Vertiente Este del Collado y Pico Musales.
La Sarra, Llano Cheto, Ermita de la Virgen
de las Nieves, Presa de Respumoso, Majada, Collado y Cima de Musales, Collado
de Musales e Ibonciecho.
29-05-2020.
Salida 07:45 h. Llegada 13:45 h.
Sol.
Fácil.
Juan Castejón, Rosa Mª. Martínez y Mariano
Javierre.
Mapa de Musales procedente de Iberpix. Vía en amarillo.
Tenemos
claro que, como hace ya bastante tiempo que no hemos estado por Sallent, vamos
a inspeccionar nuestras “posesiones espirituales” en la Cabecera del Valle de Tena. Repasamos
opciones y con ganas de “fartarnos” de
paisaje nos iremos a Musales, que como dicen algunos, lo tiene de primera
magnitud. Juanillo dice que el Aguas Limpias tiene que estar bien y no se hable
más.
Es
viernes 29 de Mayo de 2020 cuando estamos aparcando en las inmediaciones del
Embalse de La Sarra situado a 1450 metros de altitud. Hemos elegido hacer el
recorrido circular en sentido de las agujas del reloj y realizar así en ascenso
el único tramo que puede presentar alguna complicación con la nieve pero
preferimos recorrer todo el Rellano de la Sarra de buen comienzo y así, cuando
volvamos por la pista, tendremos el coche cerca.
Centemplando el Mural de la Sarra.
Son
las ocho menos cuarto de la mañana cuando comenzamos a caminar, carretera
adelante en busca del Puente de las Faxas. Hay algún coche aparcado junto al
mismo y en el restaurante que debe andar de preparación.
Entrando al Llano Cheto.
El archiconocido
camino que es un GR., evoluciona al norte por la Orilla derecha del Aguas
Limpias pasando junto al Rellano de las Tornadizas y la Cascada de Balsaroleta
que baja suntuosa. La mañana junto al río está fresquilla e invita a entrar en
calor forzando la marcha Alguien sube delante.
Entramos
al Hayedo del Aguas Limpias que llaman de Soba y enseguida alcanzamos la
Cascada del Barranco de Soba que baja con más agua que el Aguas Limpias y que
cada vez es más difícil de contemplar debido a la vegetación de ribera que la
ahoga.
La Cascada del Paso del Pino.
Es
un delicioso placer caminar por el hayedo acompañados por los mágicos rumores
de las aguas que llenan de espumas nuestros hábidos ojos.
Poco
más adelante el Paso del Onso con su valla protectora en el suelo nos introduce
en el Llano Cheto que recorremos girando poco a poco al este y permitiendo que
nuestros ojos vayan buscando la Cascada del Paso del Pino y luego la Inferior
de Arriel a cuál más espléndida y espumosa. Hemos empleado una hora cumplida.
Muguetes de Camino a Respumoso.
Cruzado
el Barranco de Arriel bajo la cascada, el camino se inclina progresando ya al
este sobre el granito que aquí lo es casi todo pues de cuando en cuando
aparecen restos del metamorfismo que el Batolito de Panticosa produjo en época de formación de este
planeta. Aquilegias, muguetes y asfódelos ponen su toque de distinción floral.
La Sur de las Frondiellas sueltan agua por cualquier parte.
Con
el sol en la cara y los pies en el agua que baja abundante y saltarina de toda
la Cara Sur de las Frondiellas y anega el camino, ganamos altura mientras
contemplamos en la otra margen del río los Garmos Carnicero y Pipós. Entre todos
nos han de depositar en el Circo de Piedrafita.
Fachada Principal de la Ermita de la Virgen de las nieves.
Ya
cerca de la pared de la presa nos subiremos los 186 escalones que nos depositan
en el Ermita de la Virgen de las Nieves situada a 2115 metros de altitud, en
las inmediaciones de la presa. Son las diez y se nos ha escapado el cuarto de
hora que hemos empleado en recorrer el Rellano de la Sarra.
Tras la Presa de Respumoso la Majada de la Llena de Cantal.
Cruzamos
sobre la presa llenando nuestros ojos de Circo de Piedrafita, de momento con
Frondiellas, Faxa, Campo Plano, Llena de Cantal y Forqueta y en el extremo sur
tomamos el camino que rodea Respumoso, ahora por su orilla sur. En la otra
orilla ondea las banderas del refugio y escuchamos voces cercanas a la presa.
Respumoso en el Circo de Piedrafita.
Ganados
unos metros sobre el nivel del agua, el camino se alarga en busca de la Majada
de Llena de Cantal pero cuando casi nos encontramos Frente al Refugio de
Piedrafita y en el final de la masa de
agua más rotunda, abandonamos el camino para elevarnos al sur tras pasar el
barranco por el que vierte sus abundantes aguas hoy, la Majada de Musales.
Subiremos junto a una de las Ramas del Barranco de la Majada de Musales.
Enseguida
alcanzamos el camino que se elevará poco a poco hacia el Collado de Musales que
es nuestro objetivo, a través del praderío y en dirección sudoeste al encuentro
de la nieve.
Los
neveros son escamoteables pero alcanzado el Rellano de la Majada de Musales la
nieve se hace continua a 2350 metros de altitud y al sur tenemos la pala que se
encumbra en busca del Collado de Musales.
La nieve es escamoteable en la Majada de Musales.
La
nieve está deliciosamente blanda pues está soleada desde el amanecer y nos
permite un avance cómodo hasta alcanzar la pared para ponerse de pie. Subiremos
de frente sin necesidad de ningún material los alrededor de 100 metros de
desnivel que nos depositan en el final de la nieve.
De
allí para arriba quedan una treintena de metros metámórficos y descompuestos
que se suben bien al estar el terreno
seco.
Terminando el nevero bajo el Collado de Musales.
En
el Collado a 2565 metros de altitud
tomamos la alomada y fácil arista del pico que bastante transitada y en poco más de diez
minutos nos deposita en la Cima del Pico Musales situada a 2653 metros de
altitud. Son las once y cuarto y nos sentamos a almorzar y a contemplar
paisaje, que a eso hemos venido.
Foto de Cima en Musales.
Arrancando
del Gállego que es desde dónde venimos y en sentido horario se contempla: toda la Norte de la Partacua
desde la Forqueta de los Palomos hasta la Pala de los Rayos, los Circos de
Bucuesa y Balsera desde Samola Alta a la Moleta, los Circos de Aspe, Acher y
Bisaurín, La Arista de Ferraturas desde Estremere al Collado de Soba, Lurien,
los Arrieles, la Lie y Pallas, el Circo de Piedrafita con los Garmos Carnicero
y Pipós, Frondiellas, de Solano a Cristales, Cambalés, Aragón, las Faxas, Campo
Plano, Llena de Cantal, Zarre, Piedrafita, Tebarray, Forqueta y Sancha Collons;
Infiernos, Garmo Negro, Argualas, Garmo de la Mina, Zerrez, Sabocos, Roya,
Blanca, Roya, Guara y Fragineto y las Foratatas. Alguno me habré dejado pero
bueno.
Solano, Crestas del Diablo y Cristales desde Musales.
Alrededor
de las doce iniciamos el descenso desandando la arista que hemos subido y tomando
el Camino que, vuelta a vuelta y al sur se baja hasta el Ibonciecho. Se trata
del camino directo de Sallent al Circo de Piedrafita, utilizado en tiempos de
la construcción de los embalses de la zona. Menuda soba, bajarse a comprar
alguna cosa a Sallent y subirse a los Barracones de Respumoso pasando por el
Collado de Musales, por donde pasaba también el teleférico instalado para la
subida de materiales entre el final de la Pista de Ibonciecho y Respumoso.
Iniciando el descenso hacia el Iboncicho.
Atajamos
bastantes de las innumerables lazadas del camino en una ladera metamórfica con
algunos pasos obligados y nos llegamos hasta el Ibonciecho que nos regala su
estampa sublime y esmeralda a 2225 metros de altitud.
Un primer plano del Ibonciecho
Siguiendo
camino enseguida nos llegamos a la Casa y el Pasivo de Ibonciecho donde tomamos
la pista a la que el camino ataja sistemáticamente.
Sallent en busca de la Pista de Ibonciecho.
Cogemos
agua en el Barranco de Sancha Collons y tras hacer el único tramo largo de pista desde el Paraaludes hasta las
inmediaciones de la Majada del Cambrillón, atajamos el rellano de la majada y
nos introducimos en un barranco cubierto de pinar que nos regala una sombra y
un descenso sencillamente encantadores mientras cruzamos la pista media docena
de veces.
Pisteando con Foratata.
Solamente
quedará recorrer el último kilómetro de la misma pasando por el desvío a
Sallent para llegarnos a la Sarra y al coche donde terminamos esta clásica
circular, para mí tan clásica como la de los Ibones de Panticosa, cuando son
las dos menos cuarto.
Han
sido hoy 1200 metros subidos de una tacada y bajados de otra, no creo que hayamos
perdido ni siquiera una decena de metros rodeando Respumoso.
Garmo Pipós, 3-6-15,
Garmo Carnicero, 26-8-14,
Forqueta, pico de la, 10-9-04,
Como aprovechas tú que puedes!!! Que chula la foto del Ibonziecho!!
ResponderEliminar¡Hola David!
ResponderEliminarTeníamos ganas de volver al monte como supongo que tienes tú.
Desde Sabi ha sido bastante fácil a partir de contar con movilidad dentro de la Provincia pues tenemos el monte a amano. Nada que ver con Zaragoza por ejemplo, que carece prácticamente de montaña y supongo que estaréis algo cargados de tanto confinamiento, tanta fase y también tanto contrasentido.
El monte está precioso incluso con mis pobres fotos y no hay que preocuparse, muy pronto nos darán, que nos la hemos ganado, suelta y el monte parecerá maravilloso, pues lo es y no puede ser de otra manera.
¡Cuídate y que vaya bueno!
Por cierto, el verde esmeralda del Ibonciecho solamente es igulable por los de Opale en el Marcadau francés.
Hola Mariano! Zaragoza no tiene los Pirineos, pero esconde bonitas rutas, menos majestuosas, pero no faltas de encanto. Las sierras de Vicort y Algairen reúnen unos cuantos bonitos paseos, no saben a cimas, pero merecen la pena.
EliminarYo aún tardaré a subir al Pirineo, desde hace dos años me vine a vivir a Soria, aquí la "desescalada" va a otra velocidad. Soria es otro paraíso, y es tiempo de explorar lo cercano, para disfrutar no hacen falta ni desniveles ni kilómetros, lo que no quita, para que en cuanto pueda, visite a mis adorables Pirineos...
¡Hola de nuevo David!
ResponderEliminarLa altitud de un monte y el desnivel a ganar para alcanzar su cima son factores pero en ningún modo únicos para disfrutar del monte. Rincones bellos los hay, si se buscan, en cualquier parte y no solo en Pirineos o Alpes por citar algunas cordilleras.
Soria nos cae relativamente muy lejos y es una zona auténticamente desconocida para nosotros que hacemos monte en nuestros alrededores. Los piris siguen aquí esperando a todo aquel que quiera recorrerlos.
¡Que vaya bueno!