Aparcamiento de Espelunciecha, Cuello
Garmé, Aparcamiento de Anayet, Barranco de Lapazuso y Cara Oeste.
27-03-2021.
Salida 11:30 h. Llegada 16 h.
Sol.
Fácil.
Rosa Mª. Martínez y Mariano Javierre.
Lapazuso
es un monte que conjuntamente con Campo Troya dominan el Valle de Anayet. Es
una montaña amable y con acceso corto desde el aparcamiento del valle pero
cuando el acceso al aparcamiento está cerrado pues ya es otra cosa.
Acostumbramos
a subir cada temporada de esquí, pero este año, al estar Formigal Cerrado pues
no habíamos estado. Hoy 27 de Marzo de 2021 vamos a pesar de todo.
Una
opción consiste en portear la pista hasta el aparcamiento desde el Corral de
las Mulas pues es allí donde se alcanza la nieve pero nosotros haremos una ruta
sobre la nieve a partir del Aparcamiento de Espelunciecha.
Son
las once y media de la mañana cuando a 1770 metros de altitud, comenzamos a foquear tras un porteo de cinco minutos escasos. Esta
noche hemos cambiado la hora adelantando los relojes y la nieve está todavía
muy decente en una mañana cálida y soleada.
Hay una treintena
de coches aparcados pero cruzado el
Barranco de Espelunciuecha y orientados al sur hacia el Cuello Garmé nos
quedamos casi solos pues la mayoría marcha hacia el Puerto de Canal Roya.
Foqueamos una
ladera suavemente inclinada que se puede recorrer por cualquier parte y en poco
más de media hora alcanzamos el Cuello Garmé situado a 2030 metros de altitud
desde donde visualizamos el Valle de Anayet y nuestro lejano objetivo, la Punta
Lapazuso.
Para ello quitamos
pieles y nos echamos para abajo siguiendo la pista que desciende al
Aparcamiento de Anayet, fuera de la misma la ladera está completamente pelada
pues una ladera muy solaneras.
Tenemos que perder
300 metros girando sobre una agradable nieve primavera que nos obliga a
empujarnos un poco en el rellano hasta el Puente sobre el Barranco Culibillas.
Allí con la impecable presencia d Campo de Troya volvemos a poner pieles y
comenzamos el segundo remonte del día.
El Valle de Anayet
está a reventar de nieve de dos colores como toda esta parte del Pirineo, por
lo que se puede foquear por cualquier parte dada la suavidad de los resaltes
que conforman la zona baja del valle.
Durante todo el
descenso hemos visualizado frontalmente el Barranco y la Punta Lapazuso que
están impecables de nieve y con alguna vieja huella de esquís por el fondo al
que entraremos sobre los 1950 metros de altitud atravesando la zona de grandes
bloques.
La Majada del
Barranco Lapazuso se puede subir por cualquier parte pero nosotros lo hacemos
foqueando al sur por su ladera izquierda, amable y muy soleada. Son tres
resaltes suaves los que nos depositan en el Rellano del Corral Ciego ya por
encima de los 2150 metros de altitud.
Dejamos a nuestra
derecha la suave rampa que conduce a la Cubeta del Ibón de Lapazuso y tras
poner cuchillas por si acá, giramos al este e iniciamos el ascenso de la pala
cimera del pico.
La pala está
seccionada por un barranquillo en el que entramos tras rodear en suave ascenso
un dorso que baja de la arista. Está vestido de nieve costra dura pero no hay
problemas para flanquearlo.
Alcanzado el
barranquillo que remontamos una treintena de metros nos salimos del mismo para situarnos
en un hombro desde el que afrontaremos el resto de la pala cimera.
Bordeando un nicho
de viento iniciamos una zeta con una largada importante que nos permite cruzar
la pala hasta las rocas y volver al sur entre las mismas hasta la cima de Punta
Lapazuso situada a 2272 metros de altitud. Podríamos haber subido sin las
cuchillas como suponía pero no nos han molestado.
Son las dos de la
tarde y en la cima hacemos unas fotos, contemplamos una mitad de Formigal, la
Partacua, Tendeñera, Argualas, Infiernos, Frondiellas Balaitus, Midi y más
cerca Campo Troya, Tres Hombres, Tres Huegas, Royo y Culibillas. El Ibón de
Lapazuso está cubierto completamente de nieve.
Comemos sentados
en unas piedras disfrutando de un mediodía espléndido y media hora después nos
montamos en los esquís e iniciamos la vuelta: la nieve de la pala cimera está
en su punto y disfrutamos como unos chiquillos con zapatos nuevos.
Ya en el barranco la
nieve está demasiado blanda en tan abrigado lugar, pero se esquía bien aunque
pese en las piernas. Seguiremos con el descenso del valle que al estar más
abierto al viento conserva mejor la nieve que se esquía estupendamente.
De nuevo en el
Puente sobre el Culibillas ponemos pieles y con paciencia remontamos los 300
metros que hemos bajado y que se nos llevarán media hora larga, menos pesada de
lo imaginado. Llegaremos al Collado Garmé con un grupo que viene de los Ibones
de Anayet.
Hacemos la última
transición del día y montados en los esquís nos vamos para abajo en busca del
Puente sobre el Barranco espelunciecha para finalizar la jornada en la Zona
de Servicios de Espelunciecha cuando son
las cuatro de la tarde.
Hemos disfrutado
de un día redondo en el que hemos esquiado bastante ya que el desnivel
acumulado se habrá ido a alrededor de 1100 metros. La cerveza que hemos
enterrado en la nieve está medio descubierta lo que da una idea del deshielo
que se está produciendo, que llena todos los torrentes de agua.
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