Camping del Valle de Bujaruelo, Barranco y
Gralleras del Turbón, Collado de Otal y Corredores de la Arista Este.
15-10-2021.
Salida 09 h. llegada 14:45 h.
Mixto.
Bastante fácil.
Rosa Mª. Martínez y Mariano Javierre.
Otal
es un pico que califico como “bastante fácil”, o sea, de esos que no los
regalan. Así lo había calificado en las tres ocasiones en las que habíamos
ascendido: la primera por el norte y con nieve y las otras por el sur. Me
servirá para comprobar que desde el 90 no ha variado gran cosa mi apreciación
de su dificultad.
Por
estas razones me extrañó un poco que me lo propusiera mi chica, pero accedí sin
ninguna duda para añadir un nuevo ascenso por el Barranco del Turbón. A Juan no
le digo nada pues tiene que dar descanso a su rodilla, aunque no estoy
demasiado seguro de que lo haga.
Son
las nueve de la mañana del 15 de Octubre de 2021 cuando pasados poco más de 100
metros de la Entrada al Cámping Bujaruelo hay un pequeño ensanche herboso al
este de la pista y aparcamos sobre los 1260 metros de altitud. Justo al otro
lado, oeste, hay un rellano de praderío por el que pasa la línea de alta tensión
y una losa medio oculta por las zarzas donde se indica el Valle del Turbón
entre otras cosas y que sería conveniente mantener más despejada.
Al
otro lado del praderío, han hecho limpia bajo el tendido y han derribado el
hito de piedras, se inicia entre bojes un camino que va a ascender sin pausa e
invariablemente al oeste.
No
se trata de un ascenso con detalles muy
significativos pues la subida por el bosque fundamentalmente de hayas y bojes es
directa hasta que el camino cruza a la orilla derecha del barranco cuando el
bosque clarea sobre los 1600 metros de altitud.
Unas
revueltas sobre praderío claro en la falda del Tozal del Cebollar nos llevan a
cruzarlo de nuevo cuando el agua baja filtrada y a proseguir para arriba sobre
un praderío que es sustituido por pedrizas calizas desprendidas de Lapiaz del
Turbón que nos aguarda.
Algunas
balizas rojas nos llevan a la Zona de las Gralleras: un par de simas conectadas
y con acceso algo equipado y otra más profunda y amplia en las base de las Paredes
del Tozal del Cebollar y muy distantes de las Gralleras de Fenez que quedan lejos
al sudoeste.
A
partir de aquí seguimos un débil caminillo con hitos que atravesará algunas de
las canales que presenta el Lapiaz del Turbón y desde donde avistaremos el ocre
Casquete Somital de Otal contrastando con las calizas claras del lapiaz,
todavía muy distante.
A
nuestra derecha o norte se eleva una canal herbosa en la que pasta un rebaño de
ovejas y que nace del Pico Royo que es la Cabecera de la Sierra del Turbón que
nos separa del valle de Otal y a cuyo
collado nos dirigimos. Es de los pocos puntos que recordamos pues se trata de
un valle de considerable amplitud en el que creíamos recordar la presencia
directa de las canales somitales del pico.
Hemos
echado una hora hasta las Gralleras y otra hasta el Collado de Otal situado a 2360
metros de altitud. Lo que viene nos sorprende pero…
Hay
un caminillo recortado sobre praderío que transita la arista este y que muere
en un resalte de calizas claras. La lógica nos lleva a faldear la cabecera del
resalte ligeramente por el sur y a encontrar una línea de hitos que nos llevan
a una amplia rampa suavemente ascendente en la cabecera del lapiaz y que nos
enseña las Canales Somitales de calizas ocres de la Sudeste de Otal, que era la
imagen que estábamos esperando.
Atravesado
el rellano por las inmediaciones de la arista, un caminillo zetea sobre la
gravera en busca de las paredes, alcanzando las mismas en el tercer corredor;
es corto pero hasta allí llega el caminillo.
Hay
que remontar alrededor de 40 metros por un corredor fácil, tumbado y lleno de
basura, también su puede subir mejor por su crestón oeste en el que muere el
corredor.
Allí
pasamos al corredor situado inmediatamente al oeste y que asciende directamente
desde las pedrizas. Algún hito nos confirma la vía, sobre un terreno no difícil
pero muy descompuesto y erguido por lo que dejamos los bastones.
Ascenderemos
por encima de otros 100 metros más cuando algunos hitos se encaraman en la
arista que sube a nuestra derecha. Nosotros proseguimos hasta terminar el
corredor en una brecha con un hito, para desde allí faldear ligeramente al
oeste y remontar los últimos metros herbosos que nos depositan en la Cima de
Peña Otal situada a 2705 metros de altitud. Casi se nos ha ido otra hora desde
el collado.
Desde
la cima en la que nos sentamos a echar un bocado pues hace una mañana
estupenda, contemplamos un paisaje espléndido aunque muy poco luminoso ya que
los altoestratos cubren demasiado cielo. Al oeste la afilada Tendeñera junto a
Ripera y girando al norte en sentido de las agujas del reloj: Mallaruego,
Ferreras Aratille, Vignemale, Bernatuara, Gabiet, Puerto de Bujaruelo, Escusana,
Gabietos, Mondarruego, Tozal del Mallo, Acuta, Fenez, Guara, Oturia, Oroel,
Comas, Modiniero, Toronzué…
Media
hora después, serán las doce y media, nos volvemos para abajo con tranquilidad
y cuidado descendiendo un poco más por la arista inicialmente para descender un
buen tramo de corredor y terminar el corredor inferior por el dorso escalonado
mucho más seguro que el fondo del mismo.
Llegados
al Collado de Otal, nos da pereza descender hacia el norte por el Valle de Otal
ya que hay un buen tramo de pista para cerrar la circular, además de que hace
no demasiados días, bajamos desde Tendeñera por la zona.
Consecuentemente,
desandaremos camino a través del lapiaz para sentarnos en las Gralleras y comer
tranquilamente con el sol en la espalda. Es la una y media.
Media
hora después continuamos el descenso por camino cada vez más firme cruzamos el
barranco otras dos veces y nos introducimos en el bosque para llegarnos al
coche cuando son las tres menos cuarto.
Hoy han sido 1450 metros de desnivel de una tacada y en un visto y no visto. Hemos
subido a 500 metros por hora.
¡Cómo nos gustan los caminos empinados!
Hola Mariano.
ResponderEliminarPues si que es una ascensión costosa, es una subida que no da tregua y en cuanto se sale del bosque, cuesta avanzar. Yo la bajada la hice por la Cueva Helada de Fenés, en esta ocasión veo que fuisteis bastante "rápidos", ahora es buena época para disfrutar del monte.
Salud y montaña.
¡Hola Eduardo!
ResponderEliminarEl Valle del Turbón solamente es angosto en su parte baja pero luego entre la cresta del Cebollar y la del Turbón aparecen unas dimensiones considerables.
Nosotros íbamos con la idea de hacer algo no demasiado largo y subimos directos. Luego a la bajada nos dió pereza y ni bajamos por el Valle de Otal ni nos alargamos hacia las Placas y Cueva de Fenez pues se queda un poco a desmano y ya conocíamos la zona.
Yo no recuerdo ninguna época mala para disfrutar del monte a poco que acompañe la meteorología, será que tenemos el mal de montaña.
¡Que vaya bueno!