Vulturó con mejor luz desde Gralleres.
Josa
de Cadí, Coll Jovell, Cara Sur, Canal del Ferrer, Puig de Gralleres, Coll de la
Canal Baridana, Vulturó, Gralleres, Les Canaletes, Torreta de Cadí, Planell de
Josa, Coll Jovell y Josa.
25-08-2019.
Salida 06:30
h. Llegada 14:15
h.
Mixto.
Fácil.
Ascensión.
Rosa
Mª. Martínez y Mariano Javierre.
Mapa de Vulturó procedente de Iberpix. Vía en amarillo.
A
la entrada de Josa de Cadí hay un prado para aparcar dominado por la Pirámide
del Cardinell y por la Ermita de Santa María y allí a 1430 metros de altitud
nos vamos a quedar.
Hay
una pista que sube al Coll Jovell pero no sé cómo están sus casi 7 kilómetros.
Por lo tanto reconozco el camino que pasa junto a la ermita y antes de que caiga la tarde cenamos para
pasar una noche larga y agradable en la furgo.
Cardinell desde Josa de Cadí.
Al
25 de Agosto de 2019 nos levantamos sobre las seis de la mañana, desayunamos y
esperamos que claree un poco. Son las seis y media cuando nos ponemos en marcha
a dos luces.
El
camino se orienta al oeste cruzando un par de barranquillos que bajan de la
Este de Cardinell hasta que por un portillo se introduce en el barranco que
baja del Coll Jovell. Se cruza con la
pista ya algo arriba y en suave ascenso alcanza el Coll Jovell situado a 1800
metros de altitud.
Desde el Coll Jovell, el paretazo que hay que subir.
Son
las siete y cuarto cuando damos la espalda a Cardinell y nos enfrentamos al
paretezo que tenemos por delante al norte. Se trata de una ladera que enseguida
se yergue vestida de lapiaz calizo con algo de boj, enebro rastrero y gayuba
instalados en sus grietas y con algunos pinos negros salpicados.
Hacia la derecha ascenderemos hacia Gralleres.
El
GR 150.1. que hemos traído desde el pueblo asciende directo al norte anunciado
como una subida sin concesiones pero justamente a unos 300 metros del collado,
en el límite del praderío y cuando inicia una pequeña zeta a nuestra izquierda,
aparecen unas trazas de caminillo con un, poco claro, hito que se desvía
ligeramente a la derecha del GR. Se trata de un teórico camino que asciende la
ladera en diagonal al nordeste en busca directa al Vulturó. Esperaba
localizarlo y… lo seguimos.
Enseguida abandonamos el GR 150.1. para tomar camino directo a Vulturó.
Bueno,
seguirlo es un decir porque los hitos desparecen y lo perdemos casi de
inmediato aunque no nos preocupa ya que un camino sin demasiado tránsito en una
ladera de lapiaz calizo con
abundantísimas franjas rocosas a modo de viras libres de vegetación es muy
difícil de seguir en el supuesto caso de que esté establecido. De cualquier
forma el tránsito de la ladera es cómodo y con infinidad de alternativas.
Por encima de la pared aparece el Praderío de Costa de Cabirol.
Subimos
suave y persistentemente hacia el sol que todavía no ha llegado a la ladera y
nos tropezaremos con algún que otro hito que no vamos buscando.
El
Coll Jovell se va quedando abajo y nosotros ganamos altura paulatina y
persistentemente fijando hitos parciales que estructuren nuestra ruta de
ascenso sin errar demasiado de aquí para allá. El sol se está levantando sobre
un horizonte de pinos negros salpicados lo que va a suponer una pequeña
molestia de cara a la visibilidad por lo que vamos buscando su sombra.
Alcanzamos la naciente Canal del Ferrer. A derechas Gralleres.
Luego,
la pared hasta hora no demasiado inclinada, se acuesta y aparece un praderío
algo irregular y reseco por el que el ascenso es más pausado. Nos entretenemos
con unos rebecos hasta que poco después aparece el declive de un barranco
amable que viene de muy arriba.
Pequeño destepe en el Puig des Gralleres.
La
ladera sigue acostada y se puede transitar por ambas orillas sin problema por
lo que decidimos cruzar la doble rama que aparece después y proseguir al este
hacia una doble loma que parece de mayor altitud.
La Canal Baridana desde su cabecera.
Estamos
sobre los 2500 metros y todavía seguimos subiendo en busca del punto alto. El
barranquillo será a la postre el Canal del Ferrer ya que cuando alcanzamos la cima nos situamos:
estamos en la Cima del Puig de Gralleres a 2613 metros de altitud y más al este
aparece un profundo collado del que arranca la Canal Baridana y Vulturó nos
espera oscuro al este de ese collado.
Son
las nueve de la mañana, allí está el GR. que nos ha de conducir a un pequeño
destrepe muy fácil y seguidamente buscar paso en un par de gradas rocosas
rotas, para largarse en descenso en busca del amplio collado situado a 2500
metros de altitud.
Foto de Cima en Vulturó.
La
Canal Baridana tiene trazas de camino en su salida terrosa pero se advierte que
debe contar con algún resalte bajo el tramo de pedriza descompuesta superior y
por debajo aparece la pedriza de deyección de la canal. Es la primera de una
serie de canales que vamos a ver mientras recorramos la arista y quizás sea la
que tiene el acceso más amable de todas ellas.
Pequeño destrepe desde la Cima de Vulturó.
Del
collado remontamos por las inmediaciones de la arista un primer resalte al que
le sucede otro que nos deposita en las paredes somitales que pueden faldearse
hacia el este. Nosotros ascendemos una canal erguida y corta en la que hay que
apoyar las manos y enseguida, llaneando por encima de las paredes, alcanzamos
la Cima de Vulturó o Puig de la Canal Baridana situada a 2649 metros de altitud.
Son las nueve y media pelín pasadas.
Las Paredes de la Sur de Gralleres desde la Salida de la Canal Baridana.
Desde
la cima en una mañana agradabilísima para caminar y un tanto neblinosa en la
distancia con tendencia a evolucionar nos sentamos a almorzar junto al hito
metálico que contiene un cuaderno de firmas.
Al
este creemos ver Costa Cabirolera donde estuvimos ayer pero con poca
definición; al sur tenemos la sempiterna Pedraforca y al sudoeste reconocemos
el Port del Compte y nada en el amplísimo norte desconocido y neblinoso.
Deberíamos ver, con permiso de Andorra, la Pica de Estats, También la Bullosa y
Puigmal pero…
Continuamos la arista hacia el oeste desde Gralleres.
Media
hora después iniciamos la vuelta transitando la arista. Desandamos hasta el
Coll de la Canal Baridana y remontamos hasta el Puig de Gralleres, media hora
de ida y otra media de vuelta. Hacemos una foto más nítida de Vulturó con el
sol más alto y proseguimos por la cresta con un sube y baja continuo que nos
lleva de promontorio collado del que arranca una canal al norte. Todas tienen
su nombre pero primero las desconocemos y segundo no las podemos identificar ni
siquiera los contrafuertes que se adentran al norte separando una de otra.
Llegando al Collado de la Canal del Ferrer.
Todas
tienen en común su orientación rigurosa al norte sus pedrizas descompuestas e inclinadas y zonas de paredes verticales que las
conforman en unas de entrada y en otras en zonas intermedias; algunas cuentan con estrangulamientos
visibles y lo que sucede es que el
acceso por el norte es tan remoto que hace falta vencer mucha pereza para
acceder a las mismas.
Entre promontorios siguen apareciendo canales con sus contrafuertes correspondientes.
Algo
más adelante aparece un hito cimero que se ve en la distancia. Cuando llegamos,
se trata de Les Canaletes, es un gran hito piramidal de piedras de 4 metros de
altura y en las inmediaciones del mismo hay un pequeño refugio de piedras en
lamentable estado.
Llegando a les Canaletes.
Estamos
2607 metros de altitud, hacemos algunas fotos y proseguimos por la cresta tal y como venimos haciendo hasta que a lo
lejos visualizamos un poste de direcciones un poco por debajo de la cresta.
En el Hito Cimero de les Canaletes.
El
indicador direcciona a Vulturó, al Coll Jovell y a Torreta del Cadí y hacia
este último lugar nos dirigimos cuando contemplamos la presencia de las dos
primeras personas de la jornada. Creíamos que habría más gente.
Cuanto más al oeste más paredes tienen las entradas a las canales.
Hay
que ascender brevemente un par de pequeños y suaves resaltes en la arista con la vista puesta en
un hito distante pero reconocible que conforme nos acercamos se confirma como
un vértice geodésico.
Unico poste indicativo fuera del Coll Jovell.
Estamos
en la Torreta de Cadí a 2562 metros de altitud
y hemos echado un par de horas de arista pues son las doce.
Cerca de la Torreta de Cadí.
Hacemos
algunas fotos y escribimos en uno de los dos cuadernos de notas montañeros
alojados en un buzón colocado como cabecera del vértice: hemos disfrutado
conociendo durante dos días extraordinarios en la Serra de Cadí; esta gente que
aprecia la montaña sin banderas también se lo merece.
Rebecos en el Rellano del Prat Socarrat.
Diez
minutos después iniciamos la vuelta no ya por la arista sino trazando una suave
diagonal descendente que nos ha de depositar en el Rellano de los Planels de
Josa situado sobre los 2350 metros de altitud y en el que además de poner en
fuga a un nutrido rebaño de rebecos buscamos las balizas del GR.
El descenso al Coll Jovell es algo incómodo.
Nos
cuesta un ratillo encontrarlas pues las imaginábamos en la parte inferior del
rellano y las localizaremos justamente al este en la parte más alta del mismo.
Desde allí el camino se echa materialmente para abajo de tal forma que el
tercio superior resulta bastante pestoso entre terroso, con pedreguilla y
escalones pequeños que te obliga a bajar
continuamente al loro.
El camino tiene pasajes erguidos y torreones calizos.
El
segundo tercio es un poco más clemente más teniendo en cuenta que patinamos una
pedriza extraordinariamente buena que nos baja 100 metros en un plis-plas.
Deslizamos un centenar de metros por una pedriza estupenda.
Nos
cruzamos con uno que sube y charlamos. Rosa dirá que prefiere el camino que
hemos utilizado para subir que este por el que estamos bajando.
Ligeros y dispersos pétalos de la centaurea áspera en Coll Jovell.
Luego
el camino se arrellana bastante y describe una diagonal al este en contraste
con las continuas zetas del camino en general hasta que alcanzamos el desvío de
la mañana e inmediatamente el Coll Jovell.
Acercándonos a Josa de Cadí.
Media
hora después, son las dos y cuarto llegamos a la furgo. Cambiados de ropa
comemos mientras que el recuento de desniveles nos llega a los 1550 metros
acumulados y a la conclusión de que han sido dos días bastante bien
aprovechados para pegarle un repasillo a la Serra de Cadi y disfrutando de una
meteorología envidiable. Vamos, una kilometrada bien aprovechada.