Arista Somital de Peña Forca.
Cabaña de la Reclusa, Collado de Lenito
Bajo, Faja Matimala, Lapiaz y Collado de Lenito, Arista Este, Peña Forca Oriental,
Peña Forca, Cara Sur, Barranco de la Fuente y Refugio Furnia.
06-12-2016.
Salida 09:30 h. Llegada 17:15 h.
Sol.
Fácil.
Juan Castejón, Rosa Mª. Martínez y
Mariano Javierre.
Mapa de Peña Forca procedente de Iberpix. Vía en amarillo.
Las
vías más convencionales de ascenso a Peña Forca
son las que o bien parten de Tacheras
en Zuriza con el atractivo de la Sierra de Alano o utilizan el Barranco
Estiviella desde Oza. Ambas discurren por la vertiente norte del pico, el sur
es otra historia.
Hará
cuatro años que subimos a Lenito por el Barranco del mismo nombre que facilita
el acceso por la vertiente sur de la sierra, era un día soleado de otoño con
nieves altas, algo así como hoy 6 de Diciembre de 2016. Consecuentemente
conocíamos la zona sureste de la sierra y queremos conocer el Barranco Hospital pues a
partir de Siresa no hemos recorrido nada.
La Pista del Barranco del Hospital.
Son
las nueve y cuarto pasadas de la mañana cuando llegamos a las inmediaciones del
Vado del Barranco de la Fuente que tras engrosarse con el de la Reclusa recibe
la denominación de Hospital. Hemos recorrido un par de kilómetros asfaltados y
media docena de pista que se encuentra en muy buenas condiciones. Estamos a
1230 metros de altitud, y aparcamos en un prado adjunto a la pista más adelante
de la Cabaña de la Reclusa.
En el rellano bajo el Barranco y Hayedo de la Reclusa.
La
pista se estropea un poco y comienza a ascender al norte siguiendo la dirección
del valle pero enseguida, un cartel nos invita a abandonarla y tomar un camino
que marcha al nordeste en busca del Collado Bajo de Lenito.
Primero
atraviesa una masa de bojes de buen calibre para enseguida alcanzar un pequeño
rellano bajo el hayedo. Al norte del mismo y despejado por los aludes está el
Barranco de la Reclusa completamente seco.
Precioso Hayedo del barranco de la Reclusa.
Entramos
en el Hayedo de la Reclusa guiados por balizas amarillas y verdes que quieren
marchar al este pero las perdemos enseguida. Las buscaremos pero sin
preocupación ya que los hayedos ofrecen un sotobosque muy limpio y se pueden
ascender un poco por cualquier parte zeteando al gusto, ya que la ladera está
bastante empinada.
Vertiente Oeste del Collado Bajo de Lenito.
Al
este clarea la nieve y se cuela el sol tras el Collado Bajo de Lenito al que
llegaremos tras una hora de camino, alcanzando el plano praderío salpicado de
enebros que lo rellena y ya por encima del hayedo que nos ha regalado un final
muy erguido entre calizas emergentes.
Faja Batimala desde el Collado Bajo de Lenito.
Desde
el collado, a 1742 metros de altitud, avistamos todo el Barranco de Lenito y la
Cabaña Chilburro que conocemos y al agradable sol de la mañana se nos ofrecen
dos alternativas. Desechamos la de ascender directamente al norte en busca de
las paredes que nos acerquen al Collado Alto de Lenito pero 400 metros largos
más arriba y nos vamos al este de la misma para ascender por la Faja Matimala
de aspecto más amable.
Corredor hacia el Collado Alto de Lenito.
Faldeamos
hacia el este en busca de la base de las paredes en la zona de rotura más
próxima y tomando un corto corredor superamos la primera barrera de calizas
claras. Le sucede una terraza inclinada con materiales sueltos y algunos
asentamientos de pratenses.
Subimos
próximos a las paredes del oeste y alcanzamos un corredor largo y fácil que nos
permite seguir ganando altura. Tras el corredor aparece la nieve que sorteamos
con facilidad en principio ya que está muy discontinua.
Por debajo del Collado Alto de Lenito.
Poco
más arriba la nieve es más continua y proseguimos ascenso por una serie de
corredores fáciles en los que vamos empleando las manos con alguna frecuencia.
Acostumbramos
a ser exquisitos en nuestro tránsito escalonado por las paredes pero… una
piedra se suelta, inicia un indeciso descenso para abajo pues está a punto de
detenerse pero finalmente alcanza a Rosa en una pierna y la tira al suelo.
El
asunto se salda con un buen golpazo en el muslo pues la piedra pesaría media
docena de kilos como poco y con algunos rasguñazos y repelones fundamentalmente
en la mano con la que trata de agarrarse a la caliza pues iba justo detrás de
ella y la ayudo a detenerse.
Alcanzamos la nieve bajo el Karst de Lenito.
Curamos
un poco la mano y nos sentamos a echar un bocado al sol mientras mi chica se
recupera del susto. Le molesta la pierna pero no tiene nada roto.
Un
buen rato después probamos. Le molesta la pierna pero espera que con un
ibuprofeno se mitiguen las molestias. La nieve se hace continua y profunda y tras caminar unos cientos de metros decide
quedarse en un buen “magano” al sol mientras
nosotros marchamos hacia el pico.
La Sur de Peña Forca.
Estamos
en el ondulado Rellano Kárstico de Lenito, todavía debajo y al sureste del
Collado Alto de Lenito. Fotografiamos Lenito y el Puntal de Lenito con sus
tubos superiores, avistamos el Collado de Lenito todavía algo distante y la
Este de Peña Forca que es nuestro objetivo; además, inmediatamente alcanzamos
la huella que alguien ha hecho al subir directamente desde el Collado Bajo: es
una huella vieja pero nos va a ir de cine.
Recorremos
con la huella sucesivas ondulaciones del rellano siempre con nieve polvo
profunda y a buen ritmo atravesamos el vallecillo transversal al sur de la
sierra y alcanzamos el Collado de Lenito situado a 2197 metros de altitud, que
no hay que confundir con el Collado Alto de Lenito aunque tengan similares
altitudes.
Arista este de Peña Forca desde el Collado de Lenito.
Desde
el collado echamos una ojeada al Corredor Norte de Lenito perfectamente
innivado y con su gendarme titular allí todo tieso, es el acceso al Barranco Estiviella
y a Oza y tomamos la arista hacia el oeste siguiendo la huella que traemos.
Se
alternan los tramos nevados con algunos limpios en las inmediaciones de la
arista que ascendemos a buen ritmo y ventilados cada vez que nos aproximamos a
la misma. Nos sirve para refrigerar.
La Oeste de Lenito.
En
los frecuentes descansos echamos la vista atrás para contemplar la preciosa
Arista Oeste de Lenito: ¡qué maravilla de líneas! También localizamos a un
montañero que acaba de aparecer en la vía que sube desde el Collado Bajo. Va
ligero.
Luego
oímos unos gritos lejanos… contestamos con algún grito pero… tras el primer
resalte llega el segundo un poco más erguido que ascendemos hacia las rocas con
nieve dura debajo y poco después alcanzamos la Cima de Peña Forca Oriental
situada a 2391 metros de altitud, un metro más alta que Peña Forca.
Peña Forca Oriental.
Hacemos
alguna foto de lo que nos resta hacia la siguiente cima y que conocemos,
contemplamos el Valle Colgado del Hachar de Forca con la Sur de los Alanos y
las cornisas que adornan la arista que nos queda y por las inmediaciones de la
misma descendemos unos metros y nos acercamos al resalte somital de recuerdo
imborrable para mí.
Tiene
dos partes y la inferior está con hielo. Fue la que bajé arrastro tras patinar
en ese hielo y lograr detenerme en el nevero que se ahondaba al sur, hace ya un
paquete de años cuando subiéramos a este pico por primera vez.
En Peña Forca viento y frío.
La
trepada es delicada pero sin sorpresas. Luego viene el resalte siguiente que
tiene una buena huella de la que no me fío y lo treparé con buena roca aunque
con apoyos de hielo.
Un
corto faldeo por el sur debajo de un tramo de arista de bloques nos deposita en
la Cima de Peña Forca a 2390 metros de altitud.
Junto al vértice geodésico hacemos alguna foto y nos volvemos en polvo
puesto que hace un ventarrón y un frío que pela ahora que estamos sudados y en
mangas de camisa.
La Oeste de Peña Forca Oriental.
Es
la una pasada, nos despedimos de la circular proyectada y nos volvemos sobre
nuestros pasos. Nos ha costado tres cuartos de hora y algo recortaremos de
vuelta pero poca cosa puesto que habrá que poner crampones para el descenso.
Rosa nos espera y se le hará largo.
Descendemos
el doble resalte con cuidado y
remontando ligeramente volvemos a Peña Forca Oriental y nada más
comenzar el descenso nos paramos para poner los crampones en lugar cómodo.
¡Hostia
que cojonazos! Rosa está llegando. Se ha tomado el ibuprofeno y cuando le ha
hecho efecto ha probado y se ha venido detrás de nosotros.
De nuevo en Peña Forca.
Juntos
volvemos hacia Peña Forca siguiendo idéntico camino. El paso de hielo con
crampones no tiene historia, le ayudamos a pasarlo pues ella no los lleva
puestos y en el abrigo siguiente se los pone, hemos decidido hacer la circular.
Son
las dos menos cuarto de la tarde cuando hacemos por segunda vez cima en Peña
Forca no se ve un alma por los alrededores, las huellas son al menos de hace un
par de días y sigue haciendo un viento que pela.
Unas
fotos testimoniales e inmediatamente proseguimos la arista hacia el oeste
faldeándola por el sur como se acostumbra a hacer en invierno puesto que la
arista está sembrada de incómodos bloques.
Iniciando el descenso de la Sur de Peña Forca.
La
idea original es hacer un buen tramo de arista para descender al sur de Alano
Arralla en busca del Estrecho de Allará y del Barranco Hospital, pero rebasada ligeramente la perpendicular
del Collado Alto de Lenito, nos echamos pared abajo: la nieve profunda y
soleada permite un descenso cómodo y directo en esta orientación sur.
Desde el oeste del Collado Alto de Lenito.
Es
un paretazo de 200 metros largos el que nos deposita en el vallecillo colgado
paralelo a la Sierra de Lenito. Alcanzado el fondo del vallecillo lo
recorreremos hacia el oeste en suave descenso que se alterna con algunos
corredores más erguidos pero vestidos de nieve polvo que se mezcla con algún
tramo duro por venteado.
Transitamos
bajo las paredes de Punta Furnia adornada de cornisas traslúcidas al sol de la
tarde y alcanzamos el rellano situado entre esta y Alano Arralla. Estamos
alrededor de los 2050 metros de altitud y nos paramos al sol para comer y para
arreglar un crampón de Rosa que le está dando la lata. Son las dos y media.
Zaratolla y Alano Arralla.
Pasadas
las tres continuamos girando poco a poco al sur
orientados por la Cima de Zatarolla. Se trata de una ladera escalonada
de resaltes amplios en los que irá desapareciendo la nieve paulatinamente y en
la que iremos eligiendo camino entre las posibilidades que van apareciendo.
Juan baja delante oteando el horizonte.
Bajamos a vista hacia el Estrecho de Allará.
El
Barranco de la Fuente alcanza el Estrecho de Allará y ese es nuestro objetivo
con la incertidumbre de no saber cómo estará su orilla derecha a la que
accederemos. El barranco queda muy profundo todavía.
Largo corredor que nos bajará hasta el Barranco de la Fuente.
Termina
la nieve y siguen los resaltes herbosos que vamos descendiendo. Tras un rellano
aparece un corredor herboso, estrecho y muy empinado pero tiene buena pinta y
nos vamos para abajo. Será la llave de nuestro descenso ya que la ladera se
viste de vegetación variada y poco agradable entre resaltes calizos.
Nos
baja un montón de metros y nos deposita en una ladera amplia en la que los
enebros nos obligan a buscar camino limpio que hacemos ya casi al sur sabiendo
que no habrá problemas para alcanzar la margen izquierda del barranco.
Llegando al Barranco de la Fuente que está completamente seco.
Un
tramo más de descenso algo más vestido de enebros nos depositan ya más abajo de
la zona del estrecho de un barranco seco que no creo que conozca el agua en
superficie y por el que creo debe transitar el camino que conduce al Achar de
Alano y al Paso de Tacheras.
Recorremos
unos metros al sur por las inmediaciones del fondo del barranco y enseguida
aparecen unos hitos y el camino que buscábamos. Estaremos sobre los 1400 metros
de altitud y allá se quedan a la luces de la tarde Zatarolla, Alano Arralla y
Furnia mientras que nosotros caminamos con el sombrío de la tarde en el fondo
del valle.
Encontramos camino, lo hemos perdido en el Hayedo de la Reclusa.
Deambulamos
entre masas de boj, el camino se ensancha y nos muestra el Refugio Forestal de
Furnia que está muy húmedo y descuidado a 1350 metros de altitud.
Unos
metros debajo llega la pista que tomamos en dirección sur para recorrer
alrededor de medio kilómetro y alcanzar el punto donde la hemos abandonado a la
mañana cerrando así la circular. Hay un manzano silvestre sin cosechar que nos
regala unas pequeñas y deliciosas manzanas de morro de liebre que nadie cogerá
excepto los jabalíes que se darán el banquete.
Refugio Forestal de Choza Furnía y la pista debajo.
Cinco
minutos después nos llegamos al coche. Son las cinco y cuarto.
La
circular se ha saldado con 1200 metros de desnivel acumulado, una buena parte
del mismo sobre nieve profunda y con suerte a pesar de que, estoy convencido de
que mi chica es algo ceniza. Piedra que se suelta ya tiene dueña: le pasó en
los Infiernos, en el Cervino, en Gorreta de los Gabachos, en el Sombrero, hoy… ir con ella es un seguro
de que sus acompañantes no tienen que
preocuparse por las caídas de piedras.
Hola Mariano,
ResponderEliminarVaya, espero que Rosa no haya tenido molestias posteriores y todo quedara en un moratón. ¡Mira que es fuerte! Esperemos que lleve ya el cupo de piedras, que por lo que cuentas ya lleva media docena!
Saludos para ambos!
¡Hola David!
ResponderEliminarBueno, está algo dolorida pero sin más importancia, por suerte.
Pues si, de ellas dos le han impactado y el resto por los pelos.
Este año no nos veremos en el Belén de Erata pues coincide con el de Santa Orosia.
Hubiera sido estupendo pasar el día con vosotros.
¡Saludos para ti y para Elena!