Allá espera Cuyalaret terriblemente acanalada.
Portalet de Aneu, Corredor de Gralleras
Norte y Nordeste de Cuyalaret.
15-12-2019.
Desnivel acumulado 300 m.
Distancia recorrida 4000 m.
Tiempo efectivo de marcha 02:00 h.
Sol.
Bastante fácil.
Con estas condiciones de nieve mejor no
sacar los esquís ni siquiera en terreno conocido y fácil.
El agua hay que llevarla en esta
temporada.
Juan Castejón, Rosa Mª. Martínez y Mariano
Javierre.
Mapa de Cuyalaret procedente de Iberpix. Vía en amarillo.
Después
de unos días sin salir al monte, que se nos han h echo largos, mi chica dice que
se quiere probar y buscaremos algo corto y con posibilidades de un descenso
regalado por si vinieran mal dadas.
Iremos hacia Cuyalaret por la sombra.
Podríamos ir a Cuyalaret y volver por
Espelunciecha o… pero yo no lo tengo demasiado claro después de unos días de
nevadas cuantiosas a los que le suceden lluvias importantes el viernes y
vientos hasta el sábado con lo que se inaugura una tregua anticiclónica.
Charrín charrán a ver si se ablanda la nieve.
A
las nueve y cuarto recogemos a Juan y alrededor de las diez, con una carretera
con menos tráfico que el miércoles más ceniciento, aparcamos en el Portalet a
1790 metros de altitud y al solecillo der la mañana.
Cómo nos engaña Cuyalaret.
Alrededor
de las diez y cuarto remontamos el cierre del aparcamiento con nieve muy dura y
nos calzamos los esquís cuando nuestra vista descubre el sombrío valle que
vamos a recorrer en busca de la luminosa cara nordeste de Cuyalaret. Sabemos
que de momento tendremos nieve dura sin más y yo no reacciono. Deberíamos haber
buscado otras orientaciones.
La mayoría de las fotos de hoy son de Juan.
Solamente llevamos
por delante una pareja, la chica arranca con cuchillas y enseguida vemos que
abandonan una vieja y dura huella que como el resto del manto nivoso ha sido
remojado a conciencia, laminado por el viento y helado lo suficiente para
convertirse en una cristalera.
El foqueo al oeste
es suave pero debajo del primer resalte decido poner cuchillas y proseguimos
resalte a resalte, son muy suaves, pero con esta nieve no resultan agradables.
Foqueando en la Nevera de Gralleras Norte.
Superado el
barranco aparece ya de cerca la Nordeste de Cuyalaret vestida con un profuso
traje de rayas pues ha debido de llover lo que no está escrito en los libros y
en la confluencia con el Corredor Norte de Gralleras decidimos tomarlo y
olvidarnos de Cuyalaret.
El arranque está
tan pendiente y tan duro que no se puede subir con cuchillas pues en estas
fechas no le da el sol, por lo que tenemos que renunciar a volver por
Espelunciecha.
Ya tenemos ganas de llegar al sol.
Tras dar la
vuelta, con algún problema, del inicio del corredor continuamos el ascenso de
la Nordeste de Cuyalaret. Juan ha marchado delante y nosotros tras remontar un
par de resaltes, ya al sol y comprobando que la nieve soleada sigue siendo dura
además de acanalada remontamos otro resalte y nos quitamos los esquís en el
rellano de cabecera.
Deberíamos haber ido a la Norte del Valle de Aneu.
Allí está un
francés que También se ha quitado los esquís y se sienta a almorzar. Nosotros
vigilamos a Juan pues hemos quedado en el Collado de Gralleras Norte. Juan hace
unas fotos en la cima y baja hacia el corredor. No ve nuestras huellas y sigue
corredor abajo hasta que finalmente nos ponemos en contacto a voces. Unos
minutos después nos juntamos para echar un bocado.
Todavía a la sombra de Gralleras Norte.
Mientras esperamos
llega otro francés, es de Olorón y pone voz, en un español muy aceptable, a mis
pensamientos: “Hemos venido a disfrutar y no a sufrir o tener un accidente.”
Foquear con nieve tan acanalada y dura obliga a medir cada paso clavando
cuchillas en los lomos de las canales en una nieve más propia de crampones.
Además el descenso sobre esta nieve te obliga a seleccionar lugar para cada uno
de los giros y las travesías entre giros son un infumable traqueteo atravesando
canales.
Aneu desde Cuyalaret.
Mientras
almorzamos, baja el grupo de Jorge Garcia-Dihins que ha subido por la zona
soleada pues han calculado mejor que nosotros.
La Canal Roya desde Cuyalaret.
La nieve se reblandecerá
ligeramente pero a mí me da igual: son las doce y cuarto, hemos echado un
bocado y nos vamos para abajo tratando de esquiar en nieve soleada ya que de
dura no nos vamos a librar.
Habrá que pelear con esta nieve que será de lo mejor del día.
Una ladera inclinada y durísima aunque sin
acanaladuras nos permite bajar hasta el barranco que conduce hasta el Col de
Aneu y desde allí, en lugar de bajar hacia el Centro Pastoral por nieve soleada
que quiere venir a buenas retornamos en busca de nuestra huella de subida.
Y de nuevo a la sombra.
Será otra elección
errónea pero hoy tenemos vendido ya todo el pescado. Nos servirá para recordar
que la cuña también existe y para derrapar tanto como no recordamos.
Recordando la cuña.
Es la una y media
cuando llegamos al coche con ganar de olvidarnos de la jornada con una nieve
infumable cuando se juntan la lluvia con el viento en el sombrío de uno de los
días más cortos del año.
En el Portalet y con ganas.
Hemos tenido
mejores días de esquimo pero lo mejor ha sido que mi chica lo ha llevado
razonablemente bien y estamos contentos a pesar de todo.
No hubo buenas condiciones este domingo, hubo que pelearlo y tener cuidado. El domingo se esperaba viento de Sur, pero ni vino ni subieron las temperaturas y tuvimos nieves incómodas, tan sólo en orientaciones muy Sur y sin viento llego a ponerse blandita y profunda...
ResponderEliminarNada que ver al sábado, pero la helada fue tan intensa que dejó todo como una piedra.
Pues sí, David! A nosotros no nos gusta la nieve dura que gusta a los esquiadores, preferimos la nieve primavera aunque lo paguen las rodillas.
ResponderEliminarNosotros salimos del Portalet y subimos todo el rato a la sombra y con el culo preto a pesar de las cuchillas. Salimos al sol completamente quemados.
Los de lameteoqueviene subieron por delante de nosotros pero lo hicieron al sol y desde el Centro Pastoral y cuando pasaron por encima de nosotros cada uno iba a su bola pues nadie de fiaba del otro, bueno, lo que se hacía en la nieve con los cantos no valía para nada; eso sí, no tuvimos niebla como vosotros, ya hubiera sido el completo.
Bueno, tiene que haber días de todos pero a nuestras edades hay cosas que cada vez nos motivan menos.
¡Que vaya bueno!
Hola Mariano.
ResponderEliminarCreo que el domingo estaba todo parecido, así que dudo que alguien disfrutará de una agradable jornada.
Un saludo
¡Hola Eduardo!
ResponderEliminarNosotros al menos no.
Hacía ya bastante tiempo que no íbamos a Cuyalaret por esa vía que acostumbra a ser muy agradable y menospreciamos las condiciones meteorológicas precedentes ante un día que en el Portalet no era frío en absoluto pero...
Desde luego, y ya al sol, visto que los de lameteoqueviene habían subido en guerrilla y bajaban como mejor podían y eso que esquían un guev y viendo que el tema no iba a transformar y que el descenso sería complicado para girar y atravesar canales, nos dimos la vuelta para liquiedar la jornada lo menos cruentamente posible.
Otro día será.
¡Que vaya bueno.