Ferrera desde el Collado Oeste del Tozal de Mayo.
Foradada del Toscar, Barranco Oeste de la
Tosquera, Manantial, Collado Oeste de Ferrera, Cara Sur, Ferrera, Peña Redonda
y vuelta al Collado del Tozal de Mayo para bajar lor el crestón divisorio de
los dos barrancos.
21-07-2020.
Salida 07:30. Llegada 13:45 h.
Sol.
Bastante fácil.
Juan Castejón, Rosa Mª. Martínez y Mariano
Javierre.
Mapa de Ferrera procedente de Iberpix. Vía en amarillo.
La
Sierra de Ferrera es un cordal montañoso que arranca con la Peña Montañesa en
el Cinca y se extiende al este hasta el Esera.
A
Montañesa y la Tuca hemos subido varias veces tanto por el norte como por el
sur pero allí termina nuestro conocimiento de la sierra con la excepción de una
breve incursión a Peña Forquiella desde el Collado Cullivert. Es un terreno
difícil y con no demasiados caminos.
Por ese valle, el Toscar, tenemos que subir.
Hace
ya unos años hicimos la Ferrata de Foradada del Toscar y mira por donde se me
ocurre a mí que podríamos ir a Ferrera, una modesta cima de la sierra del mismo
nombre.
Hoy
21 de Julio de 2020, la nubosidad de evolución prevista nos empuja para allí y
sabiendo de su orientación sur, por la que tendremos que movernos, madrugamos,
de tal forma que tras una hora de coche, estamos aparcando en el Barrio Alto de
Foradada del Toscar a 1000 metros de altitud cuando son las siete y media de
una mañana que se presume caliginosa.
Ascendemos por donde más limpio lo vemos.
Sabemos
de la existencia de un indeciso camino que sube por uno de los dos barrancos
próximo al pueblo en la Ladera del Toscar. Llegando al pueblo vemos el valle
por el que descienden los barrancos y por una pista de servicio para los prados
nos vamos atravesando uno de ellos.
La
pista tras pasar junto a una balsa de agua llega al depósito de agua y desde
las inmediaciones del mismo tiene que partir el camino.
Localizamos el camino en el fondo del barranco.
Lo
tomamos siguiendo unos poco notorios hitos de piedras pero antes de coger el camino
ya han desaparecido los hitos. El camino como luego sabremos se marcha
inmediatamente hacia el barranco, de los dos que bajan paralelos, situado más
al oeste para proseguir ascenso por su orilla derecha y nosotros seguimos un
más deseado que real camino sin hitos que transita también la ladera derecha de
ese mismo barranco pero a nivel superior.
Finalmente llegamos al camino en el Manantial de la Tosquera.
Pensamos
que se tratará de un camino con escaso tránsito pero realmente no es camino
como comprobaremos poco más arriba cuando desaparece y nos deja en medio de una
ladera de coscoja, enebro, aliaga, rosal silvestre, boj, pino, roble y
griñolera con afloraciones de calizas claras y pedrizas caídas de la arista que
llevaremos continuamente a nuestra izquierda.
Alcanzar el Collado Oeste del Tozal de Mayo es fácil ya.
La
hora y media siguiente será un inmundo jabalineo entre remontar barranquillos hacia las
paredes y hacer travesías para salir de ellas en busca del camino que debe
transitar por el fondo del barranco.
Perdemos de nuevo los hitos y volvemos a Jabalinear para alcanzar el Zócalo Inferior de Ferrera.
Muy
arriba y cerca de los 1400 metros de altitud, una aguja desprendida de la
arista nos invita a faldearla por el este y en ese tajo visualizamos el camino
que sube por el fondo del barranco. Son las nueve y media cuando tomamos los
hitos del mismo en el manantial del barranco.
Remontando el Corredor del Zócalo Inferior de Ferrera.
A
partir de allí y satisfechos de haber liquidado el entuerto seguimos hitos
sobre un inexistente camino que poco
después nos deposita en el Collado Oeste del Tozal de Mayo, a 1529 metros de
altitud, el tozal es una pequeña elevación en el cordal al que no iremos a
pesar de estar allí mismo ya que vestido por el bosque no tiene ninguna
visibilidad.
El tránsito hacia el Zócalo Superior de Ferrera es más fácil.
Hemos
subido al norte girando un poco al noroeste y continuamos al noroeste por un
terreno que poco o nada se diferencia del que hemos hecho por nuestra cuenta.
Si seguimos la arista que está vestida de paredes al nordeste llegaremos a las
paredes más potentes del Resalte Inferior de Ferrera, un zócalo que corta la
ladera y que pierde potencia en la parte sur y hacia allí hemos de evolucionar.
Un
corto tramo de pinar sin camino y un tramo subsiguiente en el que aparecen tres
o cuatro hitos nos invitan a hacer la travesía del importante tramo de pinar
para alejarnos de las paredes más potentes. A la fiesta se ha sumado la genista
y tenemos un completo.
La pequeña brecha en el Zócalo Superior de Ferrera.
La
travesía es pestosilla y a juego con la mañana y eso que nos creíamos que se
habían terminado las hostilidades. Nos salva un poco algunos cordones de
pedriza menuda que no han sucumbido a la invasión de la vegetación y nos dejan
bajo un corredorcillo de una decena de metros que se trepa bien a pesar de las
genistas que lo cubren ya casi todo.
Llegando al Rellano Cimero de Ferrera.
Por
encima del corredor se extiende una rampa suave y bastante vestida pero de
vegetación baja, que se alarga hasta el Resalte Superior de Ferrera, otro
zócalo calizo que desaparece de nuevo al oeste pero ahora el tránsito ya es más
cómodo.
Foto en el vértice geodésico de Ferrera.
Superamos
el resalte por la última brecha de la parte oeste y a partir de allí una rampa
suave en la que aparece algo de hierba
nos lleva a los pinos que copan la Cima de Ferrera situada a 1827 metros
de altitud.
Peña Redonda desde Ferrera.
Son
las once de la mañana cuando nos hacemos una foto con el vértice geodésico que
debe tener pocas visitas y nos sentamos a la sombra de un pino para echar un
bocado. La cima amplia y plana carece de vistas ocultadas por los pinos. Es un
antiguo pasto en el que hemos sorprendido a un par de rebecos.
Cerbín, Baciero y Turbón desde Peña Redonda.
Todavía
nos alargaremos al oeste aprovechando que el terreno está bastante limpio para
acercarnos a Peña Redonda una
prominencia libre de arbolado y desde la que podremos contemplar paisaje a 1842
metros de altitud.
Sedum o uña de gato florido en Ferrera.
Una
línea de paredes verticales orientadas al nordeste se ahondan en el Valle del
Angoné con sus Caseríos de Senz y Víu. Al oeste y profundo el Collado Cullivert
que da paso a paso al Macizo de Cotiella con sus cumbres del sur tan pedregosas
como caliginosas. Al este aparece la Sierra de Cerbin, detrás la de Baciero y
girando ya al sur el Turbón: se adivinan más que ven pues hay una espesa neblina
que lo difumina todo.
El Zócalo Superior de Ferrera desde la rampa intermedia.
Alrededor
de las doce menos cuarto iniciamos la vuelta sin otra pretensión que no sea
seguir hitos que nos permitan un descenso la más incruento posible.
Llegando al Collado del Tozal de Mayo.
No
encontramos nada y consecuentemente descenderemos por el mismo camino de subida
hasta el Collado Oeste del Tozal de Mayo, colocando algunos hitos que confirmes
los escasos y ya existentes. De allí para abajo seguimos el camino que hemos
hecho de subida hasta el manantial: hay muchos hitos aunque camino ni trazado
ni transitado.
Iniciando el descenso del barranco.
Continuamos
para abajo con los hitos que nos llevan por el crestón divisorio de los dos Barrancos
de la Tosquera y en un momento, pasada una aguja nacida del crestón, los hitos
deben de introducirse en el barranco situado más al oeste mientras que nosotros
continuamos por el crestón en el que hay camino de animales sobre un viejo
camino completamente en desuso.
El barranco por el que debíamos de bajar desde el crestón por el que bajamos.
Pasamos
una zona donde el crestón se afila y visualizamos el camino que se ha bajado al
fondo del barranco situado al oeste y
por su orilla derecha serpentea hacia el pueblo, pero ya no lo buscaremos, sino
que bajaremos por el crestón a la zona de margas próxima a Foradada.
Pasaremos
una zona de derrumbes donde el camino está cortado y descenderemos por
barranquillos de margas muy descompuestos que nos dejan en el lecho del
barranco muy próximo al camino de subida que hemos perdido nada más comenzar a
caminar por la mañana.
El barranco desde nuestra entrada al mismo.
Son
las dos menos cuarto cuando remontamos por la carretera hasta el Barrio Alto de
Foradada del Toscar donde nos aguarda el coche junto a la fuente en la que nos
pegamos un buen remojón para mitigar el tremendo calor que hace a estas horas
por aquí y ahogar los alrededor de 900 metros de desnivel que hemos acumulado
en una mañana tórrida como pocas.
Vista arriba finalizando el barranco en Foradada del Toscar.
En
los mapas de Prames que se publicaron sobre el 2000 publicitados por Heraldo de
Aragón, la ruta número 1 era la de Ferrera. ¡Como todas hayan tenido el mismo
éxito que está! Bueno, ahora ya sabemos algo más del Toscar pero igual no nos
sirve para gran cosa.
Otras actividades en la zona:
Forquiella, peña, 29-8-11,
Cerbín o Tozal de la Rasa, pico, 7-7-20,
Tozal de Baciero, 25-4-10,
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