La clásica del Embalse de Irabia.
Aparcamiento
Embalse de Irabia, Puente de la Cuestión, Casas de Irati, Paso de las Alforjas,
Cima de Abodi Occidental, Casa de Irati, Casa de los Forestales y Orilla Sur de Irabia.
20-10-2016.
Desnivel acumulado 750
m.
Distancia recorrida 29000
m.
Tiempo efectivo 06:00
h.
Nublado.
Fácil.
Juan
Castejón, Rosa Mª. Martínez y Mariano Javierre.
Mapa del Hayedo de Irati procedente de Iberpix. Vía en amarillo.
Aquella
nevada de Junio de 2006 nos dejó poco más arriba de Ochagavía y dos días
después no pasamos del Collado de Bentartea. Este año nos desmontamos en
Burguete ya muy cerca de Roncesvalles pues el programa se había cumplido, así
que, había que rematar la jugada.
En
verano no tengo ningún problema para hacer autoestop y recuperar el coche pero
ahora en Otoño la cosa es distinta por lo que en lugar de plantear actividades
consecutivas las haremos en circular y a otra cosa.
El
20 de Octubre de 2016 dormimos en Aribe tras hacer una buena kilometrada ya de
noche y son las siete de la mañana cuando nos ponemos en pie, es de noche.
Desayunamos
y luego nos llegamos con la furgo hasta la entrada del Bosque de Irati, pagamos
5 euros por el tiket y nos llegamos hasta el Aparcamiento de la Presa del
Embalse de Irabia. Teníamos la opción de acceder desde Ochagavía a las Casas de
Irati pero preferimos ésta.
Saliendo del aparcamiento del Embalse de Irabia.
Son
las nueve menos diez de la mañana cuando nos ponemos en camino a 830 metros de
altitud. La mañana está algo nublada y frescucha, buena para caminar y mala
para la fotografía pero el día es largo a pesar de que estamos en Otoño.
Pasamos
la barrera y nos echamos pista adelante primero al este pero enseguida al norte
para transitar la Orilla Oeste del Embalse de Irabia.
Llega el Otoño al Hayedo de Irati.
La
otoñada del hayedo anda todavía algo retrasada pero el hayedo
ofrece sus encantos en todo momento y disfrutaremos de la Selva de Irati
una vez más pues ya la conocemos. Tampoco es problema el bajo nivel de las
aguas del embalse y la franja de tierras que se interponen entre ellas y la
masa vegetal.
Cruzando el Puente de la Cuestión.
Son
4 kilómetros los que hay hasta el Puente de la Cuestión que es el punto en el
que accede la GR11. y lugar al que pretendíamos llegar con la furgo pero… son
las diez menos veinte cuando cruzamos el puente sobre el Egurgoa continuando
inmediatamente por la orilla este del embalse.
Detalle del Tojo en flor.
Con
continuos traslucidos de las aguas del embalse contemplados por entre medio de
verticales troncos de hayas fundamentalmente aunque no faltan los cipreses de
lawson y los alerces de importación y también abetos blancos y rojos y pinos, de enorme porte y absolutamente
columnares todos. Es el espectáculo de los árboles que nacen en familia y
compiten toda su vida en busca de la luz.
Alerces columnares e Irabia desde su orilla este.
La
continuación de la orilla este del embalse es el Río Irati que meandrea al
este en un valle que se estrangula un
poco y que es recorrido por nuestra
pista y nosotros por ella hasta que nos deposite un rato después en las Casas
de Irati cuando son las once de la mañana.
En las Casas de Irati continuamos hacia el Collado de las Alforjas.
Allí
se encuentra la otra entrada al Hayedo de Irati y hasta allí llega la carretera
que ha salido de Ochagavía. Hay un aparcamiento, un punto de información, una
hospedería y la Ermita de la Virgen de las Nieves.
Llegados
al lugar, cruzamos el Irati por el puente y
continuamos nuestro camino hacia el sur. Unos metros por la carretera y
un poste indicativo que nos sumerge de nuevo en el hayedo.
El claro Hayedo de Irati.
Se
trata de un camino bastante transitado que ataja algunas vueltas de la carretera
atravesándola y que en mediano ascenso gana altura en la Cara Norte de Abodi.
Alcanzado
un tercer cruce nos paramos a echar un bocado junto a la carretera que sube
para pasar por lo alto de la Sierra de Irati en el Paso de Tapla.
Son
las once y media, la mañana va de camino y con un cuarto de hora tenemos
sobrado.
La
continuación alterna tramos de camino amplio con viejas tiraderas de madera en
desuso mientras que vamos atravesando
pistas, alguna de ellas engravada recientemente.
En la salida del hayedo hacia las Alforjas.
Ya
algo arriba, nuestro camino se arrellana para realizar una travesía bastante horizontal y hacia el este. Si
hubiéramos tomado alguna tiradera de madera de frente hubiéramos llegado
directamente a la Cima de Abodi.
Una dolina en el Paso de las Alforjas.
Algo
más de un kilómetro de travesía se rematancon un corto ascenso que nos
deposita en la alambrada que separa el bosque del praderío junto
a un par de elegantes dolinas en las
inmediaciones del Collado de las Alforjas situado a 1435 metros de altitud.
Abodi desde el Collado de las Alforjas.
Bajamos
unos metros hacia el sur con la intención de asomarnos y nos llegamos el
Refugio del Paso de las Alforjas. Se trata de una cabaña bien situada y
orientada al sur, limpia pero desvencijada y con los cristales rotos en la que
se puede pernoctar tal y como pretendíamos hacer hace diez años. En peores
sitios hemos dormido.
El Refugio del Paso de las Alforjas.
Desde
este lugar contemplamos Ochagavía y la Borda de Argaña, creo, que fue donde
pasamos una inmunda noche de ventisca.
En la Cima de Abodi Occidental.
Es
la una del mediodía cuando ponemos rumbo al oeste y en muy suave ascenso nos
vamos a ventilar un cuarto de hora de lo lindo que es lo que nos va a costar
alcanzar el Alto de Irati o Abodi Occidental situado a 1494 metros de altitud.
Desde
la cima que cuenta con un vértice geodésico sobre elevado, contemplamos la
carretera que pasa por el Paso de Tapla y un horizonte que está excesivamente
secuestrado por las nieblas que pugnan con pasar la frontera al norte y este y
que nos ocultan las vistas sobre el Orhi. Poco conocemos de los alrededores y
hoy no será día para ampliar conocimientos. Contábamos con menos nubosidad
pero…
Orhi cubierto y Abodi Oriental próximo.
El
viento que habían anunciado nos empuja enseguida de vuelta, es fresquillo por
no decir frío y nos certifica que el verano ya pasó y que con el biquini ya no
es suficiente para estos andurriales.
Entramos
al bosque por donde hemos salido y al abrigo del mismo también entramos también
en calor, las manos se habían refrescado incluso con guantes finos.
Cruce de una pista en la Sur de Abodi.
El
descenso hacia las Casas de Irati no tiene más historia que desandar camino
relajadamente contemplando los incipientes colores del otoño y recoger alguna
seta de las pocas que se ven.
Colores de Otoño en Irati.
Ya
muy abajo nos orienta la Ermita de la Virgen de las Nieves que reluce blanca en
medio de la fronda verde cálido del hayedo.
Ermita de la Virgen de las Nieves en Irati.
Llegados
a las Casas de Irati, los socios se suben a ver la Ermita y el Centro de Acogida
mientras que yo me quedo abajo contemplando la sesión de pesca de un mirlo
acuático junto al Puente del Irati.
Cuando
vuelven, lo han “refitoliau” todo, son las tres y media y es hora de comer,
cosa que hacemos al fresco del mediodía que no se ha calentado ni aún aquí, el
sol es determinante para el confort del día al aire libre.
Desde la Orilla Sur del Embalse de Irabia.
Media
hora después proseguimos el regreso por la Orilla Derecha del Irati que es por
donde hemos venido. Lo haremos sin prisa pero sin pausa porque el tiempo pasa.
Recorreremos
alrededor de 3 kilómetros y medio hasta alcanzar la Casa Forestal y todavía
unos metros más hasta tomar el camino que inicia el rodeo del embalse ahora por
su orilla sur y que nos tiene que depositar en la presa.
Caminando por la Orilla Sur del Embalse de Irabia.
Cambiamos
pista por camino pero el paisaje no cambia, siempre reducido por la fronda del
hayedo y la plancha del agua del pantano, aunque ahora resultará un poco más
entretenido incluso un puentecillo de hormigón nos permite atajar un profundo
entrante al sur de la irregular cubeta del embalse.
Acercándonos a la Presa de Irabia.
Casi
siempre cerca del agua pero siempre a una respetable altura sobre la misma
terminaremos de rodear el embalse alcanzando la parte sur de la presa. No queda
más que atravesar la y remontar unos metros para llegar a la carretera y al
aparcamiento en el que está nuestra furgo. Son las seis de la tarde y hemos
liquidado nuestra suigéneris etapa del GR11. en la que habremos recorrido una
distancia de alrededor de 29 kilómetros
con un modesto desnivel de 750 metros como mínimo.
La Presa del Embalse de Irabia.
Tomamos
la carretera y unos kilómetros más abajo en un praderío adjunto nos quedamos a
picotear un poco, beber, no demasiado pues no se ha hecho calor y tampoco hemos
sudado gran cosa y cenar.
Un
guarda para a nuestro lado y amablemente nos dice que no se puede pernoctar en
el Territorio del Hayedo de Irati. Consecuentemente, terminamos la cena,
recogemos y tras salir del recinto nos subiremos hasta la Fábrica de Orbaitzeta
y en el aparcamiento de la misma nos quedamos.
A
las nueve estamos horizontales dispuestos a aprovechar la noche.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¡Gracias por tu comentario! Responderé tan pronto como lo localice.