La nieve sigue muy dura a la sombra en el Barranco Nere. Delante Marioules.
Boca Norte del Túnel de Bielsa, Barranco
Nere, Cara Norte y Arista Oeste.
10-03-2017.
Salida 09:45 h. Llegada 14:30 h.
Sol.
Bastante fácil.
Juan Castejón, Rosa Mª. Martínez y
Mariano Javierre.
Mapa de Bataillence procedente de Iberpix. Vía en amarillo.
Hará
dos años Para primeros de Mayo que quisimos hacer el Bataillence. Ascendimos el
Resalte Inicial sin nieve, porteando los esquís y poco más arriba, cuando
teníamos cierta perspectiva sobre el Nere nos dábamos la vuelta pues faltaba
mucha nieve. Hoy 10 de Marzo de 2017 volvemos sobre el tema. En el pico ya
habíamos estado y guardábamos un grato recuerdo que pretendíamos reeditar.
Hemos
dormido en Bielsa, no hemos madrugado pues no hay prisa y alrededor de las
nueve y media aparcamos en la Boca Norte del Túnel de Bielsa a 1820 metros de
altitud. Charlamos con una pareja de la Guardia Civil del Equipo de Rescate de
Boltaña que van también a Bataillence para entrenar.
Resalte Inicial en el Barranco del Nere.
Son
las diez menos cuarto cuando ponemos las cuchillas y nos echamos pars arriba
por la huella que hay establecida en la Orilla Izquierda del Barranco Nere.
La
nieve en una zona muy sombría tiene un rehielo impresionante y la huella pisada
por los esquís está dura como un pie de cristo romano, de tal forma que las
cuchillas no le hacen ni cosquillas.
Bajo el Segundo Resalte del Nere
Superado
el tramo erguido del Primer Resalte en el que uno de los guardias ha pegado un
patinazo de cuidado pues iban sin cuchillas, contemplamos las Cascadas del Nere
por las que ya baja agua a la vez que la huella se hace más difusa puesto que
la ladera se ha arrellanado un tanto permitiendo alternativas.
Enseguida
aparece el Marioules bañado por la luz del sol que va bajando valle abajo y a
la vez aparece el Segundo Resalte algo más que medianamente erguido y al que
acaba de llegar el sol.
Salimos al sol aunque la nieve sigue dura.
Seguiremos
la huella que sigue muy dura y describe un par o tres de zetas con alguna
vuelta maría en la que hay que emplear las cuchillas en condiciones, pero nos
permite superar el resalte y alanzar un rellano en el que comienza a ahondarse
el barranco.
Saliendo del Segundo Resalte.
La
nieve sigue dura y nos ofrece un par de opciones, la más directa toma un
corredor bastante inclinado que se orienta hacia el Puerto de Bielsa y la otra,
que es la que tomamos, describe un amplio arco prácticamente en horizontal
orientándose hacia las paredes de Peña Abeillere.
Las cuchillas son imprescindibles a pesar del sol.
El
Tercer Resalte de esta manera se hace muy amable pues describe una larga
diagonal al nordeste para retornar al sur mostrándonos la Vertiente Norte del
Puerto de Bielsa al que parecen dirigirse los dos guardias que bajan ya de
Bataillence y con una travesía muy alta ponen pieles de foca y se van hacia el
puerto.
Cruzaremos el Nere orientándonos hacia Garlitz.
Superado
fácilmente el Tercer Resalte alanzamos un amplio rellano algo ondulado situado
sobre los 2350 metros de altitud que rodearemos
por el sudoeste pues el Crestón Noroeste de Bataillence todavía nos
espera limitando el rellano.
Frente al Puerto de Bielsa.
Las
huellas conducen a un punto del crestón por el que aparecen cuatro esquiadores
que vienen del Collado de Hechempy y
desde allí contemplamos la Pala Cimera de Bataillance comenzando por su arista
norte.
Nieve costra en busca del Crestón Noroccidental de Bataillence.
Hay
que girar un poco más al sur con la huella para afrontar la pala perfectamente orientada al norte que
se empina paulatinamente hasta ponerse bastante de pie en la parte terminal.
Rodeando el Crestón Noroccidental de Bataillence aparece la pala cimera.
La
nieve que es una mezcla de polvo y venteada aguanta muy bien y hay una huella
bastante alta que corta la pared de este a oeste y a por ella nos vamos con la
intención de no meternos en un rosario de vueltas marías. Ganamos la huella muy
al este de la pared e iniciamos la diagonal al oeste.
Cada cual a su manera en la Cimera de Bataillence.
Debajo
de la nieve polvo aparece una costra que no se rompe con buen toque para las
cuchillas y decido abandonar la huella y marcar otra un poco más erguida que
remataré en la parte alta del lado opuesto de la pared. El tránsito es seguro y
en ningún momento quieren resbalar los esquís a pesar de la pendiente. Una
vuelta maría y una corta zeta nos sacan de la pared y nos depositan en la
arista cimera por encima de los 2550 metros de altitud, son las doce de la
mañana.
Esperando la salida de mi chica en la Arista Oeste de Bataillence.
Queda
un corto tramo de arista amplia y fácil pero creo recordar que tiene pequeños
subes y bajas por lo que o lo haces con las pieles o tienes que escaletear; así
que descalzamos los esquís, nos reunimos pues Rosa sube detrás y nos vamos de
paseo al este en busca de la amplia y plana Cima de Bataillence situada a 2604 metros
de altitud. Son las doce y cuarto de la mañana.
En la Cima de bataillence con Garlitz.
En
la cima hacemos fotos, contemplamos la arista que se ahonda y alarga al sudeste
hacia Salcorz y Trigoniero de gratos recuerdos, las Sierras de Espierba y las
Sucas que culminan en Ordesa semiocultas por la Cresta de Liena que enlaza con
Robiñera, la Munia y todos los Murallones de Barourde incluidos Gerbats, Gela,
Soum des Salettes, Lenquo de Capo, Cambieil y la Arista de les Cintes Blanques
con el Mechant pendiente. Aquí mismo al norte Abeillere y Garlitz en primer
plano con la Arista de Lustou a Culfredas y Suelza: un delicioso placer para
nuestros ojos. Por el contrario y de nuevo nos quedamos sin ver el Lac de
Hechempy sepultado por la nieve.
Robiñera y la Munia desde Bataillence.
Desandamos
la cresta y en un abrigo de la fresca brisa que reina en la arista nos sentamos
a comer sin prisas. Hay que dejar que el sol haga su faena.
Gerbats, Gela, Soum des Salettes y Lenquo de Capo.
Llega
una pareja y como la arista carece de interés para los esquiadores quitan
pieles en el collado donde hemos dejado los nuestros y se van para abajo. Nosotros
lo haremos alrededor de la una y media para comprobar que casi nada de lo
supuesto se va a cumplir.
Nieve polvo mezclada con costra en la Pala Cimera de Bataillence.
Allá se queda la Pala Cimera de Bataillence.
La
pala cimera la iniciamos con buena nieve en los giros superiores para entrar en
la nieve polvo de la zona abrigada que se esquía bien hasta el crestón
noroeste. De allí para abajo tras la travesía hacia el tercer resalte aparece
la nieve costra cuando suponíamos que sería un tramo divino por tener
pendientes muy suaves. No será así y en una clavada sufro un poco de distensión
en una rodilla que espero no sea gran cosa aunque me roñará para el descenso.
Marioules tras la nieve final que ha mejorado impensablemente.
Negociamos
sin disfrutar el Tercer Resalte, el Segundo lo hacemos más por el fondo del
barranco con una nieve que quiere a ser primavera y cuando alcanzamos las
rampas un poco más arriba de las Cascadas del Nere, la nieve se ha reblandecido
en contra de lo supuesto y nos permite un descenso muy cómodo que haremos
alternando las dos laderas del barranco y terminando por la orilla derecha del
mismo en una pala soleada y con nieve primavera con mayúsculas.
En la Cabecera del Resalte Inicial.
Terminamos bajando la Derecha Orográfica del Nere.
Son
las dos y media de la tarde cuando remontamos unos metros desde el fondo del
barranco con los esquís al hombro y nos llegamos al coche. La jornada ha
resultado entretenida y en modo alguno lo que imaginábamos a priori. Lo único
que sí se ha cumplido han sido los 800 metros de desnivel cantados y una
conclusión: la gente no madruga para ir a Bataillence.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¡Gracias por tu comentario! Responderé tan pronto como lo localice.