
Pico de Astún, al estar orientada al nor-noroeste, se encuentra impecablemente
nevada.
Plácidamente
y al sol de una deliciosa media mañana nos vamos para arriba aprovechando la
nieve que cubre la ladera hasta la misma cima.
Son
las once y media de la mañana cuando alcanzamos la Antecima Noroeste
del Pico de Astún a 2278
metros de altitud.
Paradis y Midi con gorro.
Casterau y un manto infinito de nieve.
Sentados
tranquilamente en una piedra plana de la cima almorzamos un poco mientras
contemplamos el horizonte nordeste limitado entre el rocoso Pico de los Monjes,
el Pico Casterau y el Paradis en medio de un impresionante lienzo blanco. Atrás
las nieblas semiocultan al Midí d’Ossau. La cabecera del valle de Bious es
tentadora pero cara de aproximación.
Arista de Astún.
Ibonciecho de Astún.
Con los Monjes al frente.
Veinte
minutos más tarde nos vamos a disfrutar la pala de descenso con unos giros
infinitos y deliciosos que prolongamos por el barranco a partir del Collado de
los Monjes.
Ojos en el Ibón de Escalar.
Casi
al final del barranco localizamos el límite inferior de la nieve en la loma
izquierda e iniciamos el faldeo de la Cara
Sur de pico del que bajamos al encuentro de la pista que nos
ha de llevar hasta el ibón de las Truchas.
Contemplamos
la cara este del Pico Benou con mucha nieve coincidiendo en que era una opción
aceptable, hacemos una fotografía al Ibón de las Ranas que dejamos al sur y
tras quitarnos los esquís remontamos unos metros hasta alcanzar la nieve
acumulada en el interior de la pista, el borde externo está limpio y lo ha utilizado
un monteñero que ha subido detrás de nosotros hasta el Collado de los Monjes
para volverse hacia el Ibon de las Ranas. No veremos a nadie más.
El Ibonciecho de Astún desde la pista entre los ibones.
El
recorrido sobre el lecho de la pista es largo, poco cómodo e incluso en algún
punto complicadillo, a mi chica le
“encanta”. La nieve muy primavera en esta zona soleada nos permite sin
excesivas complicaciones alcanzar en
dirección sudeste la Silla
de Truchas en las inmediaciones del Ibón de las Truchas a 2130 metros de altitud.
Ibón de Truchas y Mala Cara.
Va
a ser la una del mediodía cuando bloqueamos los esquís y nos vamos para abajo
por la única pista de descenso que está abierta y a la que han tenido que
llevar nieve para cubrir un pasillo en el muro intermedio. Esta zona de la
estación está prácticamente desierta y el resto poco menos: la temporada de
esquí está finiquitada.
A
la una y cuarto llegamos a la base de la estación, quitamos los esquís y nos
llegamos al coche. Han sido 600 incómodos metros de desnivel pero a veces
suceden estas cosas.
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