Aparcamiento de Aneu, Col de Soum y Cabaña
de Pombie, Col de Suzon, Arista y Cara Este.
10-06-2022.
Salida 07:15 h. Llegada 15 h.
Sol.
Bastante fácil.
Juan Castejón, Rosa Mª. Martínez y Mariano Javierre.
El
Midi de Ossau es ese pico que todo el mundo conoce y al que nosotros le
habremos hecho cientos de fotografías desde innumerables lugares: siempre está
allí, espléndido y arrogante, pastoreando los Valles del Pirineo Central.
Es
una montaña “importante” que se podría comparar en importancia, salvando
algunas distancias, al Cervino en los Alpes y eso que ni siquiera es un
tresmil, pero lo suple sobradamente con su determinante carácter.
Hemos subido en
algunas ocasiones, una de ellas con nuestra hija cuando era una cría que trepaba
como los ángeles y hoy 10 de Junio de 2022 volvemos.
Madrugamos un poco
y a las siete y cuarto estamos aparcando bajo la Cabaña Arraille situada a 1725
metros de altitud. El valle de Aneu está verde y sin ganado todavía, una imagen
radicalmente diferente a la invernal.
Bajamos para
cruzar los barrancos y remontamos al norte para pasar por la Cabaña Senescau y
afrontar el ascenso al Col de Soum de Pombie situado a 2107 metros de altitud
en tres cuartos de hora.
Allí contemplamos
e imaginamos el resto de nuestra vía al pico y un cuarto de hora de camino en
suave descenso nos deposita en el Refugio de Pombie situado a 2031 metros de
altitud. Pasamos junto al lac del mismo nombre y afrontamos la travesía de la Grande
Raillere, siempre en dirección norte.
La Travesía de la
enorme pedrera, a pesar de que se ha recolocado una ingente cantidad de piedras
se nos lleva veinte minutos y con otros diez más alcanzamos el Col de Suzon
situado a 2130 metros de altitud y en la arista entre Saoubiste y nuestro
objetivo.
Allí tomamos la
arista al este con una pareja por delante a la que adelantaremos a la estrada
de la pared situada sobre los 2300 metros de altitud cuando son las nueve de
una mañana absolutamente espléndida.
Entramos a la
pared con algunas dudas pues todo está muy machacado y solamente recordamos el
Diedro de Salida del Corredor Inferior.
Se trata de un
corredor de una veintena de metros que ascendemos primero por su derecha para
entrar al fondo del mismo en un tramo central encajonado y con pequeñas presas.
Ya en la parte final los agujeros de las clavijas empotradas de las que
solamente queda una nos certifican que nos encontramos en la vía correcta pues
en alguna ocasión habíamos subido por fuera de la misma.
El corredor no
llegará al IIIº pero nos ha pillado un poco fríos, lo que no será ningún
problema ya que entraremos en calor ascendiendo una travesía muy mixta, ahora
al noroeste en la que todo sigue machacado y con hitos por todas partes.
Ganamos altura en
busca de un grupo de neveros residuales para que, entre ellos, alcancemos la
entrada al Corredor Intermedio situado sobre los 2430 metros de altitud.
Se trata de un
paretazo de alrededor de 25 metros que
cuenta con una fisura en su parte derecha y una pared vertical bastante bien
escalonada que trepamos con algún cuidado y por fuera de la grieta donde las
presas son de mayor tamaño. Será un paso muy próximo al IIIº.
Salidos del paso
nos incorporamos a una ladera mixta e inclinada
con un acceso en el que hay tres clavijas para ganar altura de nuevo en
diagonal al noroeste.
Vamos en busca del
Corredor Superior y seguimos los abundantes hitos que pueblan la pared.
Ascendemos pequeños corredores salpicados con zonas de placas todo con una
excelente roca aunque tiene algo de basura suelta. Intercalamos alguna pequeña
travesía siempre empleando las manos y superamos algún corredor que cuenta con
nevero residual duro a la sombra.
Con ello
alcanzamos el corredor de salida vertical pero fácil que nos deposita 50 metros
al este de la Cruz del Midi de Ossau. Para entonces yo ya tenía muy claro que
no subíamos por el corredor convencional.
Estamos cerca de
los 2650 metros de altitud y por delante tenemos una gravera bastante acostada
en la que hay casi más hitos que piedras y sobre la que hay establecidos
multitud de caminillos hoy salpicados con neverillos residuales.
El ascenso se hace
ligeramente pesado y nos deposita en el crestón en el que culmina la Aguja Jean
Sante.
De allí para
arriba, unos pocos metros nos dejan en la Cima Francesa del Midí desde la que
hay que realizar un corto cresteo al este para superar un par de gendarmes y
alcanzar la Punta Aragón del Midí de Ossau situada a 2878 metros de altitud.
Son las once menos cuarto.
Hacemos algunas
fotos y nos sentamos en un vivac recordando y contemplando un panorama
espectacular como pocos: el Midi es un pico limpio y aislado paraíso de
escaladores y no demasiado adecuado para senderistas.
Media hora después
por donde hemos venido nos vamos, adelantando enseguida a una pareja que ha
debido subir por delante de nosotros. Buscamos la Cruz e iniciamos el descenso
del Corredor Superior por donde es debido. Que recordemos, hemos hecho, al
menos tres caminos diferentes en la Zona del Corredor Superior.
No hay gran diferencia
entre el corredor que hemos subido y el que ahora bajamos. Será de IIº pues está
compuesto de una parte inicial muy tiesa pero perfectamente escalonada sobre
grandes lajas para acostarse algo y terminar en una zona de lajas medianamente
inclinadas alrededor de 100 metros al norte del lugar donde hemos abandonado la
travesía.
Haciendo la
travesía de subida alcanzamos la entrada del Corredor Intermedio en el que
aseguramos un poco a Rosa como forma de ganar tiempo. El descenso será de IIIº
y Juan y yo lo haremos por libre.
Está la pared tan
trillada que tenemos alguna dificultad en encontrar el Corredor de Salida pero
lo destrepamos correctamente y alcanzando el camino en la arista este nos vamos
para abajo abreviando. Mi chica dice que se despide del Midi, pero no sé, no
vaya a ser que haga como Chavela Vargas que llevaba 20 años despidiéndose de
pueblo en pueblo en Méjico y… de cualquier forma la manicura nos ha dejado unas
uñas impecables.
Es la una y media
cuando estamos de vuelta en la Cabaña de Pombie donde comemos con agua helada
de la fuente, cosa que agradecemos en un mediodía veraniego.
Un cuarto de hora de vuelta al Col de Soum de Pombie y tres cuartos hasta el coche al que llegamos a las tres ligeramente pasadas, con los, al menos, 1150 metros de desnivel en las piernas y las sensaciones únicas que el Midi, no muchos otros, regala a nuestro cerebro. A partir de ahora a volver a fotografiar al Midi siempre que se ponga en el objetivo de nuestra cámara de idólatras confesos.
Otras actividades por la zona:
Midi de Ossau, pic, 20-8-95, 16-7-11,
Peyreget, pico, 27-5-01, 24-8-14, 30-1-16, 15-2-18, 23-3-19,
30-7-21, 23-3-22,
Peyreget, peña, 11-6-13, 14-4-15, 13-4-19, 26-2-22,
L'Iou, peña del col de, 14-3-10, 15-1-11, 6-2-11, 8-1-12, 3-4-15,14-4-15, 6-12-15, 30-1-16, 8-2-16, 19-2-17, 28-1-18, 13-4-19, 26-12-19, 12-1-20, 31-1-20, 2-1-22, 26-2-22,
Soum de Pombie, 31-12-14, 18-12-18,
Pombie, pic de, 3-11-17,
Saoubiste, pic, 20-1-02, 9-4-14, 3-11-17, 30-7-21,
Ayous desde Astún, circular al refugio de, 5-2-14.
Midi de Ossau, nuestra vuelta al, 22-6-08.
Pombie, con esquís a la, 18-4-09.
Pombie con raquetas, de paseo a la cabaña de, 15-5-04.
Pombie desde la Cabaña de Soqués. a la, 26,12-07.
Saoubiste frustrado, 3-4-13.
Hola Mariano.
ResponderEliminarEl Midi d'ossau, es de esas montañas, que hay que subir por lo menos, una vez en la vida. Yo subí hace unos otoños y me gusto mucho, además, con un poco de pericia se sube y baja bastante bien (tan solo tubo problemas en la primera chimenea, en la placa con la clavija, que me venía justo para llegar con los brazos).
Vosotros, como siempre, subiendo por vías menos conocidas. No sabía que era más o menos sencillo, llegar a la Punta Aragón.
Un saludo
¡Hola Eduardo!
ResponderEliminarEl Midí es una montaña para todo aquel que quiere o aspira a ser montañero. No es para senderistas.
En Julio del 87 subimos por primera vez, queríamos ser montañeros, solamente guardo fotos y recuerdos pues en aquella época ni siquiera guardaba notas de las actividades.
Recuerdo que tenía el dedo gordo de la mano izquierda jodido pero no hubo más problema que en el diedro de entrada había que meter los dedos en los huecos de las clavijas que y6a no estaban entonces. Cuando se tienen ganas desaparecen los problemas.
Las montañas tienen muchas más opciones de las que conocemos y el Midi no es una escepción, el único problema es que fuera de la zona de confort de la vía conocida, estás más indefenso mentalmente y amenazado al no saber si podrás ssalir por allí, pero esas son las reglas de nuestro juego y las aceptamos.
¡Que vaya bueno!