Aparcamiento de la Tejería, Ermita de la
Fabana, Barranco del Calcón, Collado de Petreñales, Raso de los Hongos y Arista
Oeste. Descenso por la Canal del Abadejo a le Ermita de la Fabana.
06-04-2021.
Salida 09:45 h. Llegada 16:30 h.
Sol.
Fácil.
Juan Castejón, Rosa Mª. Martínez y Mariano Javierre.
Al
Tozal de Guara hemos subido algunas veces y por caminos distintos. Tiene
algunos más de los que hemos recorrido y queremos conocer algunos más.
Es
6 de Abril de 2021 y nos bajamos hasta cerca de Aguas para buscar el
Aparcamiento de la Tejería sobre los 880 metros de altitud. Son las diez menos
cuarto cuando nos ponemos en marcha en medio de una mañana anticiclónica y
fresquilla pero divina para caminar. Puede ser que sea hoy la primera vez que
bajamos a Guará sin “penas de muerte” en el Pirineo Axial.
Queremos
hacer una circular en la que transitemos por el Collado Arnabón y la Canal del
Abadejo y para ello debemos tomar una pista que sale del aparcamiento al este y
marcha en busca del Calcón pero nos la tragamos, a la vuelta lo veríamos, y nos
vamos por el Camino de la Ermita de la Fabana.
La orientación que llevamos es buena, el Embalse del Calcón al que no hay que llegar está allí abajo pero no bajamos los alrededor de 100 metros que tenemos que perder y caminamos con dudas hasta alcanzar la Ermita de la Fabana y allí sabemos que no vamos por donde queríamos ir.
Una pista
desciende y nos deposita en el Calcón al que llega otra pista procedente del
este. Es un cruce de caminos: al norte de la pista está el cartel del Camino de
la Mudarra que no nos dice nada y al oeste tenemos el camino acartelado a
Petreñales y Guara que tomamos.
Enseguida entramos
en la Garganta del Calcón que reconocemos de inmediato y no teniendo
posibilidad de entrar en el Solencio de Fabana, por donde se encontraban
nuestros objetivos, decidimos ascender a Guara por allí. Hace ya algunos años
que lo recorrimos.
Caminamos sobre
las toscas del lecho del Barranco Calcón y bajo las espléndidas paredes de la
garganta hasta que unos cientos de metros después la garganta se amplía y se
convierte en un longitudinal valle que recorremos al norte, primero por el
lecho del barranco seco y muy llano, que
ce continuará fuera del mismo con continuos subes y bajas e instalado entre un
bosque mixto en el que domina el pinar sobre la encina.
De medio valle
para arriba el camino se despereza y asciende en busca de los Praderíos del
Collado de Petreñales donde conectaremos con el camino de ascenso por el
Barranco Lapillera.
Llaneamos por
medio del pinar, descendemos en busca de una depresión intermedia que mi chica
recuerda y proseguimos al este en busca de la Fuente del Chiunebro que está
como siempre y alcanzamos el Praderío del Raso de los Hongos.
Van a ser las doce
cuando al agradable sol de la mañana, se nos habían enfriado algo las manos,
echamos un cafétito caliente con un dulce y proseguimos. Estamos sobre los 1600
metros de altitud y queda un buen tajo todavía.
Ascendemos al este
una rampa de pinar que nos ha de situar en el campo abierto de la Sur de Guara
en la que las pedrizas se combinan con el boj y la genista y que está recorrida
por una infinidad de caminillos. Nosotros buscamos progresar cerca de la arista
oeste del pico como procedimiento de coger terreno más firme y cómodo.
Pasamos por la cabecera
de la Canal del Abadejo, remontamos el hombro calizo y cuando van a ser las dos
de la tarde alcanzamos la Cima del Tozal de Guara situada a 2077 metros de
altitud.
En la cima hay una
pareja que se va y nos hemos cruzado con otra, hay poca gente en Guara. La
mañana está espléndida y nos sentamos a comer junto al vértice geodésico. No haremos
muchas fotos ya que a pesar de que no hay calima si hay una débil concreción
de nieblas que mata la nitidez del paisaje amplísimo aunque distante.
Se está bien pero
nos abrigamos un poco y media hora
después nos vamos para abajo por donde hemos venido hasta el hombro, bajamos el
resalte y nos introducimos en las Pedreras de la Canal del Abadejo.
Se trata de un par
de pedrizas sucesivas pero separadas por una zona en la que hay que hacer un
quiebro por camino, la superior más larga que la inferior pero que nos permiten
bajar alrededor de 400 metros en un plis-plas.
La pedriza muere
en el Barranco del Abadejo por el que prosigue camino a través del mismo lecho
escalonado de calizas pulidas y que se
abre paso en medio de la vegetación clásica de Guara.
El barranco es una
flecha al sur, no ha sido limpiado, creo que nunca y el tránsito a duras penas
puede con la pujanza de la vegetación donde lo más agradable es el boj que nos
sirve como presa de mano. Incluso aparecerán un par de saltos que se faldean
por el este.
Ya muy abajo el
barranco se arrellana y el camino lo abandona para cruzarlo poco después de
orilla izquierda a derecha y proseguir en suave descenso. Nosotros vamos
buscando el camino que debe conectar desde éste hacia el Collado Arnabón.
No lo localizamos
a la altitud estimada y solamente
después de otro cruce de barranco más abajo
al salir del mismo localizamos un camino sin indicación ni hito alguno
que parece marchar al nordeste y enseguida nos llegamos al cruce de
caminos con el cartel de Mudarra. Son
las cuatro de la tarde.
Solamente nos queda remontar hasta la Ermita de la Fabana y desde allí llegarnos al aparcamiento cuando son las cuatro y media. Entre subes y bajas nos habremos ido a los 1350 metros de desnivel acumulado, pero eso no es ningún problema, en todo caso hemos repetido un camino que hiciéramos allá por 2009 pero… no todos los días se pueden hacer cosas nuevas aunque queramos y nos guste.
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