Aparcamiento de Anayet, Glera de Anayet,
Tubo Pipós, Corredor Nordeste. Arista Oeste, Espelunciecha, Cara Sudoeste, Barranco
Culibillas, Glera de Anayet y Negra Escarrilla.
10-02-2023.
Salida 11 h. Llegada 15 h.
Sol.
Fácil.
Juan Castejón, Rosa Mª. Martínez y Mariano Javierre.
Desde el día de Torcedor en el que me tuve que dar la vuelta por la molestia de la herida en la espinilla, no habíamos vuelto a emplear los esquís, lo que no significa que no hiciéramos alguna actividad ya que con bota corta no había ningún problema.
Hoy 10 de Febrero de 2023, creo que está curada y nos vamos a probar con una actividad corta y progresiva que nos permita darnos la vuelta en el caso de que el asunto no funcione. Iremos a Espelunciecha.
Son
casi las once de una mañana fría y agradablemente soleada, con algo de
inversión térmica pues en Sabi hace un frío que pela. Aparcamos debajo de los
Aparcamientos de Formigal Anayet, en una salida limpia que conduce a una de las
instalaciones de servicio de la instalación que incluye una balsa de agua a
1700 metros de altitud.
Salimos
foqueando desde el mismo coche y ascendiendo directamente alcanzamos enseguida
la gran revuelta de la Pista de la Glera para tomarla al oeste. Allí la nieve
está muy dura pues los que bajan por la Negra Escarrilla la acuchillan todas
las tardes, pero enseguida y bien orillados ascendemos con comodidad en busca
de la Glera de Anayet.
Media
hora después abandonamos la pista y proseguimos por los Campos de Nieve de la
Glera de Anayet, dejando a nuestra derecha la Cabaña de la Glera, en busca del
Tubo Pipós que está alojado en la Este de Espelunciecha, Subiremos su resalte
inferior por fuera del mismo y dando un rodeo cómodo al oeste y por el propio
tubo el resalte superior aprovechando que no baja más que algún esquiador
diseminado a estas horas.
Terminado
el tubo proseguimos de llano por fuera de la pista en busca de la Entrada del
Corredor Nordeste de Espelunciecha que vamos a subir. Hay una huella en la
parte baja del corredor.
Juan
continúa con sus raquetas, corredor arriba, de frente paso de maniobra y nos
esperará arriba tomando el sol. Nosotros ponemos crampones, colgamos los esquís
en la mochila, echamos un cafetín y continuamos corredor arriba.
Tiene
tramos con nieve polvo profunda y otros
con nieve dura pero se sube muy bien y es un auténtico placer. A la salida
tomamos la arista oeste del pico que pelada como siempre, tiene demasiada roca
cubierta con un dedo de nieve polvo.
Alcanzado
el nicho que tiene la arista, dejamos las mochilas y nos subimos hasta la Cima
de Espelunciecha situada a 2396 metros de altitud transitando entre hielo y
piedras.
En
la cima hacemos algunas fotos, comprobamos que el Corredor Sudoeste tiene poca
nieve y algunas peladuras, cosa que suponíamos y nos damos la vuelta para comer
en el nicho, sentados cómodamente en unas piedras y al agradable sol del
mediodía.
Se
nos va algo más de media hora pues son las dos cuando nos montamos en los
esquís e iniciamos el descenso de la pala sudoeste. Tiene unos metros de nieve
polvo pero inmediatamente se pone dura por trajinada, incluso en el Rellano de
Anayet está algo enganchona.
El
descenso de la Pala de Cierre de los Ibones de Anayet también muy trajinada
está labrada en duro lo que nos hace temer lo peor para el Barranco Culibillas,
pero no será así: en el sombrío de la cabecera hay una excelente nieve polvo
que disfrutamos brevemente para abandonar el mismo y remontar cómodamente con pieles hasta entrar en la Glera de
Anayet.
Desde
allí solamente queda disfrutar de la nieve polvo de la Glera con poca pendiente
e introducirnos en la Negra Escarrilla que es una auténtica delicia a estas
horas. Solamente por este tramo merece la pena la jornada.
Son
las tres de la tarde cuando llegamos al coche un pelín cansados tras 700 metros
de desnivel acumulado a los que se ha sumado tres semanas de demasiado relax y
se nota. Lo mejor del día ha sido que la espinilla no me ha molestado al
llevarla muy protegida y curada.
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