Aparcamiento de Estos, Cabaña de Santa
Ana, Ibonet de Batisielles, Ibones de Escarpinosa y Tartera de Perramó, Collado
Oeste y Aguja de Perramó Occidental, Collado de la Piana, Arista Norte,
Escorbets, Collado de la Piana y Tartera de Perramó.
15-08-2024.
Salida o8 h. Llegada 14:30 h.
Sol.
Bastante fácil.
Juan Castejón, Rosa Mª. Martínez y Mariano Javierre.
Siempre
que íbamos a la Zona de Batisielles y han sido bastantes, nos llamaban la
atención la mayoría de las cimas de los alrededores, casi siempre agujas
graníticas que a primera vista te decías que eso no se podría subir y entre
ellas especialmente las Agujas de Perramó, dueñas y señoras de un amplísimo
circo de granito y praderío que te acongojaban cuando las veías desde el este.
Hemos
ascendido a bastantes de las cimas de ese enorme ámbito pero las Agujas seguían
en la interminable lista de deseos que pretendemos ir liquidando.
Hoy
15 de Agosto de 2024 nos vamos a dar un garbeo por la zona y para ello, con
algunas dudas meteorológicas aderezadas con una confianza sin límite en que
todo irá bien, nos vamos a Benasque. Son las ocho de la mañana cuando llegamos
al Aparcamiento de Estós situado a 1330 metros de altitud y nos ponemos
inmediatamente en camino al norte y por la pista que poco después cruza el río
y por su orilla derecha se llega a la Cabaña de santa Ana, siempre con gente.
La
pista gira suavemente al oeste y alcanza la bifurcación a 1570 metros de
altitud. Dejamos la pista y nos incorporamos al Camino de Batisielles que es el
GR11. Muy sombreado en un bosque mixto de ribera se aproxima al Barranco de Batisielles
para ganar altura paulatinamente y alcanzar el casi colmatado Ibonet de
Batisielles situado a 1860 metros de altitud. Son las nueve y media pasadas.
Hasta
allí llega el GR. que baja de los Ibones Altos de Batisielles, dejamos a
nuestra derecha la cabaña y el GR. y proseguimos girando un poco al sur y por camino transitadísimo nos alargamos
poco más de media hora para alcanzar el Ibón Inferior de Escarpinosa, el
superior está detrás y también muy colmatado.
Estamos a 2040
metros de altitud, rodeamos el ibón por el oeste y seguidamente, ya al sur, nos
enfrentamos a una ladera que baja de la Aguja de Chiusé hasta que en su inicio
encontramos una línea de hitos que señala el camino que tomamos el día en que
subimos a la Aguja de Ixeia. Nos tiene que llevar a la Tartera de Perramó.
Zetea primero por
terreno mixto y luego se acerca un poco a las paredes por las que salta la
Cascada de Perramó, ascendiendo un largo corredor tieso y rectilíneo vestido de
praderío y bloques graníticos aislados.
En la cabecera del
resalte el corredor desaparece y el camino atraviesa pequeñas depresiones, pasa
junto a un ibonciecho y nos deposita en la Orilla Norte del Ibón de la Tartera
de Perramó situado a 2260 metros de altitud donde encontramos inmediatamente
una zona de vivac que vamos a utilizar.
Son las once,
desmontamos las mochilas, plantamos la tienda y nos sentamos para comer
tranquilamente. Una hora después y con reducidas mochilas continuamos rodeando
el ibón por el norte donde encontramos un camino que nos interesa.
Nuestro objetivo
está perfectamente señalizado al oeste en medio de la enorme Tartera de Perramo,
se trata de la Aguja Oeste, la más alta pero la menos altiva de las tres y
hacia allí se eleva nuestro camino por el que baja gente.
Tranquila y
pacientemente remontamos la ladera hasta alcanzar el collado al oeste del grupo
de agujas. Estamos a 2496 metros de altitud, dejamos las mochilas y tomamos la
amplia ladera oeste que se va en busca de unas paredes de grandes bloques de
granito.
Se trata de un paretazo
de una treintena de metros que cuenta con un paso de IIº con un poco de patio
que se solventa fácilmente el resto es una pared de bloques que requiere algún
apoyo de manos.
Superada la pared
una rampa muy llana y herbosa nos deposita en la Cima de la Aguja Oeste de
Perramó situada a 2554 metros de altitud. Es la una.
Desde la cima no
vemos la pequeña Aguja Central y si la Oriental, nuestro campamento, la Cresta
de Ixeia con especial detalle en la Zona de las Agujas del Chinebro que culmina
en Escorbets nuestro próximo destino.
Por donde hemos
subido bajamos y llegados al collado, recogemos las mochilas y continuamos por
el GR11. que sube de los Ibones de Batisielles con destino al Collado de la
Piana.
Se trata de un
transitado camino que se eleva escalonadamente al oeste, balizado y lleno de
hitos de piedras en el que nos ocupamos alrededor de media hora. En el collado
a 2700 metros de altitud, echamos una visual al Posets y la zona de los ibones,
dejamos las mochilas y tomamos la arista norte en la hay un tenue caminillo que
seguiremos. El Ibón de la Piana está aquí mismo.
Hace ya muchos
años que subimos pero no recordamos casi nada de la arista que se inicia ligeramente
en la vertiente norte, remonta un corredor mineral y bien escalonado y sigue un
tramo de arista de bloques graníticos fáciles.
Luego aparecen una
serie de prominencias cimeras que se faldean generalmente por la vertiente este
bien de llano o en ligero ascenso hasta que se alcanza la zona de un grupo de
dientes que constituyen la Cima de Escorbets situada a 2901 metros de altitud. Son
las tres menos cuarto cuando hacemos una foto de cima en una de las
prominencias en las que podemos estar los tres.
Desde la cima
echamos una visual interesada a la Arista del Chinebro y no sacamos nada en
claro a excepción de que desmontarse de la misma no es muy fácil si no te
acercas hasta aquí mismo.
La bajada por
camino conocido es más corta que la subida y ya en el Collado de la Piana
desandamos camino hartándonos de Tartera de Perramó.
El día que ha
estado estupendo para caminar gracias a la nubosidad dispersa que ha decorado
el cielo se uniforma algo por el oeste y el norte pero sin amenazar y son las
cuatro y media de la tarde cuando nos llegamos al Ibón de la Tartera de Perramó
liquidando nuestra jornada que se ha saldado con 1650 metros de ascenso y 725
metros de descenso y bueno, terminamos con ganas.
Nos queda una enorme tarde para contemplar e imaginar nuestra actividad de mañana, remojarnos un poco en el ibón que por cierte tiene el agua bastante templada y cenar temprano pues también hemos comido muy pronto.
La
nubosidad se oscurece y uniforma algo, incluso quiere chispear pero ni siquiera
llegará a eso y alrededor de las ocho me empiltro con ganas, mis chicos lo
harán poco después dispuestos a negociar una larga y cómoda noche.
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