Vertiente Norte de la brecha Difícil en la Cresta de los 15 Gendarmes de Alba.
Baños
de Benasque, Turonet de Alba, tres
Ibones de Alba, Brecha de Alba, Ibón de Cregueña y descenso hasta el Puente de
Cregueña.
20-10-2007.
Tiempo efectivo 08:00 h.
Sol.
Bastante
fácil.
Agua un
poco por cualquier parte y en los ibones.
Rosa Mª. Martínez y Mariano Javierre.
Mapa de Alba y Cregüeña procedente de Prames. Vía en amarillo.
Hace
tiempo que queremos ir a visitar los Ibones de Alba, pero están en Benasque y
eso supone dos horas largas de viaje. Benasque está lejos o así nos lo parece,
que es lo que en definitiva cuenta.
Es
viernes 19 de Octubre de 2007 terminados nuestros trabajos a las cinco de la tarde
nos vamos para allá.
Tenemos
muy poca circulación y a las ocho menos veinte, cuando quiere anochecer,
paramos en Benasque para dar una vuelta corta. El pueblo está en temporada baja.
Alrededor
de las ocho marchamos carretera arriba hasta el Plan de Campamento, tomamos la
carretera que nos baja hasta la entrada del actual camping y pasando el puente
sobre el Esera alcanzamos el inicio de la subida a los Baños de Benasque.
Allí
surge la pista que conduce a Senarta, pasamos de nuevo el río y, poco más
abajo, alcanzamos el Refugio de Pescadores. Son las ocho y media de la tarde
que ya es noche de luna llena.
Acaban
de arreglar el refugio y está cerrado: un contratiempo añadido.
Llevamos
leña para encender el hogar, un poco de comida para hacer, ropa abundante pues
el refugio es grande y está al lado del río y no hemos traído la tienda. Bueno,
dormiremos dentro del coche lo que no será mayor problema. El año que viene ya
estará reventado y podremos dormir dentro.
No
entiendo que estos refugios de uso libre estén cerrados. Han gastado un montón
de dinero, incluso han cambiado el hogar de sitio, han embaldosado el suelo…
con ese dinero podrían haberlo adecentado durante veinte años.
Cenamos
dentro del coche y a las nueve y media nos ponemos horizontales.
La
noche es cálida para el lugar en el que nos encontramos, se hace larga como ya
esperábamos pero es una buena noche que no impide que se nos hagan las ocho de
la mañana y de día.
Recogemos,
desayunamos tras calentar la leche y nos disponemos a emprender el sábado 20.
Para ello montamos en el coche y volviendo por la pista que trajimos ayer
noche, alcanzamos la carretera de los Baños y nos vamos para arriba
contemplando las obras de encauzamiento del Torrente del Turonet que cruza
repetidamente la carretera.
Aparcamos
a 1680 metros
de altitud y enseguida tomamos las mochilas y el camino. Son las nueve menos
cinco.
En el Barranco del Turonet de Alba.
Una
marcada senda se impone a pesar de los trabajos de la retroexcavadora y se
prolonga casi horizontal en dirección norte hasta que alcanza el Torrente del
Turonet de Alba.
Inmediatamente
se empina con cortas lazadas terrosas y progresa por la orilla izquierda del
torrente ya en dirección este. Hay unas balizas amarillas que vienen muy bien
para seguir la vía que progresa por medio de una oscura pared metamórfica
bastante erguida tras abandonar una canal que baja bastante pendiente, directa
y muy descompuesta.
Finalmente
la vía atraviesa el torrente en su nacimiento y alcanza un herboso y plano
collado al este del Turonet de Alba. Estamos sobre los 1975 metros de altitud.
Atravesamos el collado en suave
descenso y en dirección norte y, recelando del camino lo abandonamos para tomar
otro que se orienta hacia el nordeste en suave ascenso. El camino que hemos
dejado conducía a las Fuentes de Alba.
La Arista de los 15 Gendarmes desde debajo del Inferior de Alba.
Vamos ganando altura con un
horizonte en la Arista
de los Quince gendarmes que se asoma a contraluz descendiendo del Pico Alba.
Una vaguada herbosa nos introduce en el Circo Lacustre de Alba por camino
bastante transitado.
Ibón Inferior de Alba.
Hemos ido girando al este y
adivinamos la presencia del primer ibón. Enseguida alcanzamos el cierre del
Ibón Inferior de Alba a 2260 metros de altitud
cuando son las diez y diez.
Hacemos unas fotos al
sombrío y delicado ibón mientras decido
abandonar el itinerario más común marcado en los mapas porque se salta uno de
los ibones.
El camino prosigue lineal por la
orilla norte y nosotros nos vamos en busca de un pequeño collado situado al
noroeste del ibón.
Ibonet de Alba camino del Superior.
Alcanzado el collado a 2300 metros nos
introducimos en el barranco por el que desagua el Ibonet de Alba y que es
precisamente el Torrente del Turonet junto al que hemos subido hace un rato.
Progresamos a media ladera en suave ascenso y nos asomamos de nuevo al Ibón Inferior
de Alba ahora por su orilla sur comprobando que también se podría haber pasado
por el sur del ibón. Luego una loma granítica de grandes dimensiones en la que
está perfectamente instalado el pino negro y sobre la que hay diseminadas
algunas citas nos conduce al Ibonet de Alba situado a 2360 metros de altitud
cuando son las diez y media pasadas.
Ibón Superior de Alba.
El ibón entre el sol y la sombra
nos refleja la silueta de la Tuca
de Campamento, se deja fotografiar difícilmente y su contemplación no es
demasiado cómoda deslumbrados por los rayos de un sol recién llegado.
Nosotros continuamos para arriba
en dirección nordeste por una pedrera granítica muy asentada y de la que ha
desaparecido ya el pino negro, en dirección al sol y, consecuentemente,
bastante deslumbrados.
Encontramos las citas del camino
que sortea el Ibonet y que conducen a una soberbia brecha vestida de oscuro
contraluz. A mí no me parece la brecha adecuada para pasar a Cregueña pero las
citas hacia allí van y no hacia una brecha algo más asequible, más baja y al
sudoeste de la anterior.
La Brecha Difícil de Alba.
Ascendemos a través de una
pedrera de granito de variadas proporciones y parcialmente cubierta de nieve y
nos aproximamos a la brecha.
El corredor tendrá alrededor de 10 metros , es muy
erguido, se puede subir por cualquier parte pero hay que emplear bien las
manos. Lo tomamos por su parte derecha que tiene un pequeño diedro vertical con
muy buenas presas que nos permite un ascenso seguro. Luego hay que salir a la
parte central que se acuesta un poco, se llena de basura y conduce directamente
a la brecha y al sol de la mañana en medio de un ventarrón de collado que nos
ha congelado las manos.
Localizamos el Ibonet de Cregueña
a nuestros pies pero el corredor de la vertiente sudeste no me gusta nada: es estrecho,
vertical, con basura pero…creo que se corta.
Bajo una veintena de metros para
ver, pero no veo y me salgo a la pared derecha del mismo para confirmar lo que
creía ver. Tiene un fuerte resalte vertical y por la derecha no hay escapatoria
en una zona un poco más amplia.
Vuelvo para arriba y al
calorcillo del sol, fuera del azote del viento nos ponemos a almorzar aunque a
Rosa no le guste el sitio. A mí me parece que es francamente especial. Son las
doce de la mañana.
Un cuarto de hora después, hay
prisas por destrepar, remontamos hasta la brecha y de nuevo somos azotados
impíamente por el viento. Destrepamos con toda tranquilidad a pesar del bloqueo
mental y fuera del corredor comprobamos que ya nos ha llegado el invierno a
nuestras manos.
Bajamos unos metros mixtos de gravera
helada bastante desagradables e iniciamos un faldeo en dirección sudoeste por
la base de la pared que es el lugar que presenta mayor cantidad de nieve
acumulada.
Hay que perder alrededor de 100 metros entre unas
cosas y otras pero sin mayor problema que la inquietud por si será la brecha
que buscamos.
Frente a la misma quedamos un
tanto sorprendidos puesto que la base es un nicho sin salida: son dos placas
verticales y lisas de alrededor de 4 metros y punto. Pero por su parte izquierda
hay un sistema de repisas que me puede permitir acceder a la brecha según
calculo.
El ascenso es fácil y bajar a la
brecha es de libro. Le digo a Rosa que suba y alcanzo la Brecha de Alba a 2646 metros de altitud.
Es la una menos cuarto y esto si es una brecha transitable.
Ibonet de Cregüeña desde la brecha Inferior de Alba.
Se trata de un estrecho
corredor, bastante inclinado y lleno de basura que enseguida se ensancha y se
introduce en una amplia pedrera bastante inclinada en cuya base se asienta el
Ibonet de Cregueña.
En el Ibonet de Cregüeña y Posets al fondo.
Vamos bajando siempre por las
zonas más estables con la intención de faldear por la orilla norte del ibonet
al objeto de perder la mínima altura posible puesto que luego hay que
remontarla, pero finalmente hay que bajar hasta alcanzar el camino del Ibón de
Cregueña ya que la diagonal puede resultar más costosa que el remonte
posterior, se trata de una pedrera granítica de grandes proporciones.
Estaremos por debajo de los 2450 metros de altitud
y hay que remontar, por un camino que ya no recordamos alrededor de 200 metros de desnivel
en dirección este-nordeste.
Se puede ir por cualquier parte
pero vayas por donde vayas tan pronto haces un trozo de camino como remontas
unos bloques de granito generalmente colosales y, eso si, no haces 10 metros en la misma
dirección. Termina por hacerse pesado el caminito pero a la una alcanzamos la
cola del Ibón de Cregueña a 2625
metros de altitud.
El ibón está espléndido, el día
a juego y queremos llegar hasta la cola pasando por el vivac.
Para ello tomamos su orilla
derecha que es la practicable, la izquierda tiene tres paredones que habría que
faldear casi por Coronas y hemos de ascender en dirección norte para salvar
unas pulidas placas de granito que bajan hasta el nivel del agua. Son esos 25 metros de ascenso que
te saben a cuerno y que no terminas nunca de remontar para luego perderlos hacia la parte central del ibón.
Collado de Aragüels desde el Vivac de Cregüeña.
Estamos rodeando ya junto a la
orilla cuando localizamos el vivac: es un abrigo formado por una gran losa
horizontal y otra inclinada que hace de techo. Tiene cerrados los laterales y el
centro con pared de piedra menos un hueco a modo de puerta y está orientado al
sudeste. El suelo es bastante liso y plano pero no cabrán más allá de 4 o 5 personas. En los alrededores hay otros vivacs
quizás un poco peores en cuanto a suelo.
Nuestro vivac familiar en la Cola de Cregüeña.
Tuca de Cregüeña.
Aragüels y la Tuca de Cregüeña desde la cola de Cregüeña.
Echamos un trago, dejamos las mochilas
y nos vamos caminando hasta la cola del ibón contemplando sucesivamente a la Tuca de Piedras Albas, la Tuca de Cregueña, El Aragüels,
la Aguja Juncadella ,
la Aguja de
Cregueña, La Aguja
Haurillón , El Maldito, El Gendarme Schmidt-Endel, el Collado
Maldito, El Abadías al que casi todo el mundo lo confunde con la Maladeta , no sé si la Punta del Collado de la Rimaya. El Cordier, el
Sayó y el Lebondidier. Bueno, no está mal la colección que nos llena de
recuerdos y de nuevos propósitos.
Las Tres Agujas de la Arista de Cregüeña.
Gendarme Schmidt-Endel y Maldito desde Cregüeña.
Vwertiente Sudoeste del Circo de Cregüeña y Collado maldito.
Lebondidier.
Llegamos a la cola del embalse,
reconocemos nuestro campamento en el verano del 93 y aligerando nos damos la
vuelta sobre nuestros pasos pues son las dos de la tarde.
Nos cuesta media hora larga la
vuelta y casi nos pasamos el vivac.
Lezat es el Invitado.
Comemos un tanto molestos por el
fresco viento que sopla un poco en cualquier dirección y a las dos y diez
reemprendemos la marcha.
Crabioules, Tusé de Remuñé, Rabada, Navarro, Maupas y Boum.
Fotografiamos las zonas del
Posets y del Perdiguero, comprobamos una vez más que el corredor de la brecha
por la que queríamos pasar tiene muy mala pinta y junto al Ibonet nos
encontramos con una pareja que baja. Son de Viella, de nuestra quinta y
comenzamos a charlar. Hacen mucha montaña y tenemos tema.
Vertiente Sur de la Inferior de Alba y la Brecha Difícil.
El va despacio puesto que está
bajo de forma debido a una operación y nos quedamos con ellos a pesar de que es
un poco tarde para nosotros.
Bajamos charlando
distendidamente, recordamos un camino que ya teníamos prácticamente olvidado y
fotografiamos el barranco que está sencillamente espléndido otoñando.
Pequeña Cascada en el Barranco de Cregüeña.
A las seis y media alcanzamos El
Puente de Cregüeña y como tienen allí el coche aparcado nos suben en un momento
hasta los Baños de Benasque que es donde tenemos el nuestro. Una cosa por la
otra
A las siete menos cuarto estamos
en el coche. Hemos terminado el recorrido con un promedio de 1250 metros movidos
aunque hemos bajado unos pocos más de
los que hemos subido.
Como ya no tenemos nada que
hacer en el valle decidimos bajarnos hasta Campo, de camino buscaremos la
orilla del río para hacer un poco de fuego y asarnos unos trozos de embutido.
Luego un café con leche en un bar cualquiera para pasar la noche durmiendo en
la caseta de una báscula de pesaje al día siguiente nos iremos por la mañana a
visitar el Dolmen de Merli.